Ese dalmata me hizo su perra

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hay hola, soy perrita, una perrita caliente. Esto me sucedio ayer por la tarde.

Sucede que como a las 5 de la tarde fui a comprar unas palomitas a mi sobrina, y antes de llegar a la esquina para dar vuelta, venia una mujer muy guapa con un hermoso perrito blanco, ella lo llevaba de un cordon, en cuanto me cruce con ella, el perrito se le jalo para irse conmigo, yo me puse caliente de lo que ya estaba. Ademas quiero decirles que yo olia a perra caliente, ya que hace unas horas atras coji con dos hermosos perros. Creo que eso lo excito a ese perrito, que queria cogerme ahí mismo en la calle, ganas no me faltaban para que me cojiera. Tambien me gusta coger en la calle, ya que me siento una perra libre. Quizas luego les platico cuando un perro me cojio a plena luz del dia en la calle. A todo esto la muchacha se rio de eso, tomo su perrito y se fueron. Al regresar yo de mi mandado, antes de llegar a la calle donde vivo. En una calle, salio un hermoso dalmata, grandote, y con una hermosa vergota. Yo pase cerca de el, y este comenzo a seguirme, creo que se excito con mi olor a perra caliente. Me di la vuelta para decirle:

– Mmmm, que hermosa vergota tienes, ven sigueme, quiero que me cojas.

En cuanto llegue a mi casa, acompañado de ese hermoso perrote, le dije:
– Pasate, pero no hagas escandalo.

El entro y lo lleve hasta un pequeño cuarto. Ahí rapodamente me desnude. Todavia se me salia la leche del culo, que esos dos perros me cojieron. Este perro se me acerco por detras y comenzo a lengüetarme el culo. El me avento con sus fuertes patas y cai en el suelo, como una perra, y ahí el se prendio de mi culo, comenzo a meterme su lengua.
– Aaahhhh… Siiiiii… Que placer…
Yo ya no aguantaba, queria que me metiera esa hermosa verga, asi que me meti entre sus patas, y le acerque mi culo para que me cogiera, tome su enorme vergota y me la fui metiendo.

El al ver esto, me tomo de mi cintura y…
– Aaahhhhhhh… Brusco…
Me la metio toda con una fuerza bruta, y comenzo a cogerme rico, su boton era grande, ya que lo pude sentir, y de un momento me lo clavo todo.
– Aauuucchhhhhh… Me duele tonto, pero me encanta. Ahhhhhhh…

Su enorme vergota casi me llegaba hasta el estomago. Era una vergota de 25cm, y muy pero muy gorda, mas aparte el boton. Asi estuvimos un par de minutos, hasta que el se vino en mi culo. Luego el se volteo para quedar culo con verga, qudandonos asi un buen rato, y arrastrarme por todo el cuarto. Si que sabia a tratar a las perras, y me lo hizo sentir. Y yo feliz de ser su perra. Luego de unos minutos mas, el se jalo y me saco su enorme vergota. Yo quede en el piso un rato.
Luego me puse mi ropa, para luego llevarlo a mi recamara. Y todavia lo tengo en mi recamara. No me dejo dormir en toda la noche, ya que continuo cojiendome, y parte de la mañana. La verdad es que estoy feliz con mi macho, pero yo no soy perra de un solo perro…

Si te gusto mi relato, escribeme con lenguaje vulgar, ya que me gusta ser tratada como una perra. No cojo con hombres, solo perros.