Una sesiòn de sado

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por AMOSADICO.
Entras y esperas mis ordenes, estas de pie con las patas separadas, la cabeza baja y las manos al frente con las palmas descansando sobre tus piernas, la habitaciòn esta en semipenumbra, el olor del incienso llena el ambiente y la mùsica de fondo hace que te relajes.

-¡ Desnudate!- te ordeno

tù obedeces te vas desnudando y dejas que la ropa caiga sin orden, eso te molesta ya que tienes especial mania por cuidar tu ropa, pero sabes que es una de mis maneras de irte humillando, tu te desnudas y esperas. Mientras pongo el nuevo juguete en el centro de la habitaciòn una barra con grilletes para tus tobillos separados y otros para tus muñecas justo al centro.

-Ven, aca, te voy acomodar en la barra, aqui seràs azotada, adornada y te masturbare hasta hacerte correr como la perra en celo que eres, vàs a mojar el piso y despues lo lameras mientras yo estare sentado sobre ti.

-si, mi Amo, sus deseos son mis ordenes, su placer es mi deber-dices y te acomodas para que yo cierre los grilletes sobre tus muñecas y tus tobillos.Cuando has quedado ya colocada voy por unas sogas y ato tus tetas, las ato y tomo unas pinzas para colocarla sobre tus pezones de las pinzas cuelga un hilo para peso y ahi coloco una bolsa llena de cubos de hielo, gimes al sentir como se jalan tus pezones.

-Bien, puta, te dare escoger, la primera sesiòn de azotes, prefieres gato, soga o vara

-mi señor prefiero el gato-me respondes.

Tomo el gato y empiezo azotarte las nalgas que han quedado bien expuestas, las nalgas empiezan enrojecer y los muslos empiezan a sentir las caricias del gato, voy subiendo de intensidad los azotes y tu no puedes evitar un grito de dolor y algunas lagrimas, eso es suficiente para que vaya a buscar tu braga en el monton de tu ropa la tomo y te ordeno que abras tu hocico y la empujo con fuerza, tu gimes al sentir la violencia con que la meto pero, mantienes tu hocico abierto;tomo ahora una soga especial para azotarte, la remojo en agua con sal y vinagre y con ella empiezo a azotarte de inmediato marca surcos en tu piel y tus lagrimas aumentan, las bolsas de hielo se han desprendido de tus pezones y eso provoco que respingaras, dejo de azotarte con la soga y acaricio tu cuerpo, las marcas de la soga son muy visibles, tu piel esta caliente, saco la braga de tu hocico y tomo una botella donde he sacado jugo de limòn tomo una toalla y vacio el jugo, despues la froto sobre tu cuerpo, de inmediato al sentir el jugo del limòn sobre tu piel lacerada te hace gritar, sientes como te arde la piel al contacto del jugo y froto con màs vigor la toalla,tus lagrimas aumentan y lloras ya abiertamente, te pregunto

-¿quieres que paremos la sesiòn?

-Nooooooo, mi Amo, por favor no pare, siga disfrutando del dolor de su perra-me respondes.

Levanto las bolsas de los cubos de hielo que han caido y las coloco en tu hocico, cuelgan de el y una vez asi colocada, tomo pinzas y empiezo a colocarlas por tus brazos, tus muslos, tus nalgas y tu espalda, cuando termino de colocarlas ahi voy por unas pinzas de metal y las coloco sobre los labios de tu raja, y ahi les coloco otra bolsa con un trozo de hielo, de inmediato los labios se ponen tirantes, tomo una jeringa, la coloco sobre tu clitoris y lo absorvo, el sudor de tu cuerpo delata la tensiòn que estas sufriendo, el clitoris tarda pero empieza a emerger, la jeringa lo absorve t sale tu clitoris, esta todo pulposo, brilla de humedad, dejo ahi colocada la jeringa y enciendo unas velas, de dos colores, las dejo que ardan unos momentos y despues empiezo adornar tu cuerpo, tu sientes el calor de la cera cuando acaricia tu cuerpo, tu excitaciòn es tal que de tu raja sale un chorro de liquido, como si estuvieras meandote, escurres jugos y dejas caer las bolsas de cubitos que ahora ya casi se han vuelto agua, sigues estremeciendote y sigue el chorro de jugos fluyendo de tu raja.

Dejo de adornarte, te veo asi llena de pinzas, con la piel cubierta de cera y a tus pies un charco de tu jugos que han fluido de tu raja, estas enrojecida y sudando, estas en extasis, hemos vuleto juntar el dolor y el placer, libero tu cuerpo de las pinzas, te quito la jeringa y te suelto de los grilletes, te recibo en mis brazos y te mantengo abrazada hasta que tu cuerpo recupere su equilibrio.

-Mi Señor, me dices,solo puedo decirle gracias, por todo el placer que me brinda.

Te abrazo con fuerza y te beso tus labios, te tomo entre mis brazos y te llevo a la ducha de agua tibia donde tu cuerpo descansara, porque la sesiòn de sado continuara…