Perra experiencia III

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Casi todas perras grandes y sin dueño que deambulaban buscando alimento, asique facilmenta me seguian luego de ofrecerles algun hueso o galleta.

Y una vez logrado eso, las ataba con mi propio cinturon o alguna soga, el resto era ir a lugar seguro y darme el gusto (y gozar) cogiendo esas vaginas calientes.

Pero camino a mi colegio, al que iba en bicicleta, habia una veterinaria, y siempre afuera, habia una perra tipo "salchicha" de grandes tetas que le arrastraban, y una vagina desproporcionada para el tamaño de esa perra.

Obvio que era dificil sacrla de ahi, mas que estaba bien alimentada, asique un dia, medio lluvioso lleve un enorme bolso de viaje…y un hueso de goma con un hilo. Jugando la atraje a mi, a 10 metros de la veterinaria la meti en el bolso, rapido y parti raudo en mi bicicleta.

La perra del susto ni grito….y yo esa tarde no fui a la escuela, sino a una poblacion que era un plan de viviendas del gobierno , abandonada su construccion hacia años por cuestiones burocraticas. Unas 50 viviendas a medio terminar, en las afueras de mi pueblo.

Elegi la mas alejada, subimos al segundo piso, en la unica habitacion semi techada. Alli sobre unos cartones empece a acariciarle sus tetas, sus pezones, y masturbar su enorme vagina, la que se fue lubricando y mostrando su rosado interior.

Me baje los pantalones hasta la rodilla y ella instintivamente , con su larga lengua lamio, casi desesperada el miembro duro y erecto.

Cada lamida era mas intensa, cada lenguetazo babeaante me daba mas lujuria y placer. Sus intensas lamidas se hacian mas rapidas, mis dedos entraban y salian con fluidez de su caliente vagina.

Asi, en un momento de extasis, estalle como fuente, parte en su lengua y hocico, parte en su paladar y parte en su lomo brillante.

Ella lamio todo con ganas hasta dejar todo limpio, ni un rastro de semen en mi brillante verga. Yo solo actue por instinto, la di vuelta acomode mi verga en su conchita palpitante y tomandola de sus cuartos , literalmente se la clave de una sola estocada.

Lejos de molestarse la perra se acomodo mejor, y fue tragando la pija con movimientos espasmodicos y lamidas a la zona del coito, su lengua afuera mostraba que le gustaba mucho.

Adentro su vagina era un infierno palpitante, que con su latir caliente no tardo mucho en hacerme soltar un chorro de leche tibia que la inundo por completo.

Me quede asi, clavado , hasta que lentamente se fue resbalando hacia afuera mi verga satisfecha y ella, prolija lamio todo lo que chorreaba…

Regrese y la deje a una cuadra de su hogar, por mucho tiempo ella me veia y.solita saltaba a su bolso.

Fueron muchas las tardes que falte a la colegio ese año

tvcablencc@hotmail.com….

Autor: Anonimo