Secuestrado para perra
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por marinerosado.
La noche del 11 de diciembre del año pasado, buscando una dirección en una ciudad lejana a mi pueblo, me perdí en unos suburbios de calles muy estrechas y de muy malas condiciones.
Llegue a un lugar de muchos edificios viejos en muy mal estado para darme cuenta que ni siquiera waze podía ayudarme.
Me di cuenta por el retrovisor que detrás había una van cerrada que iba muy pegado a mi auto y que por no dejarme influenciar por el miedo que uno tiene a los asaltos seguía diciéndome que era casualidad que me seguía.
Doble a la izquierda tratando de comprobar que la van seguiría derecho, pero no doblo detrás de mí.
Se me pusieron los pelos de punta y acelere el auto lo más rápido que la destrozada calle me permitía.
Cuando estaba llegando a la esquina otro vehículo se me atravesó y ocasiono que me detuviera.
De inmediato, se despuntaron 4 personas armadas y se acercaron a mí.
No baje el vidrio ni aun con sus amenazas, pero rompieron el vidrio de mi puerta y la abrieron.
Me agarraron y sacaron del auto, me colocaron una capucha que no me permitía ver nada e intuyo que me llevaron hacia la van.
Me subieron, me esposaron con los brazos en la espalda, los tobillos y los brazos a algún artefacto que tenía la van preparada para esto.
La verdad no lo sé pues no veía nada.
Escuche voces lo que me indicaba que detrás iban algunos acompañándome.
Tenían un pronunciamiento raro del español.
Mi corazón explotaba, estaba al borde de un colapso.
Pregunte que hacían y que querían? Pero nadie respondió mis preguntas.
Era muy complejo poder entender lo que pasaba, úes de ser un secuestro por dinero, ellos se habían equivocado pues soy una persona divorciada, sin dinero, que vive de un sueldo como empleado.
Debimos recorrer unas horas entre caminos malos y avenidas pues demoró el viaje.
Llegamos a algún lugar donde me desmontaron esposado como estaba.
Y en un momento de esa misma noche debimos tomar un avión y volamos a no sé cuál lugar.
Desperté, no sé si me drogaron para hacerme dormir o fue por el cansancio que me dormí.
Desperté atolondrado por eso creo que usaron algo para dormirme.
Ya más consiente, comienzo a examinar mi situación.
Lo primero es que me doy cuenta que estoy totalmente desnudo, encerrado en una jaula de animales, con manos y brazos esposados y en posición fetal.
Trato de estirar mis piernas pero no puedo, pues la jaula esta pequeña.
Miro a mi alrededor y veo otras jaulas.
A varias jaulas veo otro hombre de tez clara y más joven que yo.
Le pregunto que si sabe que está pasando pero me responde en inglés.
Por el idioma no logramos entendernos pero por la expresión de muestras caras sabemos que estamos en graves problemas.
Me percate que había jaulas vacías y otras con perras y perros de razas grandes.
Trate de incorporarme pero solo puede sentarme.
Pasarían 1 o 1 ½ horas cuando entraron unas personas de raza blanca.
Comenzaron a sacar los perros y llevarlos a otro lugar.
Luego me tocó a mí.
Salí de la jaula e intente pararme pero de inmediato me golpearon en las rodillas para que estuviera en 4 patas.
Me pusieron unas rodilleras atadas con correas muy fuertes que me no me permitían enderezar las piernas.
También me colocaron un collar de metal en el cuello fijándolo con remaches para que no pudiera quitármelo.
Lo mismo pasó con la otra persona.
Nos pusieron una cadena y nos halaron al igual que a los demás perros.
Por más que cuestione nadie dijo media palabra.
Llegamos a un lugar donde bañaban a los perros.
De la misma forma como otros perros fuimos bañados.
Luego nos llevaron a un lugar de pelaje y nos quitaron todos los pelos del cuerpo entero.
Ellos usaban una fusta eléctrica para el que no obedeciera.
Luego nos llevaron a una perrera porque eso era, más grande donde había más hombres y más perros.
Nos entraron a cada uno en una jaula.
Y apagaron las luces.
Se escuchaba el ladrido de un perro, de 2 y de más.
Quede frente a otra persona y le pregunte que era este sitio.
Y este si hablaba español.
Me contesto: llegaron al infierno.
Esto es una red de secuestradores y de trata de hombres para sodomizarlos y usarlos en zoofilia.
Lo escuche y ni siquiera entendía.
El continúo diciendo: en este país uno de los mercados más sucios es la trata de hombres para vender el servicio de esclavos sexuales con animales.
Nos convertirán en esclavos para vender el servicio de utilizarnos para usarnos como hembras de animales.
Por eso estamos en jaulas, tenemos estas rodilleras y nos tratan como perros.
No se imaginan lo que nos espera.
Llevo unos 15 días cautivos y según ellos estoy en la fase preparatoria.
Mañana de seguro los podrán a ustedes 2 que serán los nuevos.
Esa noche casi no dormí atormentado por lo que escuche de ese tipo.
Amaneció, entraron los cuidadores, moviéndose rápidamente y entregando a cada jaula un plato de perro con comida y otro con agua.
Llegaron a la jaula donde estaba y el mismo procedimiento, me pusieron comida de perro y agua.
El tipo dijo: come que eso será lo único que veras hoy.
Me pego la fusta eléctrica y me dio un choque el cual respondí convulsionando.
Trate de coger el plato con la mano y medio otro corrientazo.
Y dijo: entiende perro que debes comer sin las manos.
Puso la fusta eléctrica sobre mi cuello y empujo para que bajara mi cabeza y tomara la comida con la boca desde el plato.
Así lo hice con asco y nauseas por el sabor y olor de la comida.
Comí algo y él dijo: buen perro.
También tuve que beber de esa manera.
Termino la hora de la comida y nos sacaron uno a uno.
Llego mi turno y me llevaron a un lugar como una terraza interna.
Me colocaron acostado boca abajo sobre un taburete.
Ataron las rodilleras a las patas del banco al igual que mis muñecas.
Estaba inmóvil.
Vino uno de ellos y me trato de abrir la boca.
No cedi, pero solo logre otra descarga eléctrica.
Abrí la boca y me colocaron una especie de arandela que cubría los dientes delanteros de arriba y de abajo.
Esto se sostenía además de un cabezal que se agarraba a la cabeza.
El anillo dejaba la boca abierta.
El tipo dijo: esta perra esta lista.
Nunca imagine lo que esto significaba.
Pero rápidamente lo sabría.
El tipo trajo un trapo sucio como de sangre y me lo unto alrededor de mi boca y también en mi culo.
El olor era fuerte y asqueroso pero no podía moverme.
Y llego el momento de saber que sería de mi vida.
Entraron un perro bóxer muy grande con su cadena y dominado por otro tipo.
El perro estaba muy nervioso y de inmediato se acercó a mi oliendo lo que me habían untado y si era secreciones de perra en celo.
El perro olio mi ano, lo lambisco como loco.
Luego lo llevaron a mi cara y por más que trate de retroceder no pude moverme un milímetro.
Al igual que en el trasero, el perro me lamio todo.
El tipo dijo: ya está listo y alguien, que debió haber sido el jefe, dio la orden de comenzar.
Ayudaron al perro a subirse por mi cabeza, y le colocaron el miembro cerca de mi boca, la cual como se imaginan no podía cerrar.
El perro por instinto hizo varias estocas pero no lo logro entrarlo.
El tipo lo agarro con las manos y lo dirigió hacia el hoyo que hacia el anillo en mi boca.
Y de esa manera el perro logro entrarlo en mi boca.
El anillo parece que tenía un diámetro adecuado para que el perro pudiera sentir que lo estaba entrando.
Se volvió movimientos frenéticos y su pene me llegaba a la garganta produciéndome arcadas.
Continuo unos minutos más y sentí una fuerte presión en los dientes era la bola inflamada que se le forma a los perros para mantenerse pegado a la hembra y poder asegurar la diseminación de sus espermatozoides.
Empujaba cada vez más fuerte hasta que la presión hizo que el anillo cediera al paso de la bola inflamada.
Sentí las primeras gotas de ese salado semen.
Así como cuando se detuvo el movimiento del perro.
Se bajó se mi cabeza y ahí sentí una presión contraria a cuando me estaba penetrando la boca.
Y la bola era tan grande que se quedó enganchada detrás del anillo y dentro de mi boca.
El perro seguía derramando semen dentro de mi boca de esa bola cargada.
Yo tuve que tragarlo para no ahogarme.
El tipo dijo: ya está, traigan el otro perro para que lo coja por detrás.
Yo no lo podía creer, estaba enganchado a un perro por la boca y me iban a hacer lo mismo por por mi culo aún virgen.
Entró nervioso otro perro y de inmediato comenzó a oler mi cumo a lamerlo y claro como un salvaje a subirseme.
En varios tiros sentí su punta como taladrada mi ano.
Sus uñas me cortaban la piel.
Me la metía como un demonio.
Entraba totalmente en mi.
No podía hacer nada.
En la boca tenía el otro perro atorado derramando leche y sin poder separarse.
De repente sentí algo duro que me rompía el año.
No entraba pero el perro seguía empujándolo rompiendo mi ano.
Lo sentía fisurado.
Y paso, su gigante bola entró por el esfínter bien adentro.
Era gigante.
El perro se puso frenético violando me hasta que paro sus movimientos.
Toda su baña me caiga en la espalda.
Luego de unos segundo se desmonto y comenzó a tirar de mi esfínter.
Pero la bola quedó incrustada dentro de mí.
El perro jalaba para separarse pero su hinchazón no lo permitía.
Todavía no entiendo cómo logro pasarme esa bola gigante.
Estaba atado a dos perros a la espera de que pudieran safar.
El que tenía en la boca se aflojó y termino vertiendo todo su leche en mi boca.
El otro duro como 8 minutos más y también se vacío en mi culo.
Así pase ese primer día.
Fascinante y muy excitante y a la vez increible tu relsto