Espiando a mi Padrastro y a mi primo.

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Mi Padrastro tenía al rededor de 35 años, manejaba un taxi, mi mamá trabajaba en un hospital por lo que hacía turnos de noche, quedaba en casa a cargo de un primo de 16 años, yo me hacía el dormido veía a mi primo como se hacía unas pajas, una noche cuando tenía 10 años lo escuche llegar como las 4 de la madrugada, entro el auto y hablaba a alguien, me levante pensando que era mi madre mire por la ventana y era una perrita, negra de mediana estatura que traía en el asiento trasero.

En eso mi primo dormía en un sillón en el living, yo me escondi en la escalera sin que me vieran ya que estaba oscuro, entro con la perrita a la casa, le dijo mira lo que traje quieres follar, la empezó acariciar la perra levantaba el lomo y la cola haciéndola a un lado, en eso ambos se desnudaron, pude ver sus penes erectos, mi Padrastro se sentó quedando con toda su virilidad expuesta por lo que la perra lámia sus bolas y pene, el con su mano acariciaba el pene de mi primo como masturbandolo podía escuchar que le decía a la perrita.

– Eso, ponerme bien duro para follarte.

Con una mano masturbaba a mi primo y en la otra se hecho bastante saliba en los dedos, empezó a tocar la vulva de la perrita, metiendo 2-3 dedos dentro, luego dejo caer saliba en su pene se puso detrás de ella, pasando su glande en la entrada de la vulva, la apuntó y comencé a ver como su pene se perdía dentro de ella, dentro de esa vulva comenzó con el mete y saca, le daba clavadas profundas, los gemidos de mi Padrastro se escuchaban por toda la casa, veía su cara de placer, así estuvo como 10 minutos hasta que le dijo a mi primo es tu turno yo aun no acabo.

Mi primo apuntó su Verga y de un solo golpe se la clavo toda, mi Padrastro le decía te gusta.

-primo: si esta muy rico, me encanta.

-Padrastro: vamos quiero ver como le das la leche.
Dale la leche.

Así estuvo dándole, metía y sacaba mi primo su pene de esa vagina, mientras mi Padrastro dejaba que la perra lámia su pene, mi primo no aguanto más y pegó un grito, le dio toda la leche dentro, sacó la Verga aún dura y mojada, mi Padrastro metió su pene y acabo de igual forma, la perra no tuvo tiempo ni de lamerse para probar la leche de mi primo.

Ambos estaban sudados, cansados con las Vergas húmedas.

La perrita había probado dos Vergas y dos tipos de leche.

Fue así como conocí la Zoofilia.
Mi Padrastro me enseñó a follar perras a los 14 años eso será otra historia, espero que les guste como conocí la Zoofilia.