UNA PERRA….NINFÓMANA?

La reproduccion sexual de los perros son, en su mayoria, una necesidad fisiologica mas que un placer….pero siempre hay excepciones. .

Mi primer relato en esta comunidad sera una experiencia emocionante, curioso y placentero, tanto para mi como para ustedes….,sin mucha chachara vayamos al contexto de esta historia…

Bueno, sin profundizar mucho doy un relato de como comencé en la zoofilia y como conoci a mi lujuriosa perra.

Como todo joven a mi edad tenia mas testosterona que ganas de estudiar, veía pornografia casual para despues llegar más al morbo y encontrar esta categoría, la zoofilia…

Siendo muy curioso y con la dicha de tener una perra mestiza en casa empeze a practicar mis impulsos lujuriosos hacia mi perrita Lulu.

La experiencia de tener relaciones con un perro fueron increibles y mejor aún con tus fieles mascotas (aunque tambien probé a perras callejeras y no estuvo para nada mal)

Bueno, pasado el tiempo y ya siendo un adulto independiente, había adoptado a una pequeña perrita que me encanto desde que la ví, cabe aclarar que ya en ese tiempo no andaba tan cachondo como antes asi que no adopté a esa perra con la intencion de cogermela, aunque termino siendo asi jaja.

Pasaron meses y como todo ciclo de una perra empezó su primer celo, la lleve al parque por si encontraba un machito de raza que la monte y que baje su celo ya que estaba muy ansiosa en la casa y tenia que darle el doble de atencion. No paso niún solo perro por ahi ni por el hecho que estaba en celo…., me la lleve a casa algo cansado por el trabajo y esas cosas, asi que pense en satisfacerme un rato para liberar las tensiones.

Empezé a sobar mi miembro frente a la computadora, pero olvide cerrar la puerta de mi habitacion, entro mi perra con una rapidez que no tiempo ni de decirle que salga, fue directo a lamer mi pene con gran intensidad, que apartarle me era imposible a ese punto. En ese momento recordé el pasado, y me dio mas placer aún que no aguanté y solte una gran cantidad de espermas en todo el rostro de mi perra.

Ella lo lamia hasta acabarselo todo, me ladro una vez como diciendome «gracias por tu leche amo», me quede en el asiento transpirando hasta que voltié a ver a Yuli (me olvidé comentar el nombre), ella, jadeando y en posición doggystyle, literalmente mostrandome el rojo e hinchado de su vulva y ladrando como diciendome «por favor, penétreme» hizo que mi pene no solo vuelva a estar parado, sino que estaba tan duro que dolía. Aunque eyaculado hace unos momentos, yo queria….yo necesitaba poner mi pene en esa hinchada vagina que pide penetracion urgentemente.

Ni si quiera tuvé que hacer juegos previos para la penetracion, pues estaba tan húmeda e hinchada que mi pene de 17 cm entro sin esfuerzo alguno (cabe aclarar que mi perra era virgen). Su interior estaba caliente y sentia que su vagina me absorbía…perdí el control y le empezé a embestir como un verdadero animal en celo, mi pene se llenaba de sus fluidos y tambien de los mios, se lo metía con rapidez y dureza que….entré en razon y me detuve pensando «que estoy haciendo, mi perra es virgen y aunque este en celo no debo hacerlo de esta manera», pero justo cuando me detuve y la ví, empezo a voltear y lamer mi verga mientras ladraba como diciendo «por favor continua, por que te detuviste?». Estaba un poco confundido ya que tenia conocimiento de que una perrita debe tener que ser probada por otros perros o haber tenido crias antes de tú iniciar la relacion sexual, todo lo contrario con Yuli, aunque la haya bombeado de manera salvaje y mi pene es grande ella no parecia sentirse adolorida o quejarse, mas bien me estaba pidiendo que no pare y que sigamos con el encuentro.

No la pense demasiado, digo, nadie puede pensar bien cuando esta caliente, asi que iba a terminar lo que empezé, le volví a insertar mi pene despacio, para luego hacerlo como un verdadero animal, embistiéndola una y otra vez mientras ella jadeaba de placer, estaba llegando al climax e inserté toda mi verga en su hoyo, soltando un grito fuerte y rellenarla de mi esperma.

Me quede unos minutos dentro de ella y cayendo al suelo, soltando un gran suspiro de satisfacción y dejando chorrear todo el semen por el hueco abierto de Yuli. Ella se lamia como si de un helado se tratase toda su pegajosa vagina hasta que terminó limpiando mi pene que también chorreaba de fluidos.

Ese es solo el inicio de tanta historia que tengo y sigo teniendo con Yuli, en una proxima publicacion contare la razon del porque pienso que es la perra mas ninfómana que he conocido, habra mucho por contar, juguetes sexuales, penetracion anal, trio con otro perro…asi que espérenme que esta historia tiene para rato. Un gusto y nos vemos después.