Mi primera vez con mi perra

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por lapiedad.
Hola a todos !

Hace tiempo que no publico nada y tenía ganas de contarles mi primera vez con una perra, siempre había tenido esa fantasía, porque pues ya había probado yeguas, gallinas, cerdas y cuanto animal hembra se me pusiera enfrente, aunque he de confesar que con una burra jamás lo he hecho y es mi obsesión por ahora, pero bueno mi relato por fin con una perra.

Siempre había visto vídeos con perras y se veía tan sabroso que siempre quise hacerlo con una, pero siempre me fue imposible lograrlo, porque nunca había tenido una perra hembra en casa, nunca nos habían gustado por aquello de que luego crían y no haya uno que hacer con los cachorros y por eso siempre habíamos tenido perros machos, pero ahora que vivo solo recogí a una perrita callejera, aún cachorrita pero se veía que iba a crecer de buen tamaño.

Bueno pues esta perrita creció siempre acostumbrada a que yo la tocara de sus partes, ya más grande la empecé a masturbar y está tan acostumbrada que siempre que la acaricio se voltea para que la masturbe, por fin llegó el día que entró en celo y hasta la boca se me hacía agua porque al fin lo haría con una perra, si traía un poco más grande su vulva, pero no le creció como yo veía en los vídeos, estaba muy estrecha y por mas intentos que hice jamás lo pude lograr, aparte de estrecha es muy juguetona aunado a que no se quedaba quieta ni un rato, pasó su celo y pasaron varios celos más sin que yo lograra hacer algo con ella.

Hasta en esta misma página publiqué en el foro zoofilia que me recomendaban para lograr penetrarla, algunos me decían que la tenía que cruzar para que tuviera crías y se le hiciera más grande, yo pedía me aconsejaran que hacer también para tranquilizarla y que no se moviera tanto, pero no tuve mayores respuestas y pues así estuve, celos venias y celos iban y nada de nada, hasta que un buen día me di cuenta de que estaba en celo nuevamente y siempre empezaba masturbándola porque es lo que le ha gustado siempre, introduciendo mi dedo índice o el medio y luego ambos, pero ahora la sentí mucho más amplia, intente con tres dedos y fácilmente se metían y ahora hasta la sentía lubricada, no pues imagínense lo que sentí en ese momento, dije por fin !

Seguí jugando con ella un buen rato de hecho hasta se quedaba quieta (lo que nunca hacía) y hacía su cola hacía un lado para dejarme abierto el camino, yo ya estaba súper duro pero quería gozar más tiempo con ella, sabía que después de tanta espera me correría a las dos o tres embestidas y así fue, pero debo decir que cuando empecé la penetración fue la sensación más maravillosa que he sentido, y aunque fue rápido quede con las piernas de hule, sabiendo que la podría disfrutar por varios días pues estando en celo siguen receptivas por varios días y así estuvimos disfrutando como si fuera una luna de miel por una semana.

Pasó su celo y felices los dos, espero con ansias le llegue pronto el siguiente para repetir esto que fue realmente maravilloso.

Gracias por leerme.