mi perra negrita.

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por meridano.
Adoro a mi perra Negrita, ella es mi amante canina, he pasado muchas horas del mejor sexo a lado de mi fiel perra, sin raza y de color negro.

Todo comenzó una tarde, como era costumbre, estaba solo en mi casa, pase al Block Buster de paseo de motejo y rente una película de prívate.

Me baje del auto y fui directo a mi recamara a colocar mi película en el DVD, era una buena película, tenía todo listo, mis servilletas para limpiar la lechada que después de jalarme la verga iba a salir, y una selección de cremas, mi favorita es vick vaporub, la primera ves que la usas parece que se te incendia, pero después se siente rico, parece que tu pichón tiene un metro de ancho y de largo, la cuestión que puse mi peli, y a la media hora de verla y estrangular al ganzo con todas mis fuerzas, se me salió un chorro de leche, sin voltear a ver busque mis servilletas, pero se habían caído, y se fueron debajo la cama, me short se mancho de leche, me puse entonces a buscar bajo la cama con que limpiarme cuando de repente siento una tibia lengua que limpiaba suavemente la leche que había bañado mi pene, mi asombro fue ver que era mi perra, que lamia mi leche como si fuera miel, termino y se fue.

Como me acabaña de masturbar, digamos que la mente no la tenía tan caliente, fue en la noche cuando me iba a dormir cuando los recuerdos de esa lengua tibia vinieron a mi.

Recordaba lo calientita que estaba, y con la felicidad que se la tomo toda, me levante a ver que hacía, no con la idea de cogérmela pero, tenía que ir a verla, la llame y ella vino hacia la puerta de mi cuarto, me movía la cola, se dio la vuelta y se enfilo para ir al cuarto de lavado, allá tiene ella su catre, pude notar que estaba en celo, su chocho estaba como hinchado, por ratos de abria un poquito, como diciendo métemela métemela que esperas.

Pues bueno, he probado de todo hasta con hombres, porque no con ella, así que la llame y la hice entrar a mi cuarto, en ese momento no tenía la menor idea de que o como se hacía, nunca había visto nada relacionado con zoofilia.

Por eso comenzó con lo que más me llamo la atención, su lengua, asi que embarre mí pene con miel y deje que me lama, que rico, su lengua calientita, más que la de una chica, lamia si pena ni gloria, podía sentir su saliva, escurrir sobre el tronco de mi pene, le alce la cola y pude ver de nuevo ese chocho palpitar, como invitándome probarlo, asi que la puse en posición y puse mi pene en su chocho, estaba sudando a mares, nunca había hecho esto, pero como ya estábamos en eso, empuje un poco, y la cabecita entro en ella, es asombroso lo caliente que se siente, y lo húmedo que es, negrita se quedo bien quieta, asi que empuje mas y finalmente entro, estaba tan cerradita que hacia succión, trataba de meter y sacarla, pero me succionaba, y sonaba como cuando chupas algo, lentamente gane confianza y comencé a bombear más duro, se sentía apretadito, pero tuve que bajarle porque mi perrita me quiso morder por que le dolía, de repente me paso por la cabeza, ¿será que me quede pegado a ella?, ahora ser que no es así, pero en ese momento lo temía, llego el momento de correrme, si si si no dejaba yo de decir, termine y quise sacar mi pene, pero sentí que se me trabo, ¡!!!1chingaaaa ya me trabe¡¡¡¡¡¡, falsa alarma fue la succión, jale un poco más y se escucho como salió con un pequeño sonido muaccckkk, mi perra se lamio y luego muy generosa me lamio mi pene otra vez.

Pues esta fue mi primera vez en el mundo de la zoofilia, mi perrita ahora es mi amante y no me jalo mi verga tanto gracias a ella, aunque ahora siento deseos de comprarme otra perra y tener dos, quizás una pastor alemán aun no sé, pero cuando la compre les contare que tal esta, que pasen buenas noches y ahora me voy a buscar a mi amiga negrita, estoy muy estresado y necesito echar un palo.