Negocios
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Tengo dos amigos, raul y jose nos conocemos desde mucho tiempo, él conoce a mis hijas, a mi esposa, prácticamente tenemos varios años de amistad, desde el colegio.
Ya con el tiempo hemos madurado, yo tengo mis 45 años, ellos casi igual, solo que son solteros, se preocuparon más por hacer crecer sus empresas y negocios, a diferencia de mi, que tengo una familia, nunca he sido bueno para los negocios, pero me va bien.
Tengo dos hijas, una se llama Kiara, es blanquita, tiene un cabello muy bonito, al igual que sus piernas, posee una colita bien respingadita que vuelve loco a cualquier hombre, y unas tetas grandecitas, lo cual ella lo muestra con orgullo, en fin, Kiara es una hermosura a pesar de sus 17 años.
Por otro lado, tengo a mi hijita, mi engreída, de 14 años, se llama Mónica, es la más traviesa, es hermosa,piel clarita,sus ojos son claros, al igual que su cabello castaño claro, sus senos por su edad, están en crecimiento, por eso los tiene médianos pero provocativos para cualquier macho, sus nalgas son preciosas, al igual que su hermana, es bellísima, y codiciada por los jovencitos del barrio.
Después del trabajo, siempre llamo a José y Raúl, para ir a tomar unas copas, ellos mayormente paran libres, ya que son jefes de sus respectivas empresas, y solo van para que verifiquen que todo esté bien (pfff que envidia.
)
Lo bueno que después de unas copas, me dejan en mi casa, ya que ellos tienen chofer.
Cierto día, en mi trabajo, realice un mal cálculo en mis cuentas y note que iba a salir con una gran deuda, más aún que un empleado mio, me acabo de robar por lo bajo, en total, iba a salir con un fuerte déficit, lo cual me iba afectar demaciado en mi negocio, me sentía perdido, apenado, era más de 200 mil dólares perdidos, y ya se venia los días de pago a los bancos y a los personales, y gastos de mi miniempresa.
Saque una botella de whisky y empecé a beber solo en mi despacho, meditabundo, pensativo, y preocupado me sentía, era hora de buscar una solución, y pensaba de mil maneras, como conseguir ese dinero en poco tiempo, seguía bebiendo, ya me sentía mareado, me di cuenta que no escuchaba ningún ruido fuera de mi despacho, mire la hora y me sorprendí que ya era de noche, salí y me di cuenta que todos se fueron, me había quedado completamente solo en medio del silencio, hasta que empezó a sonar mi celular que estaba en mi despacho, me acerque y cogí mi teléfono para contestar la llamada, me di cuenta que era Raúl.
-si?? Aló??, Respondí.
-hey mi hermano, me dijo Raúl, con un tono alegre.
Se escuchaba por el celular que Raúl estaba en plena fiesta, ya que se escuchaba música y mucha gente.
Ven, quiero que célebres conmigo en mi casa, no sabes lo que me acaba de pasar a mi y a José, me dijo.
Yo guarde silencio un rato, en realidad estaba sin ganas de estar en una fiesta, así que después respondí.
– lo siento Raúl, hoy no, no tengo ganas, así que para la otra será.
-te sientes bien, te escucho como si estuvieras ebrio, pasó algo? Me preguntó.
– no!, No no.
Nada, bueno la verdad si.
– ya lo presentía, por tu forma de contestar y por tu tono de voz, me dijo preocupado.
Pensé un rato, así que respire profundo y pensé que estar solo en mi oficina y beber no me iba a servir de nada, así que pensé que sería mejor animarme un poco, y respondí a Raúl
– dile a José que iré ahora para allá, respondí
– espera, me dijo, ahora mando a uno de mis choferes para que te recoja, no creo q puedas conducir así, estás ebrio.
-ya Raulito, gracias, le respondí y corte la llamada.
Sentado en mi despacho, espere a que llegue el auto,pasó media hora, y tocaron el intercomunicador, conteste y era el chofer.
Me fui a la salida y me di cuenta que el auto era un deportivo Audi R8, un hermoso juguetito, me subí al lado del conductor, me emociono un poco ya que nunca subí a uno de esos, el rugir de su motor era increíble, era obvio que era una adquisición nueva de Raúl.
Una vez llegado a su enorme casa, por no decir que era una mansión, me di cuenta que había muchas personas, no entendía que estaban celebrando Raúl y José, entre a la casa y entre la multitud busque a mis amigos, fue cuando José me encontró y me llevo donde Raúl.
Una vez que llegue a Raúl, me dió un abrazo amical, nos dirigimos a su despacho, para platicar, era obvio que querían saber que me sucedía.
Llegamos y nos acomodamos en sus lujosos muebles, me sirvieron un vaso de whisky, y empezamos a beber mientras les comentaba lo que me sucedió, ellos me escuchaban cada palabra los que les decía, una vez terminado de explicar mi caso ellos me preguntaron
– hermano mío, me da pena lo sucedido, cómo te podemos ayudar?? Me preguntó Raúl.
– yo entre vergüenza le respondí, quiero que me presten 200 mil dolares.
Se guardó un poco el silencio, José me miraba al igual que Raúl hará que José rompiendo el silencio me preguntó.
– eres capaz de pagar esa deuda ??? Es mucho dinero, y tu lo sabes.
– tu cómo empresario sabes que negocios son negocios, dijo Raúl.
-por favor amigos, no sé qué hacer, les dije.
Cogí mi vaso y llene de whisky y me lo tomé de corrido todo el contenido, haciendo que Raúl y José se sorprendan la forma de como bebo.
– sabes, me apena proponerte algo, no quiero perder la amistad que tenemos contigo, me dijo José.
Hace tiempo que queremos proponerte algo tanto como Raúl y yo, pero nos acobardamos, y creo que este es el momento perfecto para decírtelo.
Yo confundido escuchaba a José, no entendía que querian, pero si era la única forma de que me ayuden y salir del problema pues aceptaría todo.
– ok muchachos, digan que es lo que deseen y aceptaré.
-estas seguro? Me preguntó José.
– si, respondi rápidamente.
-ok, sabes desde tiempo hemos visto tanto como yo y Raúl a Kiara con otros ojos, ella se ha desarrollado de una manera muy rápida, es increíble cómo pasa el tiempo, tienes una hija preciosa, y sexy que cualquier hombre quisiera acostarse con ella.
Me dijo José.
– yo lo escuchaba sorprendido, no sabía que decir.
– te queremos ayudar, así que te daremos los 200 mil dólares, si es que nos acostamos con Kiara, nos ayudas con eso? Me preguntó Raúl.
Yo seguía sentado, confundido, y sorprendido, hasta que por fin pude decir unas palabras.
– que????, Están locos? Ustedes conocen a mis hijas desde nenitas? Cómo pueden proponerme semejante barbaridad.
José se levantó, y se fue a uno de sus cajones con clave, después de un momento se dirigió hacia nosotros y coloco varios fajardos de dinero en la mesita de vidrio que estaba junto a nosotros, y se sentó en el mismo lugar donde estaba.
-200 mil dólares están ahí, listo para que te lo lleves, me dijo Raúl.
Yo miré esa pila de dinero, mi salida de mis problemas estaban a unos centímetros de mi, me quedé pensativo.
– anímate de una vez, me dijo José.
– es una buena oferta, me dijo Raúl.
– el corazón me latía rápido, empecé a sudar, hasta que inconscientemente acepte dando un si.
José se levantó y empezó a dar hurras mientras aplaudía
Bravo!!!! Bravooooo!!!! Dijo Raúl mientras aplaudía, José se acercó y me dió un abrazo, me sentía un poco mal, pero el alivio de salir de mi deuda me confortaba, cogí una maleta vacia que estaba en el despacho y empecé a guardar el dinero en el.
– se nos olvidó decirte que será quince días de sexo con ella, me dijo Raúl.
– quince días???? Le pregunté de forma exclamativa
– si, 15 días, porque Kiara es una ricura como para saborearla por un día, además te estamos pagando bien, me dijo José.
– está bien, dije, mientras seguía guardando el dinero.
– si te daría 100 mil dólares más, nos darías a Mónica también? Me preguntó Raúl.
-noo! Exclamé fuertemente, eso nunca, ella es mi tesoro, así que eso olvidenlo, le dije.
José fue nuevamente a su cajón y regreso colocando otro montículo de dinero sobre la misma mesa.
– son 100 mil dólares, así que, que me dices ahora? Me preguntó Raúl.
Yo miré aquel montículo de dinero, la ambición me estaba matando, sabía que con Kiara, mi deuda estaba cancelada casi del todo, pero dije que no.
Raúl, saco de su bolsillo unas llaves, y lo coloco al lado del montículo de dinero que puso José.
– apuesto que te gustó mi nuevo Audi, es un R8, ayer me lo compré, y este es su llave, y será tuyo si nos das a Mónica también, por quince días.
Me quedé perplejo, sabía que ese auto costaba demaciado, cogí las llaves, y el otro montículo de dinero que coloco José y acepté.
José trajo otra maleta vacia y me ayudó a colocar el dinero en el, estaba apenado por mi engreída, pero negocios son negocios.
Una vez que guarde el dinero en las maletas, les pregunte a Raúl y José, que es lo que debo de hacer para que mis hijas tengan sexo con ellos.
Raúl se fue a su escritorio y saco una bolsita transparente con pastillas, y me lo dio, yo miré de forma sospechosa dichas pastillas, me di cuenta que eran drogas.
– quieres volver adictas a mis hijas? Pregunte.
-raul se rió y me contestó.
-jajaja, no claro que no, eso son drogas si, pero son para que ellas las tomen y se vuelvan cachondas, sentiran tantas ganas de coger que no importa que con quien sea, ellas cogerán si o si.
– lo bueno es que no recordarán nada después de que termine su efecto, tranquilo, ya lo hemos probado con otras niñas, y funciona, me dijo José.
– mi esposa estés de viaje este fin de semana así que ellas estarán lista todo esté quince días que ustedes deseen.
Estreche la mano a los dos, y me retiré de esa habitación con mi dos maletas llenas de dinero y las llaves de mi nuevo coche.
-mañana empiezo en hacer las transferencias de los papeles del auto en la notaría!!! Me dijo Raúl
Escuchando eso, sali, me acerque al Audi y puse mis maletas de dinero dentro, me subí y me emocioné, tanto así que se me pasó la borrachera,me sentí feliz, prendi mi nuevo coche y me fui a mi casa.
Al día siguiente mi esposa y mis hijas se sorprendieron al ver ese auto en la cochera de nuestra casa, les dije que gane una apuesta a Raúl, no me lo creían creo que hasta ahora no me lo creen.
En la noche Raúl me explico que las pastillas se disuelven con facilidad en cualquier bebida, llegando el fin de semana, mi esposa se fue de viaje, quiso llevarse a Mónica, pero le convencí a que no se la lleve, ya una vez a solas con ella, decidí preparar la cena, y coloque las drogas en sus bebidas como me dijo Raúl, dichas drogas se disolvieron de una forma muy rápida al contacto con el líquido, les di a las chicas y empezamos a cenar.
Eran como las 8 pm, ya había pasado 15 minutos, Mónica la sentia rara, al igual que Mónica, me fui a la sala a prender la tv, Kiara se sentía agitada, Mónica se sentía calurosa y se soltaba más sus prendas, hasta que sonó mi celular.
Era José y me preguntó si las chicas ya estaban listas, les dije que acaba de pasar 15 min recién.
José me dijo que en media hora, por lo mucho las pastillas tomarían efecto.
Y así fue, Mónica empezaba a sobarse su vagina de forma muy lenta, al igual que Kiara que me miraba con ojos lujuriosos, eso me puso cachondo.
Sonó el timbre y me fui abrir la puerta, era Raúl y José, les dejé pasar y ellos sin decir nada, se fueron hacia mis hijas, y empezaron a besarla sin palabra alguna, me sorprendí como ellas aceptaban ser besadas.
Raúl se llevó a Kiara a su cuarto de ella, y José abrazo a Mónica, llevándola también a su cuarto.
Yo me quedé sentado en el mueble de la sala, tenía curiosidad de saber cómo mis hijas cogían con esos hombres maduros, me levanté y me fui a la habitación de Kiara, Raúl estaba haciéndole un oral, veía como metía su lengua en su vagina, miéntras Kiara soltaba fuertes gemidos mientras estaba hechada boca arriba en su cama, estaba exitada, se cogía sus senos mientras era penetrada por la lengua de Raúl, de pronto escuché los gemidos de Mónica, me fui hacia ella y los encontré cuando mi engreída estaba chupando su Verga de José, era increíble ver cómo cabía en toda su boquita ese pedazote de José, así que les dije a los dos, que se vayan al cuarto de Kiara, y así fue, haciéndome caso José, llevó a Mónica al cuarto de Kiara, ya una vez estándo juntos las parejas, empezaron con la orgía en la cama de Kiara, rural y José se desnudaron al igual que las chicas, solo yo me quedé vestido y sentado a un lado del cuarto, observando dicha escena porno.
Raúl coloco su pies de Kiara encima de sus hombros y empezó apenetrarla de forma salvaje, Kiara gritaba de placer, estaba llena de lujuria, Mónica también era penetrada mientras ella mordía la almohada para ahogar sus gemidos, sus nalgas rebotaban al compás de las medidas de José.
Kiara se puso de perrito, quería ser cogida como toda una puta, y Raúl le dió el gusto penetrandola a su antojo, Mónica al ver eso, ella también quiso probar dicha pose, se apoyo a la pared y José le cogió la cintura colocando su pene en su vagina y dándole fuertes cogidas, era exquisito escuchar sus gemidos, más aún cuando José le cogió del cabello como toda una puta del porno.
Kiara gritaba de placer
-siiiii, asiiiii!!!!? Dame maaaaas! Métela más!!!!! Soy tu puta, trátame mal.
Kiara estaba en su orgasmo y estaba a punto de venirse.
– uhmmm, uhmmm ,mmmmm ahii, dame maaaaas!
Empezó a gritar Mónica, a sus 14 años, se estaba portando como una verdadera perra, eso me éxito.
Las embestidas de ambos se aceleró, mis hijas gritaban más, sus tetas se movían y rebotaban, hasta que Raúl empezó a gritar, y soltar sus chorros de semen dentro de kiara, dejando su pene dentro de ella, asegurandose en dejar hasta su última gota de semen dentro de ella.
Mónica, abrazo a José y lo llevo hasta la cama donde estaba Kiara hechada y cansada, coloco a José boca arriba en la cama cogió su pene y lo acomodo en su entradita de su vagina y empezo a sentarse encima de él, haciendo desaparecer todo su verga, dándose unas meneadas aceleradas mientras estaba encima de José, estaba iniciando su orgasmo, Kiara se levantó de la cama y empezó a chupar la verga de Raúl, Mónica seguía meneandose, José cogió sus tetas, miéntras mi hija cabalgaba su verga, estaba endemoniada por el orgasmo y el placer, hasta que ella se vino, pero aún así seguía meneandose, de pronto José agarró bien sus nalgas y empezó a venirse, estaba totalmente cachondo, José seguía dejando y escurriendo todo su semen dentro de mi Mónica, hasta que dejó salir su verga ya flácida.
Raúl también se vino en la boca de Kiara, mientras ella jugueteaba con su semen dentro de su boquita, se veía muy perras mis hijas, pero eso me gustaba.
Quedaron cansadísimas mis putas hijitas, baje con mis amigos hasta la sala, las chicas se quedaron en.
la habitación.
– tus hijas son tremendas, me encantó, dijo Raúl.
– Mónica era virgen, lo sentí al penetrarla, dijo José.
Ok chicos, mañana nos veremos, les dije, invitándolos a que se vayan, y así fue, ellos se fueron contentos, yo estaba cachondo, fui por mi preservativo y me empecé a follar a Mónica, toda esa noche.
Me desperté y me di cuenta que estaba en la sala, me dirigí hasta el cuarto donde estaban las chicas y note mi preservativo lleno de mi semen al lado de la cama, mientras las chicas Dormian, me retiré del cuarto y las dejé así, ya que hicieron un tremendo faenon en la noche.
Y así pasaron 15 días de puro sexo para las chicas, después que ellos terminaban yo me cogía a una o a las dos en cada noche, Raúl y José pasaron 15 días de pura orgías con mis hijas, intercambiaban a las chicas a su gusto, Mónica y Kiara fueron cogidas por dos vergas a la vez cuando realizaban tríos, en fin fue lo más perverso que había aceptado, más aún que eran mis hijas las protagonistas.
Pasaron los quince días, todo se volvió a la normalidad, Kiara y Mónica nunca se enteraron de nada, es más se hicieron más amigos con Raúl y José, todo estaba llendo bien, hasta que me enteré que ambas estaban embarazadas, mi esposa no sabía cómo, menos mis hijas, yo use preservativo todo esos días de orgías con ellas, así que no hay duda, José y raul embarazaron a mis hijas.
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