cuidando la casa

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
A principios del verano mi familia viajo al interior a visitar unos familiares, partieron un viernes por la tarde, yo no viaje ya que quería aprovechar ese fin de semana para descansar después de unos días agotadores en mi trabajo, quedo haciéndome compañía nuestra vieja perra negra mestiza.

Llego la noche y después de comunicarme con ellos asegurándome que había llegado bien, puse a cocinar algo de carne en la olla, hacia bastante calor así es que mientras estaba lista la cena me dispuse a bañarme, nuestra perra echada en el piso jadeaba tratando de refrigerarse, pensé que no seria mala idea que mientras me bañaba, bañaría también a la perra,
Entre al baño y me desnude llamándola, la perra de mala gana se levanto y entro al baño, abrí la ducha y la empuje un poco debajo del agua que estaba tibia, nuestra perra como dije, es bastante vieja ya, tuvo numerosas camadas, ya casi no tenia dientes y ostentaba unas ubres prominentes y flácidas, a pesar de ello se mantenía bastante sana, me agache a un costado suyo y empecé a enjabonarla, parecía agradarle el agua ya que seguramente mitigaba el calor que sentía, a pesar de que era muy mansa, su tamaño mas o menos como el de un pastor alemán hacia incomodo manejarla, en fin, la enjabone por el lomo, su vientre y ubres y entre sus patas, mientras lo hacia note su vulva bastante grande y algo caída por su edad, la enjuague y seque, la perra se sacudió y salió del baño, y yo termine de bañarme.

Después de secarme me puse el calzoncillo y salí a ver por la comida que ya estaba lista, dispuse la mesa y encendí el televisor, me serví lo que había preparado y en la escudilla de la perra puse una porción generosa, terminamos de comer, ella se echo debajo de la mesa y yo encendí un cigarrillo mientras miraba un programa del National que estaban pasando en ese momento, mire el reloj, ya eran las once de la noche, sabia que el programa se trataba de perros y sus diferentes razas, en un momento empezaron a mostrar los ciclos de reproducción y en una escena se veía como un mastín napolitano copulaba con una hembra de la misma raza, el enorme animal que exhibía un pene prominente, monto a la perra y empezó a penetrarla, hasta que quedaron abotonados y amarrados de ancas, el locutor empezó a hablar del periodo que restaba hasta que naciesen los cachorros, y luego mostraban a la enorme perra ya preñada con sus ubres llenas de leche descansando en su canil, las imágenes que veía me sacaron un poco de la modorra espabilándome, y provocándome algo de morbo, no podía dejar de ver la vulva hinchada y carnosa de la perra a punto de parir, encendí otro cigarrillo y seguí mirando atentamente, en un momento pensé como sería copular con una hembra como la que estaba viendo, y mi instinto animal hizo el resto descargando en mi cerebro imágenes salidas de mi imaginación, mi pene se elongo y se deslizo por la abertura del medio de mi calzoncillo, mire hacia debajo de la mesa y para mi sorpresa mi perra me estaba observando atenta, mirándome a los ojos y mi entrepierna, solo atine a decirle…¿qué estas mirando vos?…la chola por toda respuesta se incorporo metiendo su cabezota entre mis piernas y le dio una tímida lamida a mi pene, el contacto de su enorme lengua rosada y babosa sobre mi miembro no hizo mas que acelerarme más aun, atine a decirle…negra..¿qué me estas haciendo mamita?…ella me dio un par de lengüetadas más seguramente al sentir mis líquidos preseminales, y yo solo dije…hhuuu…no hagas eso……me incorpore retirando la silla para hacer lugar y me acuclille a su lado, su cabeza quedo frente a la mía, entonces me lamió la boca y yo saque mi lengua devolviéndole la lamida, la chola siguió lamiéndome mientras yo hacia otro tanto y le decía…mi negra…que rico..que deliciosa lengua tenes……ella empezó a mover su cola mientras seguíamos intercambiando fluidos y yo le metía mi lengua entre sus labios negros, buscando sus encías….en un segundo de cordura pensé..que estoy por hacer…estoy cortejando para copular a una perra, mi perra vieja..la que dormitaba en el invierno en el sofá a mi lado. ….nunca había visto a mi perra de ese modo.
Podía haber terminado allí con esos escarceos, y todo hubiese quedado como una curiosa experiencia, pero mi instinto me pedía que continuara, al fin y al cabo la chola, mi perra vieja desdentada, había encendido la mecha.

Mientras me dirigía hacia mi habitación deshaciéndome del calzoncillo por el camino, la llame diciéndole…negra veni…….me senté con mi espalda contra el costado de la cama, la chola entro a la habitación, y fue directo a lamerme de nuevo la cara, mis piernas quedaron debajo de su torso entre sus patas, con una mano agache suavemente su grupa sobre mi hasta que sentí su vulva húmeda contra mi miembro, literalmente la negra quedo sentada sobre mi pubis, sobre mi vientre podía sentir el contacto de sus tibias ubres, puse una mano debajo y tomando mi pene empecé a hurgar en la abertura de su concha, la perra se puso impaciente apurando con sus lamidas, poniendo su cabeza de costado, tratando de meter su lengua en mi boca, sorbiendo mi saliva, con su boca abierta parecía querer devorarme la mía, hasta que finalmente pude introducir mi glande en su blanda y carnosa vulva, al sentir el inicio de la penetración la perra empujo hacia abajo sentándose, haciendo que mi verga se deslice en su vagina, ….hhuuuu…mi amor…mi chola hermosa…que concha mas deliciosa…la perra empezó a gemir, y empezó con un curioso movimiento de vaivén de sus caderas sobre mi cogiendome literalmente…,entre sus lamidas le dije.y mientras se agitaba sobre mi rozándome con su cuerpo peludo..hija de puta me estas cogiendo…me estas violando..me estas dando conchazos con mi pija dentro tuyo….,

Las ubres de la chola golpeaban sobre mi vientre en cada movimiento suyo, en un momento su concha se contrajo llenándose de fluidos calientes y yo levante mis caderas haciendo la penetración mas profunda, un torrente de semen salió desde mis huevos recorriendo el interior de mi verga, descargándose dentro de la vagina de mi chola, mi perra de tantos años, inundando su útero, ella temblaba y yo abrazado a su lomo continuaba descargándome, quedo allí sentada por un momento con mi verga latiendo aun dentro suyo, y luego se incorporo, de su concha dilatada cayo un colgajo de semen sobre mis piernas,y girando, mientras olía mi rostro, agacho un poco su grupa apoyando su concha hasta rozar mi verga y orino empapándomela con su meada caliente, marcando su territorio como la había visto hacer en el frente de la casa, cansado y empapado de los fluidos de esa vieja hembra, arrastrándome subí a la cama, y alcance a decirle….puta hermosa…que rica cogida que me diste…la perra subió a la cama echándose a mi lado, me acomode buscando entre sus patas traseras, su concha estaba húmeda e hinchada, le dije dejame que te coma esa concha sucia que tenes…restregué mi nariz contra su vulva y empecé a lamer y a masticar suavemente su concha negra y bulbosa que olía a orín y a mi propia leche, tragándome sus jugos, podría jurar que sabia mas rica que la de una hembra humana, la perra gemía quedamente, busque sus ubres flácidas con mi boca y se las lamí, chupe sus rugosos pezones, la perra gemía mientras sentía como su concha se contraía en mi boca, volví a acomodarme, mientras yo me acostaba boca arriba, ella se ubico y poniéndose en cuatro patas sobre la cama lamió mi verga, atrapándola con su boca casi sin dientes, desesperada, oliendo el semen próximo a salir, y mientras yo acababa de nuevo sosteniéndola de las orejas, mi chola, mi perra vieja, esa delicia de hembra recién descubierta, tragaba y comía mi leche, mientras se relamía mi semen que desbordaba su boca, ella pasaba su lengua por sus labios atrapando los colgajos que chorreaban y luego lamía los restos que caían en mi pubis, imágenes de cuando la trajeron de cachorrita pasaron por mi cabeza, jamás imagine que algún día literalmente me violaría o me cogería como lo hacia con los perros del vecindario, la había visto muchas veces, pero nunca me hubiese imaginado.

Al rato yacía de costado, me ubique detrás, la penetre prendiéndome de sus ubres y sus patas, ella gemía mientras yo la empalaba una y otra vez, su olor característico embriagaba mis sentidos, su vagina apretaba mi verga como si fuera un guante de piel suave, exprimiéndome, buscando ordeñarme mas leche, prendido de su cola la empujaba hacia mi mientras ella jadeaba con su boca abierta, así estuvimos sin acabar por más de quince minutos copulando, sintiendo el roce de nuestros órganos ensopados en nuestros fluidos, el olor a semen y fluido de perra era penetrante. No me di cuenta de la hora, pero ya empezaba a amanecer por la claridad que entraba por la ventana, en algún momento nos habíamos dormido por un rato. A eso de las doce del mediodía me levante y traje un poco de balanceados con leche, mi chola se puso a comer con avidez, en un momento levanto su cabeza con el hocico chorreando, me arrime a su cara y lamí su boca llena de leche mientras se mostraba muy sumisa, me arrodille detrás de ella, podía ver su cajeta empapada de fluidos que empezaban a secarse, y vi su ano que se contraía, sobé mi verga con una crema que encontré y lo apoye en la entrada, ella empezó a comer de nuevo y yo empuje, su esfínter se dilato un poco y mi pene se deslizo

Gruño un poco mirándome de soslayo y siguió comiendo, empuje hasta que mis bolas hicieron tope en sus ancas, toda mi verga dura como un palo había desaparecido en ese culo caliente y pringoso, ella empezó a ladrar mientras empecé a sodomizarla, después dejo de hacerlo y solo gemía con sus ojos cerrados, su vulva apoyada en mis huevos empezó a contraerse, y yo descargue mi leche dentro suyo, mientras le decía…así..así mi puta, tu culo se siente caliente y baboso hija de puta…así comete la leche de tu macho, trágatela por tus tripas..puta..soy tu único perro ahora, y te estoy dando de tomar leche por tu rico culo…., la perra seguía con los ojos cerrados chorreando leche de la escudilla de su hocico, y colgajos de mi leche de los bordes de su culo, después despacio empecé a desenvainar mi verga, que salió llena de fluidos babosos, la muy puta se dio vuelta y empezó a comerse los restos de suciedad, luego temblando camino unos pasos y se acostó en el piso, llena de leche, le había dado mi semen por su concha y por el culo, y también se lo había comido, satisfecha quizás pensando que había sido fertilizada, yo caí desfallecido sobre la cama.

Por la tarde llamaron a casa, era mi mujer, yo estaba mirando televisión, la habitación solo era iluminada por el aparato receptor y la negra estaba sentada entre mis piernas mientras lamía mi verga cadenciosa y concienzudamente, cada tanto con la lengua afuera, rozaba el costado de mi verga con su hocico, esperando por su porción de golosina, mi mujer pregunto..¿ y como le esta yendo a los caseros?…se portan bien?….diste de comer a ese pobre animal..y le conteste…mira la negra no tiene que quejarse, ayer comió un buen pedazo de carne y después tomo bastante leche, hasta hartarse, ella contesto bueno no la llenes mucho, ya esta vieja y le puede hacer mal…pobrecita…yo le conteste, si claro ahora justo le voy a dar leche nomás, por sus dientes viste…después le dije..espera le pongo el teléfono en el oído a ver que hace, mientras ponía el altavoz acerque el teléfono al oído de la perra, …sentí como mi mujer le decía…¡que esta haciendo la negra de mama!…la perra levanto las orejas mientras seguía lamiendo mi verga empapada de su babosa saliva…

Retire el teléfono y le dije a mi mujer…reconoció tu voz…..ella contesto…es una pilla…bueno llamo para decirte que llegamos mañana por la media mañana…cuidala a la viejita esa..le conteste no te hagas problemas…te esperamos mañana entonces. Colgué el teléfono, justo cuando mi chola atrapaba delicadamente mi verga metiéndosela en un par de movimientos en la boca, mientras me miraba a los ojos con una mirada que hasta me pareció algo cómplice, descargue mi semen en su boca, al sentir el primer chorro en el paladar y su lengua, ella empezó a tragárselo, sacando su lengua por debajo de mis huevos, recogiendo lo que apenas se escapaba, como toda una puta experta…la mire mientras le decía..así mi chola, cómase la leche de su macho..degenerada…resultaste ser una puta de mierda, lechonera, ..sos una mamona de vergas, si sabia antes…. ahora vamos a dormir un poco para descansar, todavía falta para mañana, la perra ladro con su hocico pringoso de semen, restregó su cabeza entre mis piernas llenándose de mi olor y se subió al sofá, mientras extendía su enorme cuerpo peludo y sucio sobre mi regazo, con una mano acaricie su cabeza, y con la otra empecé a hurgar con dos dedos profundamente en su carnosa vulva, que ya estaba bien babosa empapándose de flujos de nuevo.