Canelo si cumple II

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Como les conté en el relato anterior, pasada aquella hermosa y caliente sesión de sexo por primera vez con mi precioso Canelo, nos quedamos dormidos en mi cama, abrazados, juntitos; él con su hocico a la altura de mis tetas, yo con mi brazo alrededor de su cabeza recargado mi barbilla sobre ella. Desperté con una enorme sonrisa, me sentía satisfecha, como pocas veces en mi vida, sentía levemente la leche de mi Canelo rebosando de mi vagina todavía, reviví en mi mente todo lo ocurrido hasta hace apenas un par de horas con aquél macho que yacía plácidamente en mi cama, no me arrepentía en lo más mínimo, de hecho me arrepentía de no haberlo probado antes.

Empecé a darle besitos en la nariz a mi Canelo para despertarlo, despertó y empezó a mover la cola y me respondió lamiéndome la cara, abrí mi boca para dar paso a su rica lengua, saqué mi lengua y la empezó a lamer, me encanta hacer eso con él. Él ya estaba en cuatro patas sobre la cama, usando toda su lengua en mi boca y sus alrededores, me empecé a acariciar la vagina con una mano y mis pezones con la otra, me empecé a calentar mucho. Canelo detectó mi excitación, el aroma de la humedad de mi vagina invadió su sentido del olfato, sacó su hocico de mi boca y rápido buscó la fuente de esos jugos dulces a su paladar, quité mi mano, la única barrera entre mi sexo y su poderosa lengua y Canelo empezó a lamer con intensidad, no me dejaba casi respirar. "¡Así, Canelo! ¡Así, mi amor! ¡No pares! ¡Me vas a hacer venirme, Canelo, me voy a venir! ¡Me vengo!". Mis manos acariciaban mis tetas, pellizcaban mis pezones al compás de las lamidas de Canelo, mientras me hacía llegar al cielo una tras otra vez. Ya sentía las ganas de tenerlo dentro de mí otra vez, lo necesitaba, necesitaba su verga.

"¿Quieres coger otra vez, amor? ¿Me quieres llenar con tu verga otra vez? Dame tu verga, Canelo. Métemela, por favor, lléname otra vez." Me puse en cuatro patas encima de la cama, Canelo no tardó en darme lo que anhelaba, me montó y pronto su verga se clavó en lo profundo de mi ser, arrancándome un enorme grito de placer, lujuria y empezó a moverse frenéticamente dentro mío, tardando solo unos segundos en llevarme al orgasmo, llenando mi cuerpo de olas de placer que parecían no terminar. "¡Así, Canelo, cógeme, cógeme duro, no pares que me vengo! ¡Soy tu perra, hazme tu perra, haz con tu perra lo que quieras!". Aunque fueron solo unos minutos y su bola se adentró en mí, amarrándome a mi macho unos momentos, antes de zafarse de mí, mientras todo su amor se desparramaba de dentro de mí, corriendo por mis piernas hasta mi cama, impregnándola del olor de su semen y mis jugos, rastro que eliminaría más tarde por precaución, pero que hace dar vueltas mi cabeza.

Faltaban sólo un par de horas para que mi mamá y mi tía volvieran a casa, así que llevé a Canelo al patio, donde me dejé montar por él una última vez (ese día), dejándole claro que él es mi macho y yo su hembra, él siempre está dispuesto a satisfacerme cuando estoy caliente y yo estoy dispuesta a satisfacerlo a él cuando le entra la calentura. Tenemos la mutua obligación de satisfacernos el uno al otro y hasta ahora hemos cumplido, sobre todo él. Desde ese día mi nivel de necesidad de sexo ha aumentado considerablemente, pero Canelo siempre está ahí para mí y yo para él. A veces ando tan caliente en el día que no puedo concentrarme bien en otra cosa que no sea la verga de mi Canelo, llego a casa a desquitar toda esa calentura cogiendo mucho con él.

Lavé las sábanas, ordené mi habitación esperando la llegada de mi mamá y mi tía, sabiéndome transformada por dentro y por fuera, nada ha sido igual desde entonces. Tampoco soy ingenua y pienso que lo que tenemos es "amor verdadero", pero funcionamos y nos queremos, nos satisfacemos, pero los dejó con este pensamiento de una de mis películas favoritas, "Marley y yo", que me encanta por razones obvias:

"A un perro no le importa si eres rico o pobre, ingenioso o torpe, inteligente o tonto. Dale tu corazón y te dará el suyo. ¿De cuántas personas puedes decir eso? ¿Cuántas personas pueden hacerte sentir puro y especial? ¿Cuántas personas pueden hacerte sentir extraordinari@?".

Gracias por su atención, espero nos leamos pronto. Espero pronto compartirles más y que ustedes se abran más también y compartan sus historias en esta linda página. Besos.