Era un día de lluvia en la granja
Un día de lluvia en la granja con mí hermana tania.
Llovia en la granja estaba Tania en su pieza mirando el techo cuando oyó gritar a Juan su monito que tenía de mascotas, se levantó y fue a ver a qué se debían esos gritos y encontró a Juan masturbándose y yo miraba lo que hacía cuando Tania me vio no pude desir palabras yo estaba con el pene en la mano mientras el mono se masturbaba, lejos de hacer un escándalo Tania se acerco a nosotros y el mono subió a su regalo como era costumbre pero está ves lejos de abrasarla como siempre con una mano se sostenía de su cuello mientras que con la otra mano sobaba descaradamente las tetas de mí hermana, yo miraba anodadado y cada ves más exitado, Tania lejos de asustarse se quitó el vestidito que tenía puesto y el mono empeso a lamerle sus pequeños pesoncitos ya bien marcados a pesar de sus 9 años. Tania se agitaba cada ves más dejándose llevar a la ves miraba cada ves más mí pene erecto con menos disimulo hasta que no aguanto más y me preguntó si la podía tocar si le dije pero estoy a punto de acába por favor porntela en la boca y has de cuenta que es un chupetín lo empeso a saborear con brusquedad sin agarrarle el ritmo hasta que la oigo agitarse cada ves más levanto la vista y veo a Juan el monito lamiendo su pequeña rajita cada vez más rápido ella lejos de incomodarse se dejaba hacer y atraía la cabeza de su monito a su entre piernas mientras con una mano mientras que con la otra me agarraba el pene yo no aguantaba más estaba a punto de acabar cuando siento ahh no no para para me sobresalto y veo a Juan el monito poniéndole su verguita en la conchita de mí hermanita me levanté sobresaltado para sacar al mono cuánto Tania me detuvo y me dijo para no lo quites que estoy sintiendo rico me gusta ah ah no me lo podía creer tenía un calentón brutal mí pene no daba más, le pregunté a Tania si le podía chupar su colita pensando en que se negaría y para mí sorpresa me dijo aslo aslo empese a lamer su colita, ella cada ves se retorcía más de placer conmigo lamiendole la colita y Juan su monito penetra sola por la conchita estaba en éxtasis total ella me lamía mí pene a punto de estallar cuando escucho al mono gritar y mí hermanita tensarse y veo brotar el néctar de su monito de su conchita no pude más grite ya ya no le pude aguantar y empese a llenarle la boca de leche a mí hermanita que lejos de sacarse seguía ahí jugando con su nuevo juguete yo no paraba de derramar leche estaba en extacis y ella lamía sin asco jugando con su lengua y tragándosela. Me levanté como pude aun me temblaban las piernas y me dirigí a mí piensa si decir nada.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!