Salí a hacer cicloturismo y terminé abotonado
Mis recorridos en bicicleta por el campo tuvieron un final feliz.
El finde pintaba de lo mejor climáticamente por lo que me decidí a hacer un recorrido en bicicleta por las sierras. Estos recorridos dos días completos, pasando la noche al descampado en algún lugar tranquilo fuera de toda la gente. Salí a la mañana temprano, con todo mi equipo liviano para pasar dos días en las sierras. Luego de varios kilómetros y ya siendo la tarde, me dispuse a buscar un lugar donde acampar. Siempre trato de buscar un lugar donde me asegure que no haya gente o que pase gente. Me gusta que esté cerca de un arroyo, porque me gusta bañarme desnudo y después de tantas horas sentado en la bici, con el pantalón de ciclismo que ajusta tanto, mis bolas también necesitan un descanso por lo que andar desnudo es todo un places.
Encontrado el lugar, armé la tienda, recuperé energía con un poco de comida y me fui a bañar, como les conté me gusta hacerlo desnudo, así que ahí fui a relajarme en el agua. Al rato de estar allí veo que aparece un perro negro, de talla mediana. Aquí tengo que hacer una introducción y mencionar otro de mis placeres, ser penetrado por un perro. La zoofilia la practico hace más de 10 años, todavía estaba casado, y me dá un gran gozo ser penetrado por un perro y sobre todo quedar abotonado.
Luego de esta pausa, se imaginarán que cuando vi a ese perro comenzó a crecer mi líbido y mi pene. Para colmo es de los que me gustan, de pelo corto y joven. Los perros jóvenes, como los humanos tienen más fuerza y más duración. La única preocupación era saber cuán manso sería, la única forma de averiguarlo era saliendo del agua e ir hacia él.
Salí del agua despacio, ya tengo experiencia de cómo tratar a los perros, pero siempre puede haber un malhumorado.Salí sin darle importancia, él estaba lamiendo restos de comida y con un ojo me miraba, estaba en posición de alerta. Me quedé al borde del agua, parado tomando sol de espaldas a él, sin darle importancia. él tenía que ver que no era una amenaza, todo lo contrario. Mi estrategia comenzó a surgir efecto, al rato se acercó y comenzó a olereme los pies, lo dejé hacer, siguió por las piernas y me dió la vuelta y puso su hocico entre mis nalgas. Y volvió a atacar mis nalgas con su hocico, un shock eléctrico cruzó mi cuerpo e hizo que mi pija se parara. Se apartó y volvió con su hocico pero ahora sacó su lengua y urgó abriéndose paso entre las dos nalgas. Para mi placer no tardó en encontrar el agujero de mi ano. Esa lengua fría y húmeda entrando en mi caliente cuerpo. Acerqué mis manos y abría más mis cachetes para que entrara mejor. Así lo hizo.
A esta altura, mi culo pedía pija y mi pija chorreaba presemen, el perro se dió cuenta. Si bien hata el momento no parecía un perro agresivo, sino todo lo contrario, tenía mis resquemores, me relajé porque los animales intuyen el miedo y se pueden poner violentos. Abrí mis piernas y dejé que también lamiera mis huevos, entendió lo que le sugerí y en eso se entretuvo, lamer mis huevos y mi culo. Unas gotas de presemen cayó sobre mis bolas cuando pasó su lengua, le gustó y vino a mi frente a lamenme la pija. Yo la cubrí con mis dos manos y le ofrecí la cabeza de mi pene brillante y jugosa. Su lengua áspera no paraba de lamer. Yo no aguantaba más, no quería acabar sin que me cogiera el perro. Con voz firme pero tranquila le dije «quiero» y para mi sorpresa se apartó y se quedó a un lado. Aproveché y fuí hasta donde estaban mis cosas para ponerme una remera porque lo que seguía era ponerme en cuatro y no quería que el perro me rasguñe toda la espalda.
Me puse la remera y saqué mi bolso de dormir que usé para apoyar mis rodillas, me puse en cuatro patas y el perro negro volvió a meter su lengua en mi culo, que ya estaba dilatado por su trabajo. Junté presemen de mi pija y lo pasé por el agujero de mi ano metiendo mis dedos en una hermosa paja anal que ayudó a prepararlo para lo que vendría.
El perro se puso sobre mí dando puntazos desasertados en la puerta de mi culo, me fui acomodando hasta que lo gró penetrarme. Ahhhhh que hermoso pene de perro en m culo. Ese mete y saca rapidito que hacen los perros me lleva a una exitación tan grande que me hace querer más y más. Me estaba preparando para lo que vendría y llegó. Metió su bola Ahhhh!!! Sentirla dentro y sentir cómo se hincha, se agranda tapando desde dentro el agujero de mi culo es un placer inmenso. Y luego el perro gira y nos ponemos culo con culo. Ese roce de los pelos del perro en mis nalgas y en la entrada demi culo aumenta mi exitación.
Asi estabamos culo con culo, yo gozando el pene del perro hinchandose en mi culo, mi pija ya estaba casi en el orgasmo, asi que comence a pajearme despacio, sabía que esto era para rato y había que disfrutarlo. Tendría como mínimo entre 15 a 20 minutos la pija del perro en mi culo y había que disfrutarlo cada minuto. Aguanté de acabar todo lo que pudé y cuando largué mi chorro de semen que cayo entre las piedras, el perro comenzó atratar de separarse de mi culo. Ahhh!!! lo máximo yo acabando y el perro sacando la bola dejando mi culo abierto. Me recosté para descanzar mis rodillas, cuando mis piernas dejaron de temblar me levanté y me fuía hacia el arroyo a lavarme y refrescarme. Cuando me paré los chorros de semen del perro salieron de mi culo y bajaron por mis piernas. Me metí en el agua y al meter mi culo sentí lo abierto que estaba, cómo me entraba agua.
Salí y me puse a secarme al sol. El perro estaba también tirado lamiendose el pene.
Me recosté, cerré los ojos pensando en si el perro querría más. Yo sí. Él querría o ya estaría satisfecho. Una lamida en mi pene dió la respuesta.
Hola, que gran aventura tuviste amigo, de verdad me agradó como lo comentas. es delicioso tener un perro dentro de uno.
Hola sexyjuan gracias por tu comentario. Hay un gran placer en ser penetrado por un can. Seguiré con más relatos.
Me calientan estos relatos nunca lo e hecho quiero intentarlo quisiera se abotonado por un perro y sentir la leche. Solamente e sentido leche de hombres me encanta tragarla con mi culo o boca. Solo una ves intente con un perro me exito ver su pene parado y muy rojo en ese entonces yo tenia 20 años y solo lo masturbe tratare de hacer eso para ver que se siente. Ahora tengo 38 años y soy muy caliente.
Wow que rico tu relato y tu experiencia me ha calentado rico yo muero por ser penetrado ppr un perro y ser abotonado ser su perra muero sentir ese placer 😍