Mi perra Viviana
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Fue un fin de semana que mi esposa se fue de viaje a donde mi suegra.
Mi perra viví es una hermosa pastor alemán muy juguetona, ese día llegue a mi casa y ya mi esposa no estaba, así que me bañe y me prepare un sanwhui para la cena pero me quede desnudo y entro mi perra a la sala y comenzó a lamerme todo, compartí mi cena con ella y comencé acariciarla y ella a lamer mi cara y pecho pero me estaba calentando y se me templo mi polla a lo que comencé acariciar la concha a mi perra y ella se quedaba tranquila.
Bueno como les estaba contando y todo se estaba calentando cerré las ventanas y me la lleve a la habitación y me acosté con ella para seguir con el romance, la ponía a lamer mi polla mientras yo le acariciaba la concha y le iba metiendo un dedo mientras la preparaba para penetrarla.
Bueno le metí un dedo me heche vaselina en mi polla la puse en la orilla de mi cama y le puse la punta de mi polla en la rajita y comencé a meterla entro la cabeza y luego un poquito mas,
Fue increíble sentir su vagina caliente y quería meterlo mas y mas ella quería morderme y se lo saque porque pensé que le dolía,pero cuando se lo saque enseguida se la linpiaba con la lengua su concha y lamia mi pecho.
Así que fui a bañarme de nuevo mientras ella se relajaba, me quede en el sofá mirando la tele.
Al otro día en la mañana me levante y estaba esperando en la puerta y yo con unas ganas inmensas de cojermela así la volví a meter en mi cuarto y a mamarle la concha era como si fuera una mujer que quería complacerla y ella su corazón latía tan fuerte que su lengua salia como si tuviera sed.
La puse en cuatro y volvi a meter mi dedo en su concha le puse mi polla de nuevo en su raja y uff entro suave hasta la mitad esta vez no hizo para morderme y espere a que se relajara para meter mi otra mitad, saben el tener toda mi polla dentro de la vagina de mi perra fue algo grandioso, es tan caliente y tiene estrías que causan una sensación máxima de placer, bueno se lo metía y lo sacaba muy suave para disfrutar cada cm de su concha hasta que me fui de otro de ella mi leche salia a chorros y espere que se me bajara y lo saque ella salio alegre a lamerse de nuevo y yo feliz de comer a mi perra.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!