Mi mujer me sorprende
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Ese sábado, como tantos otros nos reunimos para cenar juntos las cuatro parejas, esta vez tocaba en casa de Jorge y Lilián. Éramos parejas jóvenes y todos amigos de toda la vida. Eduardo y Catalina, Anibal y Carmen y yo Nacho, con mi esposa Isabel.
Ya tarde, después de cenar, bailar un poco y contarnos cosas que ya todos sabíamos, empezaron a retirarse-
Se fueron Eduardo y Cata, Anibal y Carmen y cuando me iba a retirar Lilián me dijo de quedarme un ratito para darle opinión sobre unas fotos que había tomado, dado que yo en algún momento trabajé como fotógrafo, pero además, me apasiona y he estudiado bastante del tema.
Trajeron una cantidad de fotos enorme y nos pusimos a mirarlas, desde unas de un viaje a Rio, hasta los retratos que eran el punto en cuestión.
Entre los retratos, un descuido, apareció una foto de Lilián totalmente desnuda, debo decir que es una de esas mujeres llenitas, algo bajita pero con un físico casi perfecto, no le sobra ni le falta nada en ningún lugar.
También, nobleza obliga, Jorge es un tipo fachero, con muy buena pinta, siempre fue quien ligaba mas chicas entre todos los amigos, mi mujer, es mas bien delgada, alta, ojos entre celeste y verde y con cara de no haber matado nunca una mosca, aunque en la cama, nadie diría que es una fiera. Yo soy un flaco normal, no tengo nada que me destaque.
Cuando apareció esa foto, me pareció que Lily se ruborizó un poco, pero no le dio mucha importancia, y seguimos mirando fotos.
En un momento me pareció que se pegaba a mi, mas de lo normal pero tampoco era una cosa tan descarada que me hiciera sentir incomodo. Y vi que Jorge, mientras mostraba las fotos del viaje, hacía un masaje en el cuello a Isa. Ella le dijo, quédate quieto, pero el siguió y nadie dio mas importancia a eso.
Otro descuido, y otro y otro mas, y había una cantidad de fotos suyas, desnuda y en poses muy sensuales. Me quedé mirándola, esperando su comentario y sentí que se pegaba todavía mas a mi. Pero no dijo nada.´´
De pronto se levantó y me dijo: Nacho, ayudame a preparar un café y marchó hacia la cocina.
Yo la seguí y cuando llegué ya sin disimulo comenzó a pegarse a mi a refregarme el culo y las tetas con cualquier excusa.
Ojo que no soy de fierro y vas a hacer que se me pare, le dije
Déjame ver, y así por encima del pantalón comenzó a sobarme la pija.
Hey, están ahí cerquita, que querés hacer?
Quiero chuparte un poquito, me dejas? Mientras bajaba el cierre y sacaba mi verga.
Lily , que están ahí , nos van a ver.
Nada, no van a venir porque ellos también se van a entretener.
Nooooo, jajaja, vos no conocés a Isa. En cuanto Jorge quiera hacer algo va a armar una bronca que no te imaginas.
Papi, el se la va a coger hoy , vos aprovechá que yo te voy a hacer gozar como nunca te imaginaste.
A esa altura, ya tenía mi pija bien dura en la boca y la chupaba con unas ganas que hacían pensar que lo que decía no era broma, que me iba a hacer gozar como nunca.
Pero estaba lo de mi esposa y Jorge ahí cerquita, yo sabía que Isa no iba a aceptar por nada del mundo, y aunque me moría de ganas de tener a Lily, tenía miedo de nuestros cónyuges.
Espera, espera, dejame ver que hacen y que no nos vayan a descubrir,
Queres ver como se la coje? Eso es lo que queres=?
No, no se la va a coger, quiero ver que hacen
Me asomo y veo que Jorge le está acariciando las tetas, por encima de la remera, y a Isa que le quitaba la mano, pero sin mucha convicción. Dejame quieta, que queres=? le decía.
Nada, quedate quieta, mientras iba metiendo la mano ya por debajo de la remera.
Viste, Nacho, ellos van a coger y nosotros también, me decía Lily.
No. Ella no va a dejarlo
Yo no podía creer, pero Jorge empezó a besarle el cuello, muy cerquita de la oreja y ella no le dio el cachetazo que yo estaba esperando,
Jorge, compórtate, quedate quieto,
Si me estoy comportando, decía mientras la besaba bajando hasta sus tetas.
No Jorge, no sigas.
Yo no creía lo que estaba mirando, Jorge ya metía mano por todos lados y ella le tomaba las manos, pero no hacía nada mas por evitarlo, mientras Lily, que parecía saber todo eso, ya estaba otra vez con mi pija en su boca y recién ahí me di cuenta de lo dura que la tenía, de cuanto me calentaba que estuvieran acariciando a mi mujer.
Jorge la tomó de la mano y empezaron a caminar hacia el dormitorio, Isa decía, donde me llevas? No quiero
En la puerta del dormitorio, empezaron a besarse y el la empujó suavemente hasta que ella cayó en la cama, con el encima.
Yo me liberé un poco de Lilián, para seguirlos-
Te gusta ver como se la coje? Yo prefiero no mirar, me decía
Hasta ese momento yo estaba esperando que armara un lío grande pero cuando le empezó a bajar el tanga y ella levantó la cola para facilitarlo, ya vi que era cierto, que me iban a coger a mi amada Isa.
Ya me entregué a gozar de la gran mamada que me hacía Lily, que se había quitado la ropa y estaba solo con un tanguita negro, que la hacía ver más linda y más deseable todavía.
De todas formas seguía mirando y no podía creer, aunque me excitaba cada vez mas.
Que hacés? No voy a dejar que sigas, ni lo pienses
Abrí un poquito las piernas, se buenita
No, ni loca – pero las abría-
Jorge se quitó los pantalones y tenía ya la verga durísima, y se la empezó a pasar por la conchita,, mientras yo miraba y lily seguía chupándomela
No, no Jorge, no lo hagas
Solo la puntita, abrí las piernas un poquito,
No, no, ni la puntita ni nada.
Empezó a meterle pero no solo la puntita, se la puso toda y empezó a bombear, mientras Isa gemia, gritaba, lloraba y yo me calentaba cada vez mas
Ya no pude mas y sin aviso acabé en la boca de Lily, sin previo aviso, aunque no pareció importarle eso, sino que me vine y pensó que ya se había terminado todo.
Cuando me dí cuenta, seguí acariciándola, esas caderas, esas redondeces, ese culito que tan loco me tenía y otra vez estuve a punto-
Me tomó de la mano, me llevó con mucha tranquilidad hasta el otro dormitorio y cumplió su promesa, nunca he gozado tanto un polvo como ese, no se si fue la excitación previa de ver a mi mujer con otro o que en verdad Lilián es una hembra que mete miedo, algo espectacular.
Nunca lo hablamos en casa con Isa. Se también que no lo vamos a repetir, o eso es lo que pienso, porque a veces, mi mujer me sorprende
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!