Con la Zoo descubri mi lado Bi en: "Una Madrugada Inconclusa"
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por zoomar-.
Pues bien, seguramente no recordaran mi primer relato, les cuento rapidamente y a manera de introducción que: Por cosas de la vida, me inicié casualmente en el mundo zoo (yo solo) y antes que en el sexo "tradicional", ya de manera más activa con perros a los 14 años aproximadamente. Desde más chico siempre me causaba mucho morbo ver cojer a los perros en la calle y más aun, ver como se quedaban "pegados" (aun sin saber yo nada de sexo y mucho menos de la existencia de la zoofilia). Ya a mis 14 había tenido varios encuentros con ese hermoso ejemplar, un "Alaskan Malamute" (lobo siberiano) macho, color blanco con negro, muy peludo, enorme y muy juguetón, precioso, digamos que "con él me inicié ya de manera oficial" 😛
Casi a cada noche-madrugada en la que yo me sentía "inquieto", mientras todos dormían me levantaba de la cama, salía al enorme patio trasero que teníamos en la casa y de inmediato iba a donde se encontraba "él", al aire libre y a la oscuridad de la madrugada era cuando mayormente teniamos esas ricas sesiones… casi siempre estaba amarrado y esa madrugada no fue la excepción. Con solo verlo mi corazón se agitaba y empezaba a palpitar más rápido y él al verme de inmediato movía su cola, ladraba un poco y se ponía muy contento, él sabía porque lo iba a buscar…
Esa madrugada hicimos lo de costumbre, me acerque ya sin miedo o temor (ya nos teníamos confianza y cariño mutuo); y de inmediato y "sin decir ni hacer nada" me desabroche el pantalón mientras él me observaba, y al verme hacerlo empezaba a mover su colita de nuevo 🙂 mi pene al instante se levantó y se me puso sin exagerar tremendamente duro con solo "desnudarme" frente a él, me gustaba acercarcelo a su ocico y siempre empezaba por olfatearme para reconocer mis olores; esa vez yo agarré mi pene y ansiosamente se lo acerque y él al instante sacó su lengua y comenzó a lamermelo riquisimo!!! como siempre, pero esa noche me lamía como desesperado ("literalmente me quería comer"), como si él quisiera darme algo más, me imprimía una velocidad bestial! y eso me puso a mil, hasta que me corrí con chorritos de mi lechita cremosa y caliente frente a él, de inmediato y con su misma lengua me lamió y me limpió riquisimo! 😛 …era todo un "ritual" que ya teníamos muy bien hecho y entrenado los 2 🙂 …pero yo siempre he sido muy muy caliente …mientras me lamía, estando yo de pie me gustaba abrir mis piernas y acomodarme su cabeza entre ellas para sentir ese roce de su pelo con mis testiculos y mi pene, al sentir ese roce yo empezaba a hacer "clásicos movimientos" como si me lo quisiera cojer por su ocico; siempre he tenido fuego entre las piernas, y sentir todo ese suave pelaje de su cabeza, su nariz y su lengua masajeandomelo yo mismo entre las piernas "me tranquilizaba", aunque en realidad me haciá "arder más" 😛
Pero como les decía, siempre he sido casi puedo decir "extremadamente caliente", y esa madrugada aun siendo un completo novato (aun con varios encuentros previos) yo deseaba algo más, no sabía qué más podía hacer, ni cómo, no tenía idea, pero quería algo más!! algo que apagara o por lo menos tranquilizara ese fuego entre mis piernas… sin haberlo planeado, estando yo como poseido y sin pensar, me baje el pantalón completamente, me voltee dándole mi espalda y me incliné ofreciéndome para él, casi igual a como lo hace una perrita receptiva y lista, pero como él estaba amarrado camine hacia atrás acercandole mi colita poco a poco (insisto, a pesar de mis experiencias eso era algo completamente nuevo para mi y no sabia lo que hacía ni como reaccionaría él) y él empezo a hacer lo mismo que me hizo en mi primera vez, solo que ahora lo hacía en mi colita… me olfateo muy rico y más tardo un latido de mi corazón que él en sacar esa "bestial lengua!", empezo a lamerme mi culito como desesperado: "oh! ohhh! por diooss!!!" de inmediato me hizo gemir, me lamía divinamente ricooo!, wow! me super excitó mucho más de lo que ya estaba, la velocidad con la que movía su lengua para lamerme era impresionante!!! parece que eso le gustó mucho más porque no se me despegaba ni un segundo y no les miento, pero me comía mi culito con su lengua y hasta senti pequeñas mordiditas: "ah! ay!!! ayyy!!!" gemía una y otra vez… no tengo palabras exactas para describirles lo que sentía, pero era lo más rico que yo había sentido en mis 14 años, el climax total! me lamía y recorría cada rincón con esa jugosa, caliente, rasposa y enorme lengua con una velocidad descomunal! y de una forma bestial! me volvia loco! me tenía completamente dominado, y él no paraba ni un instante y al contrario, cada segundo insistía más! y me buscaba y me exploraba y me excarvaba más y más profundo! "ay! ay!!! ayyy!!!" volví a gemir… sentía como abría mi culito chiquito, apretadito y virgen con su poderosa y bestial lengua "mmm… ohhh!!! sigue! sigue amor!!!" …deseaba que nunca terminara ese momento, me hacía gozar divinamente rico! creo que asi se siente tocar el cielo 😀 me metía su riquisima lengua y además me entraba muy muy fácil porque él me lubricaba perfecta y marivollasemente bien y además, yo ya estaba completamente receptiv@ :P
Me mantenia empinado frente a él sin saber lo que yo hacía, solo lo hacía como poseído completamente por un instinto animal, y poco me falto para ponerme en 4; imposible olvidar cada detalle, recuerdo que sin moverme mucho para "no interrumpir con su trabajo" gire mi cabeza para ver un poco de todo lo rico que me hacía y lo ví demasiado inquieto, como nunca antes lo había visto; amarrado se paro en sus 2 patitas traseras como queriendo abrazarme o jalarme hacia él, con su hocico abierto y su enorme lengua fuera, "jadeando" y chillando un poquito y moviendo su cola más rápido que de costumbre, yo no sabía lo que él quería ya, y de no haber estado amarrado no hubiera podido "escaparme" (ahora lo se)… Eran como las 2 de la madrugada y estaba obviamente oscuro y no les mentiré, no recuerdo haber visto si su pene estaba fuera de su funda, pero creo que era algo obvio… con el paso de los años, conforme maduré y aprendi más, entendí que esa madrugada él estaba listo y lo único que quería era satisfacer y "montar a su perrita" 🙂
Desde esa madrugada, esa imagen y esa experiencia tal y como se las acavo de contar no deja mis pensamientos y mis fantasias, casi a cada noche de calentura pienso y hasta sueño en esa madrugada y la verdad, cada vez deseo más y más "terminar" con aquella "Madrugada Inconclusa" para los 2, lastimosamente, después de tantos años tendrá que ser con otro perrito …pero será 🙂
En estos momentos en que termino de redactar mi relato para poder compartirlo con ustedes, debo confesarles que estoy escurriendo… espero que les haya gustado, es un relato sencillo pero es parte de mi intimidad y es 100% real y queria compartirlo con ustedes. Cuidense y si gustan escribirme con gusto respondere. Saludos a los zooamigos y lamiditas a las zoochicas 😀
…ahora si, estoy listo! 😛
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