Morboseando con el señor de la basura

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por KitaFerDancer.
El día de ayer, me desperté y me metí a bañar, salí del baño e hice mi ritual diario de poner crema a mi cuerpo, cepillé mi cabello, abrí mi cajón de ropa interior, saqué un conjuntito de color pastel, con una tanguita de hilo muy coqueta y un bra con push up para realzar mi pecho, enseguida me puse unos leggins grises y una blusa blanca de tirantes y tomé mi bolsa con las cosas del colegio, tomé un café en un termo y un sandwich que preparé la noche anterior y salí de mi casa, caminé por donde siempre lo hago para llegar al colegio y justo a la vuelta de mi casa, vive un señor ya bastante viejo, que vive de la basura, recogiéndola y vendiendo lo que es rescatable, me recuerda al señor que sale en la película de "amores perros" (los que la vieron sabrán a quien me refiero).
Se dice que este señor no habla con nadie y que incluso está un poco loquito, nadie sabe de su pasado solo se le ve por todo el barrio con un carrito de metal, buscando cuanta cosa le pueda servir en los basureros con sus ropas sucias y rotas y un aroma que no es nada agradable.
Se sabe que vive en una casa que apenas se mantiene en pie, hecha de láminas, cartón y restos de madera.
Y frente a esa casita yo iba caminando cuando escuché que desde dentro de la casita me decían "ssshhhh!! Niña!!!" Yo me detuve a mirar, pero estaba bastante oscuro en el interior así que decidí acercarme a mirar de cerca, alcancé a ver la silueta del viejo y aspiré el hedor como de putrefacción al interior.

El señor quien estaba sentado en una tabla apoyada en dos tabiques se levantó y me dijo: "chiquilla puedes ayudarme?" Le contesté que sí! En qué puedo ayudarle? Abrió su abrigo que le llegaba hasta la rodilla y vi que tenía su miembro de fuera, un pene flácido y considerablemente largo y delgado, se veía sucio como el resto de la piel que se podía ver al no estar cubierta por los ropas que usaba.
Me dijo con su voz ronca y lenta "quiero que veas como me deslecho para ti mamita" al mismo tiempo que empezaba a tocarse su miembro el cuál yo miraba con cierta sorpresa, pero que no daba signos de vida, continuaba colgado y muy aguado.

Continuó diciéndome: "te gustaría ser mi putita?" Te he visto todos los días desde que eras más morrita y te has puesto bien rica, además por como te vistes se ve que eres bien puta y te encanta la verga" Yo me empecé a reír y le contesté que también lo había visto desde que era más pequeña y siempre me había dado cierta lástima verlo en las condiciones en las que vivía y que obviamente no me interesaba ser su novia.

El me interrumpió y me dijo: "novia? NO niña, te equivocas, no me interesa que seas mi novia, no quiero una relación con una puta calienta vergas como tú! Quiero que seas mi PUTA y nada más, quiero hacer las cosas más cerdas que me imagino contigo, quiero apretar tus tetitas como si fueras una vaca, exprimirlas hasta dejártelas moradas, quiero mearte tu carita bonita y meter mi comida que encuentro en la basura en tu ano y que la saques como si la estuvieras cagando y comer directo de tu ano, quiero verte mear y cagar mientras me la jalo y lleno tus ropitas finas de mi leche y que te vayas a casa con tus papis con mi leche en tus calzoncitos. (mientras me decía todo eso, yo empecé a sentir un calorcito muy rico en mi vagina y sentía como ésta se empezaba a humedecer y sorprendentemente la verga del viejo empezaba a engrosarse y a levantarse lentamente, mientras se masturbaba con su mano) seguía diciéndome: quiero que pases en las mañanas así bañadita como ahorita oliendo a jabón, perfume y tu ropita con olor a detergente y que salgas de aquí con olor a mi leche y a la comida podrida que la mayoría de las veces tengo que comer y sobretodo que huelas a caca que te voy a sacar con mi lengua y quiero que veas como me como tu caca mientras te masturbas tu almejita esperando a que te de mi leche.

Sin pensarlo metí mi mano dentro del leggin, debajo de mi tanguita, me di cuenta que estaba empezando a humedecerla y comencé a meterme dos dedos mientras veía la verga del viejo que ya estaba logrando más firmeza, me saqué una teta y la apreté con fuerza mientras seguía masturbándome con mis dedos, me di cuenta que estaba dentro de la casa de lámina, pero a la vista de las personas que pasaban por la calle, que no eran muchas, cerré un poco la puerta de madera donde apenas entraba un poco de luz, casi estaba oscuro, pero alcanzaba a ver perfecto la verga del señor y su cara, sus ojos rojos vidriosos que estaban perdidos en mi teta, los 2 empezamos a gemir al mismo tiempo, al mismo ritmo que yo metía y sacaba mis dedos el se masturbaba, nos vimos a los ojos y aumentamos la velocidad, nuestros gemidos quedaron ahogados y nos estremecimos, vi como salían chorros y chorros de leche de esa verga y por poco llega a salpicar mis tenis de tela blancos, estaba demasiado excitada, jamás creía que el viejo fuera tan cerdo, no me esperaba que me hablara así y mucho menos que tuviera semejante verga y que aún le respondiera a pesar de la edad y que sacara chorros con tanta potencia, cerré mis ojos y tuve un rico orgasmo con flujo abundante, saqué mis dedos mojados y apreté las piernas, entonces acomodé de nuevo mi tanga y sentí como se mojó inmediatamente, le mostré mi mano al viejo con mis dedos mojados y le hice una seña de adiós.

Abrí la puerta y salí caminando rápido con el corazón acelerado, el horrible hedor aún en mi nariz y riéndome de lo rico que había sentido y de la locura que acababa de hacer.