LA BURRA DEL MEDIO POLVO

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Cierto día decidí ir con un amigo de la región a culiarnos unas burras en una finca cercana y tomamos el medio de trasporte y duramos como 15 minutos en llegar. Cruzamos varias fincas abriendo puertas hasta poder llegar al paraje donde estaban ellas. En esta ocasión había cuatro; tres eran hembras y uno macho.

De las tres hembras había una burra vieja preñada, una más joven y una pollina. La pollina no se dejó coger porque corría mucho y no podíamos aguantarle ni teníamos con que atarla. Era ya de noche tipo 8 pm. Estaba algo oscuro. Yo apenas vi la burra más joven me le medí a esa, pero mi amigo también la quería. Entonces él se decidió por la preñada y empezó a meterle el dedo y de una se fue quitando la ropa hasta quedar en boxers. La burra le respondió con esa barriga que tenía quedándose quieta. Y así le empezó a dar verga. Pero yo no pude con la mía. Me le acerque varias veces pa meterle le dedo y se quedaba quieta.

Entonces en una de esas me baje el pantalón y empecé a meterle la monda porque ya yo estaba arrecho. Pero ella apenas la sentía se movía y se le salía la verga, apenas podía puntearla. De nuevo la ubicaba y le metía los dedos y luego la verga pero ella no se dejaba. Mi amigo si estaba pasándola sabroso con la suya. En una de esas él me quiso ayudar sujetando la burra por las orejas y se lo volví a meter y me pego una patada casi en las bolas. Y la burra se nos soltó de las manos y se fue corriendo. Entonces de nuevo la agarramos y la amarramos con la correa del pantalón y la atamos a un arbusto cercano pero ella apenas sintió de nuevo la verga me pego otra patada, esta vez sí me dolió y se soltó del arbusto con la correa colgando en su cuello. Se la quitamos y la dejamos. Mi amigo siguió culiando su burra vieja preñada hasta acabarle según dice el, yo no le vi que fuera así. Yo andaba asustado y nervioso que llegara alguien y nos viera. Además ya tenía rabia por las dos patadas que me lleve de esa hp burra. Yo le dije a mi amigo a la próxima no se salva

En una de esas yo aún desnudo, vimos venir unas luces de moto hacia nosotros y tenían que cruzar por el potrero y camino donde estábamos. Más miedo me dio y nervio y nos pusimos la ropa rápidamente y agarramos las bolsas de agua que habíamos llevado para lavarnos las manos y las vergas después de faena. Nos fuimos corriendo, nos cruzamos un alambre eléctrico por debajo y saltamos a otro potrero. Allí nos ocultamos detrás de un matorral y nos íbamos rodando hasta q cruzaron las motos. Luego nos lavamos las manos. Yo no quise seguir con la burra, me dio miedo. Y nos fuimos a casa. Nos salimos por otro lado. Ahora estamos esperando regresar pronto pero esta vez será con sogas. Mi polvo se dañó esa noche. Me quede con la leche adentro y toco pajiarme en la casa cuando llegue. Ese fue mi polvo frustrado.