DOS BURRAS PARA MI
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Esta es otra de mis experiencias con esas ricas hembras que cada me llevan a la perdición
Bueno, a lo que vinimos, este era un domingo muy caluroso, como a las 9 de la mañana Sali a buscar a mis hembras, y camine por todo el potrero acostumbrado, al poco rato me encontré a una muy rica hembra, la dirigí a un lugar más seguro con bastante monte, de una me quité toda la ropa, quedé como vine al mundo, totalmente desnudo y con la verga a reventar, como tenía ganas de orinar de rocié un poco de orin en su chucha y luego le meti la cabeza de la verga y le vacie todo el orin en su vulva, que rico sentir ese caliente cuando termine de orinarle, le meti la mondá hasta los guevos y empece con el me me mete y saca sa sa saca y mete, después se la saqué y le restregué la cabeza de la verga en el critoris, ella se volvió loca pegaba unas tremendas culiadas y al rato se la dejaba ir toda,
luego como estaba en una loma inclinada alce un poco la pierna y le deje ir mi trozo hasta el fondo, que mañana tan agradable estaba pasando, al poco rato no aguanté más y le deje una descarga de leche en esa exquisita chucha, le dije esta leche es toda tuya, te la mereces, te la haz ganado por eso disfrutala, cuando tenía la verga flácida se la saqué y tome la ropa la envolví y así desnudo camine como 300 metros para un lago, me pegué un buen baño y cuando iba a colocarme el bóxer no lo encontré, entonces decidí regresar a buscarlo, asi desnudo camine y lo encontré cerca donde le había echado el polvazo a la burra,
entonces dije si encuentro a la burra le doy otro regalito, pero caminé y la ví al otro lado, pero sorpresa estaba otra burra y su hija, entonces dije esta oportunidad no la desperdicio, camine otro tramo con la ropa en las manos y llegué donde estaban las burras, traté de coger a la pequeña, pero esta se iba corriendo, entonces tome a su madre y le meti la verga y me la culie, la pequeña se daba cuenta, después dije ahora voy por ti, y camine hacia donde estaba y la tome por el rabo y ya estaba calmada y no hizo nada y como tenía la verga bien dura,le abri esos labios tiernos y le deje ir poco a poco el trozo de carne para incrustárselo en su pequeño agujero
y empecé a culiarmela, le pegaba unas tremendas embestida y ella me miraba y me olfateaba, yo le tocaba el hocico y le decía tranquila que aqui tienes a tu macho, y le saque la verga y se la puse en el clítoris y pegó una tremenda empujada hacia atrás y luego se la meti y aceleré a fondo hasta que le deje toda mi leche, luego me limpie y regresé a casa contento por esos dos ricos polvos que le peque a esas burras.
Hasta la próxima, estaré con otro relato.
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