Sómbra, una tierna locura
Impresionánte vér como un perro te provòca un deséo tán desmedído…..
Recién había cumplído los 18 años, entrába a la edád doráda, la ménte pása por un sinfín de cámbios que nádie te previéne, salí a jugár a la pelóta con los amigos, todo pasába normál… Cuándo pasó una línda chica de mayór edád que yo, y notó que la observába, me sonrió y quedé ancládo al píso sín sabér que hacér… Mi ménte viajaba a la velocidád de la lúz, pero mís piés no obedecían, finálmente el gólpe del balón en mi cabéza me hízo reaccionár, y léjos de seguír jugándo, me apresuré a ír con ésta chica… Váya, fué la mejór desición que tomára…. Debído a la diferéncia de edád, ella me pasába a escondídas al fóndo de su viviénda, dónde el cuárto de su tío que casi núnca estába, nos servía de palomár para tenér relaciónes… Tenía un perro pastór alemán, que de princípio no me aceptába, sólo que al finál dejó de gruñírme y nos hicímos amigos… Todo íba de maravíllas, hásta que una tárde, nos sorprendió su mamá y la mandáron al puéblo con su família.. El pobre Sómbra iguál lo hecháron a la calle por sér un alcahuéte… Y lo llevé a mi casa, se hízo amigo de mi ótro perro y todo quedó en páz…
Sólo que Sómbra le gustó vivír déntro de mi cuárto, nádie de mi família protestó porqué él se pasára conmígo todo el tiémpo, se les hízo habituál, yo tenía la manía de masturbárme diário al finál del día ántes de dormírme,
Y una ocasión llegué 3 horas ántes, tomé una dúcha y me senté pasándo la toálla por mí cuérpo, la arrojé sín fijárme, y la lámpara se fué al píso júnto con la cája de hílos, me apresuré a levantárlos, y quedé empinádo con las nalgas fuéra de la cama núnca escuché a Sómbra que se acercó y metió su naríz éntre mis nalgas olfateándo, quíse al moménto tirárle una patada y que se alejára, y lo que yo no esperába, éra que se púso a lamér mi culo, mi reacción fué pasár del enójo a la sórpresa y de ahí, al placér.. entónces me quedé quiéto, dejándolo que chupára, éra curióso que ésto me pusiéra tán caliénte, y me púse a masturbárme al mísmo tiémpo, de repénte subió en mí, y se púso a bombeár dándo tán fuértes «piquetázos» tratándo de metérse…y cási yá me ponía en pié, cuándo logró entrár…. Sentí como se deslizó su pito déntro de mí, y la fórma en que entrába y salía en sus embátes, ésto me provocó tánto placér, que lo dejé continuár, y su pito corrió déntro de mí en su totalidad, éra óbvio que jamás pensé en su manzanár a lo cuál tán prónto lo sentí inflamárse en mí, cási dába de grítos arrepentído….Más sín embárgo dejé que todo pasára en cálma. Sómbra buscó girárse, y así quedámos de espálda júntos. Él se jalába, sólo que me sujeté fírme a mi cama.. y yá cuándo terminó, caminába a buscár su cama con un grán colguíjo de pito éntre sus dos patas, y escurriéndo una grán cantidád de su leche dejándo camíno en el píso….
Toqué mi culo, y me horroricé al descubrírlo méga abiérto… Y saliéndo una grán cantidád de espérma… Me levanté y fuí al
baño, y me volví a duchár manteniéndo mi culo bájo el chorro de agua para limpiárlo y bajár la cruél hinchazón de tán treméndo abotonamiénto…
Al salír, me quedé observándo a Sómbra que relamía su enórme pito aún de fuéra, y lo más que se veia impresionánte, éra su manzanár.. Subí a mi cama y me híce una grán chaquéta sín dejár de vér el pito de Sómbra, fué tán delicióso lo que pasó, que al ménos lo hacíamos 2 véces en la semána, dejándolo que se abotonára 1 véz al mes, me gustó sér su perrita duránte 5 años, pués mi padre le regaló a mi tío a Sómbra para que le cuidára su casa en el puéblo… Luégo de 10 años, volví a ponér a ótra mascotita en mís locuras
Uy. Qué cortito. Casi me acabo pajeandome. Pero muy lindo. Me gustaría tener un perro así.
Gracias amigo, me encantó que te gustara, disculpa si fué corto, quizá porque aún no he calculado la posibilidad del espacio, ya iré viendo a mejorár ése punto… Claro que los perritos se apegan a uno con su instinto naturál, creo asegurar que con más del 85% podríamos hacerlo lo único que basta es tener un hambiénte y lugar propicio y más el cuidado de no lastimar o abuzár del carácter de ellos, les fascina hacerlo como a nosotros…. Te agradezco por pasár y tu comentario
Muchas veces las circunstancias no son propicias para tener perrito
Y cuando hay uno de visita, es muy difícil lograr la intimidad con ellos.
Yo solo he tenido dos peritos topo poodle. A escondidas pero muy placentero.
Te felicito por tu suerte de gozar en libertad de la rica verga de perro
Woo, te agradezco tu comentario, espero puedas también disfrutar de tener un buen perro para deleite tuyo..
Gracias
Me encanto… Quiero experimentar el abotonamiento grande 😉
Pués al princípio nos espánta la apariéncia del tamaño del botón, éntra fácil y rápido cuándo te bombéa el cán, no siéntes cuándo se diláta, sinó cuándo se jála para volteárse pero si te dígo, es una delícia quedár así abotonádo.