Una noche en la guardería 1/2

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por zombieman.
Hola, soy Junior y ésta es mi segunda historia acerca de cómo poco a poco me fui convirtiendo en lo que soy.

Hasta ahora he subido en ésta página una historia resumida en dos partes:
****Dulce, mis inicios con una nínfula.****
1:http://www.sexosintabues.com/RelatosEroticos-28330.html
2:http://www.sexosintabues.com/RelatosEroticos-28398.html

Ahora si, a continuación relataré mi siguiente historia sexual:

*UNA NOCHE EN LA GUARDERÍA.
Después de lo que aconteció con Dulce y Lupita no podía darme el lujo de volver a mi vida aburrida, si ya a mis 12 años había probado un pedazo de paraíso, necesitaba saber que se sentía recorrer todas sus dimensiones. Así que desde éste punto comenzó mi transformación de inocente palomo a lo que soy hoy en día.

A los pocos días de regresar a casa tuve que empacar de nuevo ya que nos íbamos de vacaciones a una isla tropical y éxotica, cortesía (más bien agradecimiento por las horas extras) de la empresa donde papá trabajaba. Estaba muy emocionado, era la primera vez que salía del continente, faltaba poco más de cuatro horas para partir y ya estábamos rumbo al aereopuerto, una vez allí nos aburrimos en la sala de espera mientras nuestro turno de arribar llegaba, mi ser estaba dividido, una parte de mi estaba abordando el avión y otra estaba aún en la noche en la casa de campo. Nos acomodamos en el avión, me puse los auriculares y después de casi 10 horas de vuelo llegamos a nuestro destino, todo pasó tan rápido y tan lento al mismo tiempo, llegamos, fuimos al hotel, desempacamos y nos dirigíamos a tomar nuestra cena de bienvenida.

Una vez en el restaurante les entregaron folletos a mis padres, éstos eran sobre una fiesta temática y en el reverso estaba la publicidad del servicio de cuidado de niños que el hotel ofrecía. Mis padres, como siempre tan considerados, nos pidieron nuestra opinión y mi hermano y yo para no dañarles la fiesta accedimos a quedarnos esa noche en la guardería. Hubieron muchos papeleos para dejarme entrar puesto que mi edad no encajaba en el lugar, pero después de hacerme prometer que iba a ayudar a la chica con los niños, accedieron y me dejaron junto con mi hermano en el lugar. A esto debo aclarar que en el lugar no se hablaba español sino un idioma local, pero gracias a Dios la niñera era profesora de inglés y la mayoría de niños eran de USA o países donde se habla en inglés y yo ese idioma lo manejaba.

Entrada la noche, la chica de unos 25 años me dijo que iba a verse con su novio y que no tardaba mucho, yo le dije que no me importaba quedarme solo siempre y cuando llegara rápido. Ella se marchó y me dejó dadas las indicaciones, mi hermano estaba en un cuarto junto con otros niños de su edad a punto de dormir y los más pequeños, los hiperactivos, estaba aún en el living del lugar saltando y jugando. Me llamó la atención una niña con un parecido a dulce, su cuerpo era regordete pero sin exagerar y sus nalgas eran aún más grandes que las de mi nínfula anterior, ella me comenzó a llamar la atención porque sólo jugaba con un chico que era un poco mayor que ella, quizás tendría unos 11 años y ella unos 9.

Luego de persuadir para que se fueran a dormir, apagué todas las luces del lugar y me quedé en el living viendo Tv, estaba inundado en mis pensamientos sobre la noche en la casa del campo que no me di cuenta que la tv se había apagado gracias al temporizador, la causa de mi regreso a la realidad fue porque escuché murmullos en la habitación de las niñas, aunque era en inglés podía diferenciar sólo pocas frases ya que hablaban muy bajo, lo único que alcancé a escuchar claramente fue “c’mon” (vamos) y “No one will know” (Nadie se va a enterar) fui despacio pensando que se podía tratar de una travesura, pero al asomarme a la puerta entreabierta pude ver como el niño de 11 años tenía a su alrededor a tres niñas, todas con la misma contextura, rellenitas, cabello castaño, piel canela y unas nalgas que producen morderlas. Estaba mirando como el chico las convencía entre juegos para que le hicieran sexo oral y después de varios intentos las pudo persuadir; fue entonces cuando todas se inclinaron hacia su pene erecto y comenzaron a lamerlo, el niño se limitaba a sobarles la cabeza en señal de aprobación. Yo por mi parte fui rápidamente a la entrada principal y puse todos los cerrojos para que la chica responsable de nosotros no pudiera entrar, luego de eso fui de nuevo al cuarto para poder seguir con el show.

El niño al parecer ya tenía experiencia en esto puesto que sabía cómo ubicarlas y qué decirles para obtener lo que deseaba. Al llegar de nuevo dos de las niñas estaban haciéndole sexo oral y la otra estaba en cuatro patas ofreciéndole su manjar mientras que el niño con su boca degustaba su buffet, todas las niñas producían un gemido seco procurando que nadie las escuche, mi exitación subía cada vez más con las niños, quería interrumpirlos pero no quería asustarlos, quería unirme a su fiesta, así que me contuve y esperé un poco más. Todas las niñas estaban en cuatro patas, y él cual magnate se deleitaba con todas haciéndole sexo oral y masajeando con sus manos las entrepiernas de las chiquillas, todas gemían y daban señales de que querían más, movían las caderas, salivaban y empujaban más fuerte contra la mano o la boca del chico, todo iba a punto, el chico estaba sacando su pene por segunda vez, eligió a su primera afortunada, le subió la bata hasta la espalda y le movió el panty hacia un lado, le estaba rozando su pene en la entrada de la vagina hasta que un “ouch” se escuchó seguido de un bombeo que se incrementaba por parte del chico, el niño estaba dentro de la pequeña y la niña muerta del placer se dejó caer al piso con las nalgas alzadas para que el joven amante siguiese con su festín, el niño la giró, le quitó el panty manchado de sangre, puso las piernas de la niña sobre sus hombros y siguió con su ritmo, desde donde estaba podía apreciar como el pene aún pequeño del chico se introducía y salía dela vagina de la nena y las demás infantes que observaban tenían sus manos entre sus partes masturbándose torpemente. Ya no podía soportar más, así que me uní a la fiesta. Al verme entrar todos se quedaron estáticos y sólo dije una oración.
-Easy, I just wanna get fun too, Can I join u? (Tranquilos, solo quiero divertirme también, puedo unirme?)

Entonces todos dibujaron una sonrisa nerviosa en sus rostros y entré para saciar mi hambre. Empecé dando órdenes a todos como si fuera un general en batalla. Le ordené al chico que calentara a las dos niñas pero sin penetrarlas mientras yo degustaba de la que estaba acostada en el suelo. La besé desde los dedos de los pies hasta su boca, con cada beso ella se estremecía sujetándome fuerte contra su cuerpo.

Al llegar a su vagina de nuevo pude ver como la sangre y un semen inmaduro transparente brotaban de ella, la cogí en peso, me senté en una silla con ella encima, y comenzamos a besarnos, ella se movía sensualmente sobre mi pene mientras veíamos como en la cama de al lado las dos niñas jugaban con el chico. La alcé un poco y puse mi pene en la entrada de su vagina, poco a poco comencé a penetrarla de nuevo, ella se recostó sobre mi pecho dejando ver sus nalgas redondas y voluptuosas, yo me encendí al ver eso y comencé a bombear mientras apretaba sus nalgas, cada golpe era más fuerte que el anterior, ambos estábamos a punto de venirnos, así que le dije al chico que viniera y que tomara mi lugar, el chico rápidamente bajó de la cama y puso en cuatro patas a la niña y la hizo venir rápidamente a la vez que yo le pedía a una de las nenas que me hiciera sexo oral, los dos niños quedaron en el piso agotados, la nena a mi lado derecho con mis fluidos en su boca y la otra desde atrás mirándonos mientras aún se seguía masturbando… continuará.
Si les gustó háganmelo saber.