Rompí su flor.. MI PRIMERA VEZ ZOO!!
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hace mucho que había leído esta página y me había enterado sobre la zoofilia, pero yo nunca la había practicado pero me exitaba mucho leer sus relatos. Ya llevaba meses de no visitar esta página, pero justo ayer experimenté en carne propia el sexo animal y no podía esperar a contárselos a ustedes, que son los únicos que me entienden.
Es una perra Colin blanca con café que compraron mis padres hace unas semanas. Cuando la vi, mis primeros pensamientos fueron eróticos, me emocioné mucho al verla pues no me la esperaba, sentía una exitación y nerviosismo como cuando te dan el mejor regalo de navidad, y lo único que quería, era estrenarla!
Soy hijo único y casi nunca hay nadie en la casa de día, por lo que ha sido perfecto la llegada de mi niña peluda. El primer día, después del desayuno mis papás salieron al trabajo, yo me puse ansioso y me terminé rapido el desayuno para ir a experimentar con Molly (así se llama), subí a mi cuarto y llamé a Molly, subió corriendo y cuando entró, cerré la puerta con pasador aunque no hubiera nadie. Me tire a la cama y la hice que se subiera, me acosté junto a ella y la besaba y besaba, en la cabeza, cara, a un lado del osico, en el cuello mientras la abrasaba. A ella le parecía gustar mucho ya que se relajó y me dio cariño. Yo me retorcía de calentura mientras la acariciaba toda con toda mi pasión.
Le acaricié su pansita que estaba tibia y bajaba lentamente a su entrepierna, intentaba seducirla para exitarla porque pensé que sería mas fácil penetrarla si se "empapaba" o lubricaba. Pensé que sería muy sencillo, entonces comencé a sobarle sus labios vaginales con algo de miedo porque pensé que me hiba a morder, pero ella no hizo nada, sólo estaba acostada sintiendo las cositas que le hacía.
Comencé a mover mis dedos masajeándola así como hacen en las pelis xxx, yo NUNCA había tocado una vagina y se sintió MARAVILLOSO! mi boca se hacía agua y mi pene me dolía mucho por mi pantalón así que me bajé el cierre del pantalón y saqué mi pene que parecía ya tener cemen. Entonces me puse sobre ella para lamerle su vagina. No me importaba si no era sano, se la lamí como le hacen a las mujeres y se la miré bien bien, jamás había tenido una vagina tan cerca, le comencé a buscar el oyito donde se mete el pene hasta que lo descubrí, tan pequeño pero yo sabía podía agrandarse.
Entonces para verla mejor, me puse totalmente encima de ella con mi pene goteando sobre su ocico, me lo empezó a lamer muy rápido y yo me marié! lo sentí muy pero muy rico, mi primer sexo oral me lo hizo Molly y yo ya casi tenía mi orgasmo solo con sus lamidas, y no aguante más, estaba a punto de escupir mi semen pero yo quería sentir como es penetrar, así que me bajé, la jalé de las patas para ponerla con mi pene y se la intenté meter, pero no lograba meterla, mi cabeza del pene ya estaba enorme y encontraba bien donde estaba la entrada de su vagina, yo ya estaba desesperado hasí que le hice mas duro y lo movía hacia los lados para encontrar la entrada y meterlo, entonces la apreté y a ella no le gustó porque se movió y medio ladró, pero yo estaba super caliente, así que la sostuve duro y me masturbé muy rápido frotando mi pene con su vagina, Por Dios se sentía tan rico.. movía mi brazo muy rápido para acabar sobre su vagina, hasta que sentí que iba a terminar y HHHUUUMMM!!! comencé a echarle mi semen a chorros, era la primera vez que me salía tanto, el placer no parecía acabar nunca, tarde tanto echando mi semen que me sentía en las nubes, creo que grite sin darme cuenta por el placer… no podía creer todo lo que le había echado a Molly encima, los últimos apretones a mi pene y la ultima gota salió, con el dedo me limpié el semen de mi pene y se lo metí dentro de su vulva.
Hasta llegué a pensar que se podía que dar embarazada por eso (yo era muy ingenuo y pues no sabía sobre eso) pero bueno. Entonces Molly se empezó a limpiar con su lengua, comiendose todo mi semen calientido que parecía que le gustaba mucho, has lo masticaba ya que era bien pegajoso.
A pesar de lo maravilloso que fue eso, yo me sentí un poco mal, para mí era un secreto algo bizarro y tampoco quería aprovecharme de la pobrecilla. Pasaron los días y tuve la tentación de volver hacerlo, pero siempre me reprimía. Entonces recordé esta página y vine a visitarla, me leí varios relatos y aprendí como es que los demás hacen el sexo con sus perras y que no era algo tan malo, media vez que la perra quiera hacerlo creo que no es malo.
Estaba inseguro, pero entonces me decidí, hace un par de días la llamé a mi habitación y la subí a la cama, comencé a explorarla y hurgar en su florecita. Me familiaricé bien con su entrada y le empecé a meter mis dedos, con saliba para lubricarla. Lo que quería era agrandarle el hoyo para que pudiera caber mi pene, ya me estaba exitando cuando escuché a mi papá venir a mi habitación (porque no estábamos solos) entonces la dejé y disimulé y mi papá entró, entonces no hubo problema pero decidí posponerlo para cuando estuviéramos solos y 100% a salvo.
Justo ayer nos quedamos solos, yo ya con una buena idea en la cabeza, ya tenía mi plan para pasarla de lo mejor con la linda Molly. Fuí al refrigerador a tomar unas salchichas de pavo que teníamos, eran como del grueso de mi dedo pulgar (tal vez un poco mas gruesas) pero a la vez mas suaves que un dedo ya que no tienen huesos. Entonces la llamé a un sillón de la sala, la acosté y le comencé a masajear su vagina con la salchicha y con mi saliva.La salchicha estaba fría y tal vez poreso su vagina que era rosadita se le ponía rojita, a ella pareció disgustarle porque se movió pero yo la tranquilicé, la salchicha ya se había entibiado con su calor y se la puse en la mera entrada y la empuje, entraba un par de centímeros y a Molly parecía gustarle porque empezó a respirar rápido. Entonces se la metía y sacaba una y otra vez, ya la salchicha entraba hasta la mitad y sin problemas, pero empezaba a romperse por los movimientos, así que cambié de salchicha, la que se rompió se la di a Molly y se la comió con ganas.
Entonces tomé otra del paquete, pero esta aún estaba fría, no me importó y se la introduje rapidamente con saliva hasta dentro, ella pegón un brinco por lo frío en su interior pero la tranquilicé de nuevo. Se la metía y sacaba muchas veces, a ella le daba ligeros temblores en las piernas por el frío, pero poco a poco se le quitó porque la salchicha se calentaba. Ahora ya entraba más de la mitad pero no podía meterla más porque se sentía que topaba. Se la saqué y se la dí de comer nuevamente (eran como sus premios).
Me desnudé todo para sentir su cuerpo con el mío, esa iba a ser mi primera vez, estaba seguro. No tenía condones pero no me importaba, tomé mi pene ya bien duro y lo lubriqué más con mi saliva. Lo puse en su entrada que estaba bien abierta y se la metí. Solo la cabeza entró pero solo con eso yo ya sentía que me venía y me corría allí mismo. Me calmé y me concentré en metérsela con movimientos hacia adentro, hasta que se lo metí hasta donde topaba, de nuevo yo me sentí mariado, jamás había sentido eso y mucho menos con una criatura tan inocente como Molly, yo sentía que la amaba, y seguía penetrándola de adentro hacia afuera, por fín sentí lo que era tener sexo, lo sentía tan caliento y tan suave… Le acariciaba su espalda y su cadera, la manoseaba toda, le metía pequeñas nalgadas y apretaba sus muslos.
Entre más se la metía, mas se jorobaba y se retorcía Molly, y ella no estaba en celo pero igual lo estábamos haciendo,. Se la metí mas adentro para sentir donde topaba, pensé que ya no se podía meter mas, hasta que sentí como si hubiera otra pequeña entrada allí adentro, osea, otro hoyo pequeño adentro de su vagina, su florecita NUNCA HABÍA SIDO PENETRADA.. Entonces me exité más y se la metí hasta romperla, arrugué mi cara, mis nalgas se apretaban y empujé hasta que sentí que la rompí, que la volvía a penetrar pero por dentro. De pronto me asusté porque pensé que me había excedido porque ella ladró y chilló brevemente, pero se calmó y yo sentí que todo se expandió, que no era estrecho y estaba ardiente, muy caliente y biscoso, tal vez su sangre, no se pero me encendí, se la metía toda, su ano topaba con mi vientre cada vez que empujaba. Lo hice mas y mas rápido, chocábamos duro y caga golpe su espalda se encorvaba hacia arriba, pero todo era tan rápido y acelerado, yo ya iba a acabar.
La penetraba sin parar y tan intenso que hasta llegué a cargarla, es decir, en la posición de perrito pero sus patas traseras no tocaban el suelo, solo se sostenía con sus patas delanteras sobre el sillón porque yo la levantaba con mis manos y mi ingle. Me iba a correr, por eso fue tan intenso! mis huevos chocaban adelante con su vagina y atrás abajo de mi. Exploté, chorros y chorros que no parecían acabar dentro de su inchada vagina, yo pujaba y pujaba para sacar toda la leche posible, le llene su interior con mi lechita caliente, tan ajitado que estaba en éxtasis! Molly al sentir mi leche como que le dio cosquillas por dentro, o sintió cositas raras, pero yo la abraze fuertemente y pegada ami, ambos bien juntos al final de nuestro coito. Su florecita había sido rota por mí, justo cuando tuve mi primera vez, tanto en zoo como en sexo.
Todavía hoy, me duele un poquito el pene, aunque mis piernas aún me siguen doliendo por el esfuerzo que hice supongo (incluso soñé con eso). Yo pensaba que no se podía si no estaba en celo, pero si se puede. Ya que con Molly, estoy seguro que tendremos sexo muy seguido. Esa fue mi primera vez, pero no la única, muero de ansias por tirármela de nuevo.
Gracias a ustedes por animarme a tener tremenda experiencia y les deseo lo mejor! Chao!
Atentamente: Rudy
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