La perrita del trabajo

Todos los perros de alrededor ya la habían montado y no dejaban de fastidiarla, asi que decidi espantarlos y darle un respiro, pero me convertí en uno mas de ellos..
Era la perrita mascota del lugar donde laboro y la jauria de perros de la colonia no dejaba de meterle la verga uno tras otro.

Pobre chaparrita, ya le tenian la panocha bien abierta, aparte de que la tenia algo grande ya que era una perra algo vieja.

Espante a todos los hijos de perra para que la dejaran en paz un momento y le di algo de agua y comida, parecio agredecerlo mucho, hasta se me repegaba y contoneaba moviendo la cola.

Recuerdo que habia tomado una noche antes y andaba algo crudo y cuando ando en este estado, la verga la traigo inchada todo el dia y no hay panocha que la tranquilice hasta que se me pase el efecto del alcohol totalmente.

Cuando vi el tamaño de su vizcocho y la leche de los perros escurriendosele, inmediatamente pense que mi verga entraria ahi relativamente facil, asi que casi instintivamente me agache para acariciar a la chaparrita y masajearle un poco por dentro de su utero.

Estava inundada de semen de perro y quien sabe si de algun otro humano depravado como yo y la pobre tenis ya panocha ya bien abierta. Yo mismo habia visto como se la acababa de sacar el perro mas grande que andaba en la bola y en verdad que la tenia grande el hijo de la chingada.

Mi verga tomo el control de mi y me pulsaba y sentia que me queria reventar de lo inchada y tieza que se me puso.

Sin pensarlo me acomode de rodillas y me baje los pantalones y la perra rapidemente me vio como se me meneaba la vergota y quiso irse de ahi. Era como si hubiera comprendido perfectamente lo que pretendia hacer.

La acomode con algo de fuerza para q no se fuera y se puso muy sumisa y complaciente rapidamente, como si aceptara cojer conmigo por las buenas.

En cuanto le puse la cabeza en senti lo desmadrada que la traias los perros, se la deje ir toda pero no tan rapido, no queria lastimarla o incomodarla.

En cuanto le entro completamente hasta los huevo, me parecio que le dolio y le gusto a la vez.

Adentro estaba ardiendo y totalmente inundada de leche, sentia como me escurrian los mecos de los perros hasta los huevos, aun asi le di con fuerza para venirme pronto y no me fueran a descubrir.

En verdad que se le hiva toda a la pobre chaparrita y nomas pegaba pequeños chillidos entre jadeos acelerados.

No tarde mucho porque esa locura de meter la verga a ese vizcocho de otra especie lleno de leche, me habia puesto en un nuevo nivel de depravacion.

Mis mecos expulsaban la leche de los otros perros por las orillas de su panocha retacada de mi verga en ese momento.

En cuanto se la saque, se dio la vuelta para lamer los restos de leche en los huevos y la reata y se alejo de ahi, tal vez a algun lugar donde ya no le metan tanto la verga.

Pero esta historia no termino aqui, algo increible me paso despues de meter mi verga en una malteada de perro. Desde ese dia comence a tener muchas ganas de cojer y la verga nomas queria tantito para andarse parando y sentia mas vigor en general.

No entendia que me estaba pasando pero me acorde de lo que habia hecho y supe que de alguna manera mi sistema habia absorvido todas esas hermonas y testosterona animal.

Tiepo despues pude corroborarlo con otra perra muy bella, que anduvo un tiempo por ese lugar tambien y andaba en celo e inundada de leche.