Cómo perdí la virginidad de mi cola
Todo empezó cuando ví a mi perro un pastor belga apareándose con nuestra perrita.
Holis últimamente me a agarrado por leer sus relatos zoo y me gustaría contar una anécdota de cuando tenía 10 años aún que e de aclarar antes que no e vuelto a practicar zoo desde entonces y en esa época no sabía nada de esos temas.
Yo me crié en unos campos de México no diré. Cuáles por qué en mi pueblo todos se conocían es chiquito, yo tenía alrededor de 10 añitos y el año anterior mi perro un pastor belga de ya 5 años lo había visto copulando con una hembra la cual le trajeron para vender los cachorritos, yo presencié todo el acto e de explicar que en el campo es normal ver animales apareando y más por qué era una granjita dónde vivía.
Y la verdad me dió un chingo de curiosidad todo aquello esa misma noche le pregunté a mi papá que para que hicieron que el perrito hiciera eso y el me respondió que estaba haciendo cachorros cosa que para mí a pesar de a ver visto como los animales hacían eso jamás había preguntado aquella duda estuvo en mi cabeza por muchos meses hasta que llegaron los cachorritos a la Granja yo toda emocionada le puse nombre a todos y cada uno pensando que nos los quedaríamos me había enamorado de esos cachorritos más mis padres ya los tenían listos para vender por lo que uno a uno fuero llevándose los dejándonos solo un cachorrito a nosotros cosa que me puso triste por qué la verdad quería mucho esos perritos más con el tiempo fui aceptando la idea de que no los volvería a ver.
Hasta que un día recuerdo era temprano y todos se habían ido a hacer sus cosas mi mamá cocinaba en la casa de mi abuela como a 10 minutos caminando y mi papá se ponía a trabajar la tierra, por lo que estaba acostumbrada a estar sola mucho tiempo no hacía realmente gran cosa imaginaba tonterías y veía televisión, pero esa mañana fui recibida por mi perro el más grande quien empezó a lamer mi cara como loco por qué sin querer lo habian dejado encerrado a lo que yo aún queriendo dormir me pare con disgusto a tener que abrirle más cuando me baje de la cama el perro empezó a molestar le gustaba tomar las piernas y comenzar a montarlas era muy mañoso y eso fue exactamente lo que comenzó a hacer y yo enojada lo movía y el seguía, en eso llegó su hijo el más pequeñito el cual si dormía dentro de la casa y este comenzó a correr como loco pensando estábamos jugando pero yo lo que quería era bajar a esa molestia, sinceramente no recuerdo por qué o simplemente no lo pensé del todo pero ya en mi cabeza se venía una idea. Si el perro al hacer eso hacia cachorros entonces si yo era la mamá de los perritos mis papás no los venderían.
Si ya se lo que están pensando quien es tan pendeja pues «está de aquí» y así fue me baje de la cama con eso en mi mente tenía miedo e de decir por qué si mis padres me veían pensaba me regañarian por andar haciendo cachorros para evitar que los tuviéramos, pero yo la neta solo quería mis perritos e de resaltar que al vivir sola con mis padres (hija única) pues dormía prácticamente como vine al mundo solo con unas bragas ya que la ropa me daba comezón de noche, a continuación e de narrar lo que recuerdo ocurrió después:
°me baje de la cama y empecé a acariciar la cabeza de mi perro de manera frenética como jugando con el y para que se activará a lo que este se quedó quieto ya más tranquilo, por lo que con cuidado de no agacharme mucho me quite las bragas y las coloqué sobre la cama para acto seguido agacharme y colocarme en posición de perrito meneando mi cadera para llamar la atención de este, más lo único que lograba era que me lamiera el trasero cosa que se sentía sumamente raro su lengua era rasposita, cálida y húmeda con cada lamida podía sentir como dejaba mi culo mojado (no mi vagina) y así estuvimos un buen rato el no lograba hacer nada y el cachorro empezó a molestarme lamiendo me la cara por lo que lo apartaba a cada rato fue en esos forcejeos con mi perrito que su padre me monto, agarro los costados de mi cadera como hasta la fecha ningún hombre a hecho con una firmeza y fuerza muy grande como diciendo «de aquí no te vas», su peso era bastante la verdad pero no sé si era la posición o que casi todo el eso recae en la lumbar que a pesar de sentir que era pesado no tenía que hacer mucha fuerza para estar así. A su vez recuerdo las húmedas estocadas puntiagudas contra mis nalgas pensaba que se trataba de algo pequeño por qué la verdad así se sentía más a pesar que este me trataba de coger no lograba meter nada, al menos no sin ayuda su hijo volvía y seguía de mamón lamiendo la cara pensando se trataba todo aquello de un juego lo empujaba y volvía el infeliz nuevamente su padre supo aprovechar eso por qué cuando ya me había dado cuenta mi perro ya me había reclamado como una de sus perras~ tan rápido como logro meter esa verga en mi culo este ya se estaba moviendo provocandome un intenso dolor en mi vientre que me hizo llorar sentía unas punzadas horribles en mi culo y una sensación de presión muy fuerte, sus estocadas a la par de salvajes eran brutalmente fuertes podía sentir sus enormes bolas golpear mi culo sin piedad una sensación de dominancia realmente indescriptible me sentía como si en vez de ser su dueña fuera yo la mascota además que su verga a pesar de sentirla penetrarme y moverse en mi interior era como si realmente jamás la sacará como si solo la metiera hacia el fondo mientras está crecía en mi interior al inicio fue realmente pequeña pero conforme me cogía se hacía más gruesa y soltaba un líquido caliente dentro de mi ademas unas bolitas sentía crecer en mi interior, yo realmente quería sus cachorros pero desde que empezó no podía parar de pedirle que se detuviera sollozando y suplicándole en silencio para no alertar a nadie si de casualidad estuviera cerca, casi hasta estaba a punto de rezar pidiendo perdón pero sin exito alguno el había obtenido un nuevo juguete el cual no planeaba soltar y a pesar que duró tan solo un poco menos de un minuto para mí fue mucho tiempo, hasta que de pronto una paz se quedó quieto y a pesar de que la sensación de presión y vacío interno no se había marchado ya no me dolía tanto al menos no hasta que sentí aquel enorme par de bolas crecer dentro de mi culo haciendo que aquella sensación de vacío como cuando tapan una botella con un corcho se hizo más fuerte a lo que el perrito luego de unos segundos se dió la vuelta y me dejó ahí con el culo destrozado y aún con su miembro en mi interior quería moverme pero algo me lo impedía este no salía y si me movía aquella sensación de vacío dentro de mi me asustaba como si fuera a desgarrarme si lo jalaba con fuerza. Me sentía humillada y muy alterada casi al borde de llorar si me veían así estaría en problemas y su hijo durante todo el acto había aprovechado en lamerme toda la cara como un infeliz recuerdo cuando volvió a acercarse mien
Esta bueno, pero lo subiste incompleto
guauuuuu,
que chiquilla.
lindo relato.
cuenta mas.