Todo queda en familia..
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Saull69.
De vecinos tenemos a mi Tio Jose hermano de mi Papa, mi tia Lucrecia ambos de 35 de edad, mi prima Rosy de 15 y mi primo Raul de 12 de edad como yo.
Para mi todo comenso cuando llegue un dia a mi casa mas temprano que de costumbre, habíamos salido dos horas antes de la escuela por una junta de maestros.
Entre a mi casa diciendo, -Ya llegue, no hay nadie?-, nadie me contesto, subi las escaleras hacia mi recamara pero antes de entrar escuche ruidos que provenían del fondo del pasillo donde estaba la recamara de mis padres.
Lo primero que cruzo por mi mente fueron mis padres cojiendo, a pesar de mi edad yo era muy promiscua, ya había besado a dos o tres chicos de mi barrio y me habían toqueteado la rajita y mis pequeñas tetitas pero hasta ahí.
Me acerque sin hacer ruido y por la puerta entre abierta vi a mi madre bien ensartada por quien yo crei era mi padre.
Estaba con las piernas en los hombros de su culiador y este le sacaba casi todo un gran garrote y se lo volvia a introducir completito, mi madre pegaba tremendos pujidos cuando la tenia toda adentro.
De pronto vi que el dueño de ese chilote no era mi papa, Era mi tio Jose!, Que estaba pasando ahí?"
MI madre y mi tio Jose estaban tan entretenidos cojiendo que ni cuenta se daban de nada a su alrededor, asi que no me escucharon llegar.
Me lleve mi mano a mi rajita todavía sin pelitos y me empese a masajear pero al ver que me estorbavan las pantaletas me las quite y las puse en un bolsillo lateral de mi sweter escolar.
Que rico sentía mi dedito en mi clítoris, Mi madre y mi tio seguían cojiendo sin cansarse y yo estaba muy atenta y embelesada con ese pitote que mi madre se engullia completo con su panocha.
De pronto sentí que se abria la tierra para mi, Alguien me tomo por detrás y me apretó con su mano la boca para que no gritara, Era mi hermano Paco y muy quedito me dijo al oído, No grites o nos descubren-.
Prácticamente me arrastro por el pasillo hasta su recamara y ya ahí me avento hacia adentro cerrando la puerta y con su dedo índice sobre su boca me decía, -No grites-.
Me sente sobre su cama un poco avergonzada por la situación en que me encontró, Sin calzones, tocandome yo sola y espiando a mi madre y mi tio.
Al ver mi extrañesa sobre esa situación, el me dijo que ya sabia que mi madre y mi tio cojian desde hacia mucho tiempo, que el los veía de vez en vez y que cuando yo llegue ese dia el los estaba viendo desde la puerta.
Me dijo que sin hacer ruido fueramos de nuevo a verlos y yo le dije que si, Salimos de su recamara y nos colocamos detrás de la puerta de mi mama, Ahora mi tio la tenia en cuatro en medio de la cama y le enterraba toda la vergota, mi madre con la cara entre las cobijas trataba de apagar sus pujidos pero era demasiado gorda la verga de mi tio y en cada embestida salían desde adentro de su pecho unos gritos que a mi hermano y a mi nos gusto oir.
Mi hermano estaba detrás mio y me comenso a tocar la puchita, el ya había visto que no llevaba nada bajo mi faldita asi que con toda comodidad me comenso a frotar mi pequeño clítoris.
Yo para no quedarme atrás movi mi mano hacia atrás y le agarre la verga que ya la tenia fuera de sus pantalones, Movia mi manita de atrás hacia adelante mientras el movia en círculos su mano sobre mi rajadita, Como la estábamos gosando los cuatro! Mi madre y mi tio adentro y mi hermanos y yo parados en la puerta viéndolos.
Oiamos como mi madre le decía, -Metemela toda cabron, rómpeme la panocha con esa verga que tanto me gusta!, Dame mas verga por favor, no me la saques papito-.
De pronto mi tio comenso a gruñir a a decir, -Me vengo puta, que rico me la aprietas, eres mi puta culiadora, Me vengo! Me vengo! Y poniendo los ojos en blanco le lleno de leche la panocha a nuestra madre que sudorosa y todavía reculando le recibia todo lo que le enviaba nuestro tio.
Nos retiramos de la puerta y mi hermano se encerro en su recamara y yo hice lo mismo, De seguro se la fue a chaquetear mientras yo sobre mi cama también hacia lo mio.
Después de un rato salimos y mi tio ya se había marchado y mi madre como toda buena esposa estaba preparando la cena para su marido.
Nos dijo muy tranquila, -A que hora llegaron que ni los sentí llegar-.
Que puta era mi madre! Bueno se me hace que eso es hereditario jiji
Continuara
Me encanta si cojen personas que «no se supone» que deban cojer, tipo hermanos y primos, ya sea adultos frente a niños y al reves.
También entre niños y con adultos viéndolos. Unas hermosas vergas peladitas y brillosas de saliva y flujo vaginal.
Aca deben haber algunas maestras de primaria con ese gustito.