vivir en la barriada
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por 1renco1.
Vivir en la barriada (I).
Voyerismo y Exhibicionismo
La pobre arquitectura del barrio donde vivo me permite en ciertas ocasiones hacerle al voyeurismo esto es debido a, que al ser un barrio pobre la pared de una casa sirve a su vez de pared a otra ahorrándose una pared cada vecino estas paredes son muchas veces hechas de madera
En cierta ocasión regrese a casa de mis padres muy tarde razón por la cual le pedí alojamiento a pedro un vecino que vive a cinco casas mas al sur de donde yo vivo y contiguo a un matrimonio que constaba de: don Lucas un hombre de aproximadamente 47 años mariana una hermosa mujer de 30 años muy bien cuidados pues aparentaba una chiquilla de 23, Graciela una linda hembra de 22 años, lucia otra preciosidad de mujer de 20 años, rosa una vivaracha jovencita de 18, carlitos de 15 y miguelito de 12 estos dos últimos hijos de mariana y don Lucas, un hombre alto y fornido, todos ellos tenían aproximadamente un año de haberse mudado de la montaña, donde tenían pocos o ningún vecino en kilómetros a la redonda y al parecer por esta razón se les hacia un poco difícil entablar relaciones de amistad con el resto del vecindario, pues bien, pedro al ver mi problema me permitió dormir en su casa pues su hermana se había ido a pasar vacaciones a un pueblo del interior por un periodo de dos meses y su habitación estaba disponible. Por los padres de él no había inconveniente en que me quedara a pernoctar en su casa pues ya lo había hecho en otras ocasiones, entre pues en la habitación cerré la puerta tras de mi y me dispuse a dormir, cuando apague la luz vi una luz roja tenue que se reflejaba en el techo del cuarto
Note que esta luz provenía de la casa de junto, esto hizo que agudizara mis oídos y percibí un ligero cuchicheo originado en el mismo sitio de la luz, pensé inmediatamente que por el tipo de y la intensidad del murmullo se avecinaba un buen plato de sexo, y busque desesperadamente un punto donde poder observar bien la batalla que se avecinaba, encontrando una regla que tapaba una rendija, al despegarla note que solo estaba puesta y se quitaba sin ninguna dificultad cosa que me extraño muchísimo y me extraño aun mas que esta rendija daba perfecta visión de todo el aposento matrimonial de la otra casa pudiendo observar que en vez de puertas lo que tenían eran unas cortinas
Así empecé a ver como los esposos estaban trenzados en un ardiente abrazo besándose, ella en ropa interior y el en calzoncillos ella empezó a bajar empujada por las manos de el sobre su cabeza ,guiándola hacia los miembros inferiores ,besando los pectorales para después juguetear con su lengua en el ombligo por unos cuantos minutos, a la vez que con sus manos quitaba la ropa interior masculina liberando una enorme verga de mas de 26 cm.
De largo y casi tan gruesa como una lata de cerveza , ella estaba colocada de rodillas con los codos en la cama y las manos a cada lado del tronco de la enhiesta verga con el culo en pompa solo cubierto por sus calzones el la jalo hacia arriba nuevamente, ella subió mientras el bajaba sus manos recorriendo todo el cuerpo de ella hasta alcanzar el borde superior de los interiores femeninos bajándoselos hasta quitárselos totalmente, para luego volver a bajar besando pechos estomago ombligo y no detenerse hasta posar sus labios en el tronco de aquella gruesa estaca, con el culo en pompa apuntando hacia mí
Ahora si le podía ver el chocho peludo y se notaba apretadito pero tan apretadito que yo no concebía como iba a caber semejante verga por ese agujero, ella tenía un coñito pequeño, unas nalgas blancas enormes sostenidas por dos piernas bien lisitas y muy bien formadas y sólidas, de seguro por el arduo trabajo de la casa en la montaña, estaba ella jugueteando con sus labios en la enhiesta verga y ya empezaban a notarse extremadamente húmedos sus labios vaginales, el ritmo de los movimientos aumentaron aún mas, los gemidos subieron su intensidad y su frecuencia cuando, un casi imperceptible movimiento de la cortina en la puerta me hizo cambiar la dirección de la mirada hacia esta, pudiendo ver perfectamente a Rosita en sostén y con un anticuado calzón de algodón pero con su mano dentro de este sobándose su cosita y viendo el combate que se desarrollaba en aquel aposento vi como a medida que aumentaban el ritmo de la cogida que se estaban dando
Ella intensificaba los sobeteos en su conchita y esto hacia que yo me pajeara mas violentamente, las perfectas piernas los pechos que se dibujaban perfectamente en el sostén y se meneaban como queriendo salir de su prisión me embelesaron, unos sonidos como de ahogo salió de la boca de mariana otros quejidos salieron de la boca de don Lucas, vi como un grueso hilo de leche salió de la boca de mariana que no pudo tragar toda la abundante esperma con que le inundaron la garganta a la vez todo mi cuerpo se estremeció soltando un chorro de semen que mancho las tablas delante de mí, esto me hizo caer sobre el borde de la cama con las piernas todas temblorosas y mi pene semierecto por la corrida, unos golpes me hicieron volver a mi lugar de vigía, era don Lucas que le propinaba una golpiza en las costillas a su mujer a su vez que se acomodaba detrás de ella
Al hacer este movimiento don Lucas quedó por unos segundos viendo las cortinas no sé si vio ahí a Rosita o solo atisbaba a ver el movimiento de la tela de la cortina, de lo que si estoy seguro es que su verga dio como un latigazo y se le puso mas tiesa y cabezona, hasta parecía que se le iba reventar de tan hinchada que estaba, se colocó detrás de su mujer, agarro la tranca con una mano y empezó a restregársela desde el coño hasta el ojo del culo una y otra vez mientras que con la otra mano le propinaba sendas nalgadas a su señora, esta gemía en una mezcla de placer y dolor, Rosita al ver esto se masturbaba con mas rapidez como si la vida se le fuera en ello, había dejado salir sus voluminosos pechos del sostén y estos jugueteaban con el aire en una danza erótica digna de los pensamientos mas pecaminosos , ¡ayyy, ayyy, ayayay ¡ por ahí no vos sabes que por ahí me duele, rosita detuvo sus movimientos, parecía que el corazón lo tenía en la boca quedaba viendo fijamente como aquella tranca estaba siendo empujada por el orto de su madre y esta lloraba y se quejaba por el dolor
Un par de nalgadas terminaron con las protestas de la mujer, Lucas agarro a su mujer por las caderas y de un solo jalón la ensarto completamente, hasta hacer chocar sus huevos en la concha de su mujer, ¡ayyyyy, ayyymmmm, él se quedó quieto un segundo acomodando los pies en el suelo para inmediatamente irse hacia atrás hasta quedar solo la cabeza de su cipote dentro del culo de ella, para luego arremeter con mas violencia contra aquel agujerito, esto enloqueció a Rosita que reanudo sus movimientos con mas ahínco, su calzón cayó al suelo y su mano restregaba su chocho con mas fruición, Lucas ensartaba cada vez con mas violencia a Mariana haciéndola despegar sus rodillas de la cama en cada embestida parecía un toro salvaje, mis manos se encargaron de mi tranca también desesperadamente
Lucas aumento la velocidad de sus estocadas y empezó a resoplar los gemidos de mariana se habían convertidos en grititos de un ligero placer, ¡aaagrrrrrr! Lucas se arqueo, asió fuertemente a su esposa atrayéndola hacia si, como queriéndola traspasar con su verga y se quedó inmóvil descargando toda su leche dentro del culo de su mujer, Rosita se agarraba el chocho con desesperación mientras unos gruesos hilos de jugos recorrían sus piernas, se reflejó la luz roja en el líquido bajando por Lucas y, a Rosita ni pensar con solo ver ese cuerpo juvenil pero bien proporcionado se me empezaba a poner dura la verga,
Continuará
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