chery y sus amigos
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hace algún tiempo fui al bar. con unas amigas a beber unos tragos y charlar y …… cerca de las 4 de la mañana me fui a casa , en un semáforo dos perros callejeros jugaban solitos, me estacione a unos metros y los llame, me quedaron mirando hasta que les arroje un par de galletitas que siempre traigo conmigo
Al acercarse pude verlos bien dos lindos machos de raza desconocida, les hice cariño a ambos en el lomo, me senté en el borde de la puerta y los acaricie lentamente para saber si se dejarían tocar sus bellos miembros, suavemente con una mano en su hocico y la otra buscando el premio gordo fue bajando hasta tocar su forro, para identificarlos les llamare rubio y negro, bueno a rubio logre tocarle su forrito permitiéndome correrlo sin hacer ninguna demostración de agresividad
Después probé con negro mano en el hocico y la otra buscándolo, al bajar a su vientre este me gruño y me dio susto, pero seguía acariciándolo para que se acostumbre a mi mano en eso rubio se acerco un poco mas permitiéndome tocarlo a el también, rubio poco a poco asomo la puntita de su miembro afuera mientras que negro aun un poco arisco pero cada vez mas dócil, esta situación ya había logrado que mi vagina se excitara produciendo una exquisita secreción, solté a rubio y metí mis dedos en mis labios vaginales para luego dárselo a probar a rubio, este saboreo mis jugos deliciosamente y suavemente, su lengua chupaba mis dedos hasta dejármela totalmente mojada
Volví a meterme los dedos con su saliva y se los di a probar a negro y este los olfateo para luego lamérmela toda, lentamente comencé a bajar mis calzones para dejar mi vagina al descubierto, y ver si alguno de ellos sabia utilizar su lengua, negro se anduvo asustando pero rubio seguía ahí como esperando algo mejor que mis dedos, me metí nuevamente los dedos para dárselos otra vez, esta volvió a lamerme mientras acercaba mi mano a mi vagina, ya podía sentir su respiración en mis labios, luego su lengua hacia bingo en mi clítoris, mmmm que delicia sentirlo ahí en la calle, donde en cualquier momento alguien podía verme haciendo esto
Su lengua buscaba mis jugos, así que con mis manos me abrí los labios para dejarlo atacar directamente mi hoyito y mi clítoris, esa lengua ancha y áspera me daba muchísimo placer y mi calentura crecía a pasos agigantados, quería sentirlo dentro mió pero ahí no podía, me levante, cerré el auto y camine con ellos colgando mi calzón húmedo, para que sigan conmigo, a cuadra y media un pequeño parque lo bastante oscuro para sentirme su perra, llegamos y detrás de unos retamos, me tire en el suelo dándole a rubio mi mano nuevamente y a negro mi calzón sin antes pasármelo por mi vagina mojada por rubio, rubio volvió a lamerme, levante un poco mi cola y pude sentir su lengua tocarme toda y abrir mis labios
Mi cuerpo entraba en un calor delicioso, cada lamida era tocar el cielo, mi clítoris estaba durísimo, sentía un calorcito en todo mi cuerpo, a los poco minutos, provoco esa lengua un delicioso orgasmo, como les explico mió, fue silencioso, apreté mis manos fuertemente contra el pasto, mientras mis caderas temblaban de placer, mmmm rico rico, baje mis caderas y me di vuelta sin levantarme, rubio estaba caliente, le deje mi colita frente a su hocico y el solo se puso sobre mi colocando sus manos en mis caderas, una vez así levante mi cola a su altura y su pene penetraba el aire y golpeaba mi cola una y otra vez
Cada embestida su pene se acercaba mas a mi vagina, me acomode un poco mas hasta sentir esa punta en mis labios, me levante un poco mas y lo sentí entrar estaba pequeño aun, lentamente una vez que mis labios lo atraparon su poderoso pene entro en mi aumentando rápidamente su tamaño, en eso negro se acerco a lamerme la cola, tuve miedo en ese instante cuando rubio le gruño ya que el estaba dentro mió y el otro debía esperar, negro llego a mi mano solito lamiéndomela, mientras rubio me daba violentamente, su miembro me abría cada vez mas adentro y su calor lo sentía cada vez mas a dentro, su pene salía y entraba tan rico y cada instante era mas y mas grande, hasta que me puso su bola, dura y enorme
Entro en mi abriendo toda mi vagina y apretándome con mucha fuerza y el premio sentí cuando se le hincho y el primer chorro caliente y espeso lleno mi vagina, uno tras otro sus chorros me llenaban, mientras su pene que apenas se movía seguía dándome placer al sentirlo palpitar dentro mió y mi locura no pudo mas, estalle en un rico y largo orgasmo, podía sentir mi vagina llena de semen caliente y mi vagina explotando para recibirlo todo, me deje caer pero no pude safarme, a los minutos caí de su pene, saliendo su semen de mi, negro que esperaba su turno, se apresuro a olfatearme y su lengua probo nuestras secreciones, se monto sobre mi y rápidamente lo movía buscándome
Levante apenas mi colita cuando lo sentí entrar casi a la primera, su pene ardía o yo estaba muy caliente no lo se, pero así lo sentía, su tamaño creció igual dentro mió rápidamente hasta que sentía su bulto golpear mi colita buscando meterse, métemela pensé y el adivino con sus manos me apretó fuertemente y me la puso toda, su miembro un poco mas chico que el de rubio y por lo dilatada que me había dejado rubio su pene y bola entraban y salían a su entera disposición, que delicia, mmmm dame duro amor balbuceaba suavemente, métemelo papito, dame…..dame…..dame quiero tu leche todita
Negro bombeaba muy rápido, una y otra vez su bola entraba y salía provocando que la leche de rubio saliera a chorros de mi cayendo por mis piernas, dame amor volví a decirle cuando acaba una vez mas y luego el casi al instante su semen rico me llenaba, sus patas buscaban bajarse provocándome unos arañazos en mi espalda, se salio y pude ver como su pene aun soltaba chorros de semen, que pena pensé pero me había dejado satisfecha, ellos dos me dieron muy rico y me hicieron acabar deliciosamente, me puse de pie y sentía como el semen dentro mió caí por mi pierna, me sentía una perra, sucia pero satisfecha de lograr uno mas de mis bajos deseos.
Volví a mi auto después de buscar mi calzón que nunca lo encontré, me senté y estaba muerta, solo deseaba llegar a ducharme y dormir. Camino a casa me fui tocando tenia totalmente abierta mi vagina mi mano entraba hasta mi muñeca, me ponía caliente pensar en esos penes todos para mi y pensar que en casa había dos mas pero lo que hice se los cuento en otra oportunidad.
Espero lo disfruten no tanto como yo
cheryoral@hotmail.com
Nos vemos pronto
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