Algo que jamás imaginé

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Primero que nada me describo, tengo 18 soy blanca, cabello liso, hasta más abajo de los hombros, tengo un cuerpo digamos bien formado. Piernas y trasero bien torneados, unos senos apetecibles y un rostro muy lindo. Soy estudiante de modelaje. Esto comenzó una tarde de esas de verano, llegaba a mi casa de la academia de modelaje como a eso de las dos de la tarde un viernes. No había nadie en casa pues mis padres pasaban casi todo el dia en el trabajo y soy hija única.

En casa tenemos un perro de raza Golden llamado Terry, muy hermoso y bien cuidado por cierto. Pues como venia muy acalorada, me metí a dar un baño, y mientras me bañaba comencé a tocarme un poco, pues hace un rato no tenia sexo ya que terminé hace un mes con quien era mi novio. Luego de un rato de tocarme y masturbarme un poco, me terminé de bañar y me fui a vestir. Me puse un short negro muy cortito y una blusa tipo top, pues hacia mucho calor, y además me encanta verme sexy. Pues luego me fui a la pc, y me puse a buscar todo tipo de paginas para no aburrirme, de música, variedades, etc. Hasta que di con una pagina de chat y conseguí a alguien quien con quien me entretuve hablando por un largo rato, parecía un chico muy agradable. Pasamos una hora hablando de todo, y pues entre esas cosas le pregunté si le gustaba bailar, pues a mi me fascina. El me dijo que muy poco, pero que si bailaba cuando la ocasión lo requería.

Entonces el me dijo que le gustaría verme bailar, y yo le dijo que con gusto, que si algún día nos conocíamos en persona iríamos a bailar. Entonces el dijo: "por qué no ahorita"? Me preguntó si tenia Skype e irnos conversar por allá, así podríamos vernos por la webcam, me pareció buena idea, quería conocer su rostro. Luego pasamos a la videoconferencia y lo vi, era un chico bastante guapo, cuando el me vio dijo una frase típica de los hombres: "Wow! que bella eres"! le di las gracias por los halagos y le dije que también era él muy guapo. Bueno, entonces isistió en verme bailar aunque fuese un poco, pero a mi me daba un poco de pena, el insistía hasta que acepté finalmente. le dije, estoy vestida algo sexy, déjame ponerme algo más decente, y el dijo: "no importa, así es mejor". Le dije: "jajajaja! Picaron" Bueno, está bien, sólo un momento y ya.

Entonces me levanté de la silla, puse una canción movida y comencé a bailar. El se veía muy sorprendido, me decía que tenia un cuerpo hermoso y muy sensual, al mismo tiempo que yo bailaba. Sus halagos me hacían sentir un poco caliente, pues miraba el deseo en su rostro, y comencé a bailar un poco más atrevida, el lo disfrutaba observando y yo al ritmo de la música me comenzaba a calentar cada vez más. En esas la puerta de mi cuarto estaba entre abierta y no entró mi perro Terry, a lo que le di poca importancia y seguí en lo mio mientras Carlos, que po rcierto así se llamaba el chico observaba y disfrutaba. En una de esas puse mis manos sobre el tope de una mesita que tengo ahí y puse me agache casi quedando en cuantro mostrando mi trasero hacia la cam, giré para ver su reacción, y el estaba impacatado, se notaba en sus expresión de deseo por lo que veia, pues la verdad estaba ya bailnado muy atrvidamente, cuando de pronto en una de esas estando en esa posición siento a mi perro sujetarme por las caderas con sus dos patas, a lo que con su fuerza y peso me hizo perder un poco el equilibrio y comenzó a hacer sus movimientos como de quererme penetrar, como pude intente quitármelo, pero me fue imposible, me sujetaba fuertemente y yo me sostenia de la mesita. Por Dios! Que pena, Carlos estaba presenciando ese momento embarazoso.

De pronto, sentía como la punta de su pene chocaba con mis nalga intentando penetrarme. Luego en un momento al no conseguir nada, me solté y yo me levanté, Carlos tenia un cara de sorpresa, pero parece que los disfruto y reía un poco. Yo con mucha pena por la situación le dije, "hablamos luego". El me pidió que no cortara, pero estaba muy apenada y cerré la ventana de la conversación. Luego de eso, me sentí super avergonzada que ese chico haya visto a mi perro hacer eso, lo regañé, pero el ni presto atención, estaba ahi prado mirándome moviendo su cola y con la lengua afuera. Pensé, "este animal quiso cogerme, que susto, que hubiese pasado si hubiese estado desnuda". Me quedé acostada en la cama un rato pensando en lo ocurrido, y les confieso que mientras el perro me tenia prisionera e intentaba penetrarme, sentí una sensación agradable cada vez que su pene chocaba con la entrada de mi vagina, de hecho me toqué y estaba toda mojada de ese liquido que sueltan los perros antes de penetrar a una perra. Me dije, "Será que verme bailar lo excito"? O era la posición que me vio como una perra.

Cuando esa idea de que me viese como una perra pasó por mi mente, sentí un extraño cosquilleo en mi vagina, y me dije: "qué te pasa cochina, estás loca, tan desesperada estás"? Pero seguía pensando en lo mismo y en una de esas dije, "qué tal si por curiosidad me pongo a bailar nuevamente a ver qué hace"? El estaba acostado en un lado de la cama. Yo puse música y comencé a bailar, me daba un poco de temor, pero al ritmo de la música me fui soltando, hasta el punto en que los disfrutaba y olvidé un poco la intención del baile, pero en esas el perro se para y comienza a mover la cola y se lanzo sobre mi poniendo sus patas sobre mis pechos y me lamió la cara, le dije: "te gusta verme bailar no"? Y el ahí paradito movía la cola y ladraba como queriendo decir algo. En esas pensé en ponerme en la posición de antes para ver su reacción, pose mis manos sobre la mesita y pare mi trasero haciendo movimientos sexys, en eso a los pocos segundos se lanzó nuevamente sobre mi, me sujeto con sus patas nuevamente y volvió con sus movimientos, sentía su pene queriéndome penetrar y solté una carcajada y le dije: "yo no soy una perra" mientras el seguía, la verdad me comencé a sentir un calor por todo mi cuerpo cada vez que sentía ese pene queriéndome penetrar, ese perro me había puesto muy cachonda. Por Dios! estoy loca, dije.

En una de esas se bajó y me dejó todo mojado el short, yo estaba la verdad muy caliente y dije, que rico se siente ese pene entre mis nalgas. Me fui a la cama y me puse en cuatro haciendo movimientos de baile y el vino nuevamente hacia mi subiendo en la cama, me di una palmada en la nalga y el se subio nuevamente, y ahí me dije, " y si me bajó el short" Luego, ya muy excitada por la situación, me ti mi manos por un lado y como pude me bajé el short hasta la mitad, en esas siento que su pene picaba mi ano, yo me mordia los labios, queria ese pene en mi vagina, ya yo no pensaba con cordura, luego abri un poco más mis piernas como pude con mi short a medias, me incliné un poco más hacia abajo y Zas! De una me la clavo, con mi vagina ya muy húmeda por mi excitación, sentí todo ese pedazo de carne correr dentro de mi. Cielos! Pero que rico, si, si, siiiiiiiiiiiiiii! Gemía de placer, gemía como toda una perra, pues en eso me había convertido. Dale papi, no pares, que rico! Con mi cara pegada a la cama, cerraba mis ojos y mordía las sabanas para no gritar fuertemente por temor a que mis vecinos escucharan, ese animal me estaba dando una cogida descomunal. Vamos Terry, no pares, y el cada vez más rápido y más profundo en mi. En esas siento como su pene se iba hinchando dentro de mi, y por un momento se quedó quieto. Yo sentía mi vagina muy dilatada, estaba a estallar, en eso el intenta separarse y senti un tiron muy fuerte. Ya que no podía bajarse de mi, dije: "Dos! Estamos pegados".

Lo sujete por sus dos patas delanteras para que fuese a hacer ningún movimiento brusco, pues quería sentirlo así encima de mi, dominandome, poseyéndome, pues ya era su perra. Sentía su pena palpitar dentro de mi vagina y chorrittos de semen llenar mi útero. Eso me hizo tener varios orgasmos uno tras otro, que rico!! Yo movía un poco mis caderas para saborear todo eso dentro de mi. Que rico, lo estaba disfrutando realmente, no quería que el momento acabara. Pero luego de unos quince minutos su pene se fue poniendo flácido y el de un tirón me lo sacó, y nos despegamos. Caí super agotada en la cama boca abajo y sentía que por mis piernas corría semen que salia de mi vagina, la cama estaba toda encharcada. Luego el se acerco a mi y lamió mis jugos y sus semen metiendo si hocico entre mis nalgas. Que rico, que sensación tan agradable. Luego gire la cabeza y mire su pene que aun le colgaba y era enorme, con razón lo disfruté tanto.

Luego como pude me levanté, me senté en la orilla de la cama y pensé en todo lo que había pasado, no lo podía creer, tenia remordimientos de conciencia, pero a la vez pensé en lo rico que la pasé y en que nunca había sentido tanto placer en el sexo. Luego sonreí, lo miré y le dije: " me hiciste tuya te comiste todo este hermoso cuerpo que es el deseo de muchos hombres, pero ahora soy tu perra papi" Y le di un besito y me fui a dar un baño. Esta es la historia de como inesperadamente conocí este maravilloso mundo de la zoofilia. Desde entonces, sólo mi perro me coge, es mi mejor amante y no se queja de nada, es sólo mio. Espero lo hayan disfrutado y les haya gustado. Luego les contaré más sobre mi y lo rico que es tener sexo con mi Terry! Besos!!!