Me humillaron con solo 11 años 1

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Mi familia siempre a practicado el naturismo , mi padre Juan 45 años cuerpo atlético,y peinado a lo Elvis, siempre a tenido muchas novias, realmente era muy guapo, se caso con mi madre María 43 años, era bajita 1, 65 pero tenía buen cuerpo, tenía unas tetas pequeñas y siempre tenía el pubis rasuradito, tengo una hermana 4 años mayor que yo, como he dicho en esa época tenía unos 11 años, normalmente en casa íbamos desnudos siempre que no fuéramos a recibir alguna visita, lo del nudismo ya lo practicaba mi abuela por lo que viene de familia por parte de mi madre, que poco a poco se le fue inculcando a mi padre y ya cuando nacimos mi hermana y yo pues lo veíamos como algo normal.

Mi madre siempre me decía
– Fenandito esto no lo puedes contar a nadie ya que en muchos lugares no está bien visto, por ejemplo a tus amigos, a tus profesores, ya que te harían muchas preguntas y nos puedes meter en algún compromiso

-De acuerdo mamá, ya me lo has dicho tropecientas veces

Cuando íbamos a la playa nudista, me sentía bien, feliz nadie te miraba iban a lo suyo,jugaba con mi hermana, mis primos y daba lo mismo si íbamos desnudos o vestidos.

Pero ocurrió un día, habló que tenía unos ocho años de edad,estaba jugando con unas vecinas en el portal de mi casa era verano, llevaba una camiseta verde de tirantes y unos pantalones cortos blancos, no llevaba ropa interior, mis amigas Raquel de 8 años muy guapa rubia con ojos azules, llevaba un vestido de flores que le quedaba genial, Natalia su hermana de 7 años rubia como su hermana pero no tan guapa, vestía una camiseta rosa y pantalones verdes ellas vivían en el primer piso y Rosalía 9 años morena con un vestido tejano,era la del segundo, yo vivía en la planta baja, mi piso era más grande que la de mis vecinas, ya que teníamos patio interior , todas las tardes nos juntábamos antes de irme con mis amigos en el portal, ese día había llovido y con tan mala suerte que tropecé y fui a caer en el único charco que había, me puse perdido los pantalones, pero seguimos jugando a las canicas, mi madre me vio por la ventana y vi como salía por la portería, se sentó en el escalón y traía algo debajo del brazo

– Fernandito ven un momento, corre
– Que pasa mami
Entonces me cogió y sin decirme nada me bajo los pantalones allí en medio, me quedé mudo sin decir nada, me di la vuelta y allí enfrente a solo dos metros estaban mis vecinas con los ojos como platos, y yo allí con solo la camiseta y las bambas, mire hacia bajo y rece todo lo que sabía para que la camiseta me cubriera el pene, pero no la camiseta era de hace un año y me llegaba por la cintura, por lo que mi pene, mi pichina como decía mi madre estaba allí a la vista de todo el mundo, intenté tirar sin éxito de la camiseta hacia abajo , pero los intentos fueron en vano,no me la podía cubrir y ni si quiera pensé en taparme la picha con la mano, que vergüenza, me puse todo rojo, es distinto que tu familia te vea desnudo e incluso en las playas o el camping me vieran desnudo ya que no conocía aquella gente por lo que me daba igual, pero ellas eran mis vecinas, compañeras del colegio.

En esos momentos las vi cuchichear entre ellas, no escuché lo que decían, pero por fin mi madre sacó los otros pantalones y me los puso, no creo que tardara más de trenta segundos pero a mí se me hizo una eternidad, mi madre entró en el portal y seguimos jugando como si nada, pero no habrímos la boca en toda la tarde, supongo que fueron los nervios pero perdí la partida a las canicas, me fui directamente a casa y me metí en la habitación .

Al día siguiente me levanté y como cada mañana me dirijo al colegio que estaba a quince minutos andando desde mi casa, en esos momentos salió Raquel, dirección del colegio, me saludo

-hola Fer
– hola Raquel, con lo que paso ayer quiero.

– No te preocupes no es la primera vez que veo un pene
– pues tu cara de asombro
– ya lo comenté con Natalia,que para tu edad tu pene es muy pequeño,incluso mi primo de cinco años la tiene más grande, pero es bonita.

– Gracias

Me quede más tranquilo, ya sabía que la tenía pequeña, pero por lo menos era bonita y si me lo dice la chica más guapa de la clase
Continuará .