me dormí y terminé calentado y luego cogido por mi perro
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por BARRACAS.
Una noche como siempre me acuesto. como hacía calor dejo la puerta abierta de mi dormitorio. suelo dormir totalmente desnudo por comodidad. el perro siempre duerme en el living o en la cocina.
soñaba algo placentero… que me estaban chupando la pija y gozaba como loco. veía una rubia bien dotada que me lo hacía en plena playa y rodeados de gente que miraban para otro lado. yo tenía una calentura enorme y ya había acabado dos veces. de repente me despierto y veo a mi enorme perro parado junto a mi cama y chupando mi pija y su boca llena de semen. lo dejé hacer y me hizo acabar nuevamente. luego se retiró. me levanté para lavarme.
volvía al dormitorio y veo un almohadón en el piso. me arrodillo para agarrarlo mejor y siento como el perro me toma por atrás con una fuerza descomunal y me sujeta. al hacer eso quedé en 4 patas vencido por su peso. cuando volvía a respirar sentía su pija bien ´húmeda golpear contra la abertura de mi ano.
Soy heterosexual y sólo me produjo risa y me dije esperar hasta que se rinda. siguió durante varios minutos. como vio que no podía me comenzó a lamer el culo en forma intensa. Cosa curiosa: su lengua caliente logró que me guste y comenzó una erección. me sentí sorprendido y en eso estaba cuando el perro arremete nuevamente. esta vez en 3 ataques logra meterme su pene. la punta es finita así que no sentí mucho pero siguió empujando y ya fui sintiendo algo más grueso. lejos de querer separarme me acomodé para recibirlo mejor. siguió dándome durante 10 minutos y me hizo pajear 2 veces. esperaba que ya terminara cuando sentí un dolor terrible. me había metido esa bola que tienen los perros al final de su pija.
Del dolor pase al placer inmenso y en pocos minutos acabé nuevamente. también lo hizo él. Luego quiso separarse y no podía. tironeaba y me dolía. se puso culo contra culo. lo acaricié y le hablé suavemente hasta que esa cosa enorme disminuyo un poco y pudo salir.
Cuando ví lo que me había metido me quería morir. comenzó a lamerla y no sé porqué me vinieron ganas de hacérselo yo.
La tomé y comencé a chuparla mientras él chupaba la mía y así acabamos con un hermoso 69. por supuesto que lo seguimos haciendo siempre. ahhhh… me siguen gustando las mujeres pero me gusta que me coja mi perro. se entiende? porque yo no lo entiendo…
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