LLUVIA DORADA

Buenas tardes a todos mis seguidores, tengo 29 años de edad para los que no me distinguen y una hermosa fortuna de tener animales domésticos en la finca de propiedad de mis padres.

Es por ello que para mí en estos 19 años de gozar de mis hembras nunca he tenido que buscar nada por otros lados, salvo que haya burras o yeguas y que se me facilite secuestrarlas o hacerles visitas nocturnas para probar con esas especies, por lo general penetro becerras (con las que más tengo experiencia), ovejas, cabras (muy poco), cerdas, gallinas y la última vez con pavas o piscas, muy contadas ocasiones perras al igual que burras y yeguas y la única especie diferente por decir con llamas en dos ocasiones, para cerrar mi presentación también becerras pequeños me han mamado la verga en dos oportunidades ya narradas acá mismo.

El miércoles pasado una vez se sacó el ganado de los corrales, a la novilla negra le coloqué cabezal y la llevé junto a otra becerra ya crecida para que no bramara; para el establo de los becerros.

Mas tarde llevé agrosal (una especie de sal con nutrientes) mexclado con una buena cantidad de pasto de corte picado y abundante agua porque les da mucha sed, para lograr mi propósito se debe ser muy paciente y decidí aprovechar esa oportunidad porque me encontraba solo.

Finalizada las labores del día, con butaca en mano me acerque donde se encontraba la novilla y me encerré con ella, como estaba echada la hice levantar y luego de atarla me desvestí de la cintura para abajo, acomodé la butaca para quedar apenas de altura y comencé a acariciarle la vulva, se puso nerviosa y apretó la vulva con el rabo sin embargo se fue calmando, muy despacio y poco a poco por los laditos le fui metiendo los dedos cuando por el contrario de molestar abrió las patas, trato de levantar el rabo y medio se arqueo, así que seguí dándole dedo otro tanto más, bajaba mis dedos dentro de la raja y le frotaba una protuberancia haciéndola fruncir, mi verga estaba a reventar y quería clavarla ya, me paré sobre la butaca, hice su rabo para un lado, entreabrí la vulva y empecé a meterle la verga, que rica esa sensación de sentir su vulva en mi verga, ese agradable calor y suavidad es indescriptible, e inicie a bombear lentamente para que no molestará, metía y sacaba, esperaba unos segundos y volvía a repetir, cada que sentía que iba a llegar sacaba totalmente el pene y esperaba apaciguar los ánimos, paraba casi un minuto y lentamente la ensartaba toda, que rica esa vulva toda mojada y grande, era bonito ver como la vulva llegaba contra mi abdomen y unirse mi bello púbico contra la novilla, la estaba ensartando lentamente cuando la novilla abrió bien las patas, se arqueó bastante y elevo el rabo, en ese instante la penetré toda a la par comenzó a soltar un chorrote de orina bien caliente, ese rico calor que se siente cuando la orina corre por alrededor de la verga es indescriptible, se siente ese calor tan agradable cuando escurre por los testículos, no importa que me mojara las piernas pues para mi era la gloria, al finalizar de orinar, pegaba unas contracciones fuertes y placenteras que se perciben bien rico, ya habiendo logrado mi objetivo aceleré el culeo y de un momento a otro no me aguanté tanta emoción que le dejé mi leche en su vulva, al rato ya sin ganas me desprendí de sus caderas viendo como le escurría mi leche por la parte inferior de la vulva, nuevamente había disfrutado de esa rica experiencia que se siente recibir una buena orinada en la verga de una especie grande.

Aunque no me gusta mucho con vacas porque la vulva es demasiado grande, cuando puedo les meto su culiada y disfruto mucho en especial si recibo mi lluvia dorada.

JUCATOVE88