Bobby, mi hermano y yo. Parte final
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Esa tarde era la oportunidad para mí si quería que Bobby nuestro perro me cogiera porque estábamos solos y nuestros padres tardarían en llegar, lo sabíamos ya que habían llamado para saber como estábamos y nos dijeron que estarían de regreso como a las 6pm y apenas eran las 3pm.
Le dije a mi hermano Arturo, te dije desde que te vi con Bobby que yo lo deseaba, y lo deseo hermano quiero ahora, tu verga esta rica pero deseo esa la del perro. Nos fuimos al patio y mi hermano que ya estaba diestro me dijo, “bien Rolando desnúdate y ponte en 4, ya tienes el culo lubricado y dilatado pero voy a ponerte algo”, le obedecí y me coloqué tal como me dijo y el metió en mi agujero dos dedos bien lubricados con la crema y después agarró un tarro de mermelada y me embadurnó el culo llamando entonces a Bobby.
Acto seguido el perro comenzó a lamerme y a saborear la mermelada para lo cual metía su larga lengua rugosa en mi hueco produciéndome unas sensaciones exquisitas, quería retorcerme de goce, todo esto mientras mi hermano lo pajeaba para sacarle la verga del capullo.
Cuando pensó que estaba listo le colocó unas medias gruesas en las patas delanteras, y un tiempo después se encaramó con grandes meneos, me hermano me dijo “aguanta como macho y ábrete como puta” y colocó la punta en mi ojete de modo que de un golpe el Bobby me enterró toda la estaca. Ayyy coño me duele, sácalo Arturo, y me dijo aguanta coño. Me dolía hasta el alma pensé que me cagaría allí, mis piernas no aguantaban pero poco a poco el dolor comenzó a bajar y me iba acostumbrando a los embates salvajes del animal hasta que le dije, así Bobby, duro coño que placer, que marica soy coño, soy una perra para ti mételo todo anda hasta las bolas, parecía que segundo a segundo su verga se estiraba mas y se hacía mas gruesa, estaba erecto pero no podía tocarme y mi hermano se arrodilló frete a mi con su herramienta al aire y me dijo anda chupa puta y se lo comencé a mamar, sentí un dolor terrible cuando entró su nudo pero la descarga de leche caliente mermaba el dolor, Bobby se volteó y quedamos culo con culo mientras alcanzaba mi segundo orgasmo anal del día recibiendo leche en mi culo y en mi boca. Estuve así pegado a Bobby por varios minutos en tanto le seguía mamando la verga a Arturo metiéndole a su ruego mis dedos en su culo. Un sonido seco un PLOP dejó mi culo al aire y el perro comenzó de nuevo a lamer y a meter su lengua en mi agujero que supongo tendría grandes dimensiones pues sentía que su lengua entraba casi que totalmente.
Cuando comenzó a lamerse la verga mi hermano se dedicó a pajearlo y le metió un dedo en el culo al perro y eso coño lo excitó saliéndosele tieso de nuevo por lo que Arturo se acomodó para que lo cogiera cosa que logró de seguidas. Increíble la forma como mi hermano se meneaba, técnica que después yo aprendí, así el acabó de nuevo y el perro igual dejó en su culo ya maltrecho una buena cantidad de leche.
Las deliciosas cogidas que nos daba el Bobby quedaron interrumpidas a los dos años cuando murió en un accidente, atropellado, pero esto se subsanó en poco tiempo cuando nuestros padres compraron a Rosti, a quien rápidamente lo enseñamos y lo amaestramos en esos ejercicios.
Afirma mi hermano que los dos que no somos maricas o gays como ahora se dice, pero yo aunque me cojo a chicas siempre necesito una verga para saciarme, igual le pasa a el, confieso que todavía nos cogemos los dos es nuestro secreto y no le hemos dado el culo a ningun otro hombre.
Que somos entonces?
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