La curiosidad de sentirme perrita
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Quisiera confesar un capitulo de mi vida cuando era mas jovencita a la edad de 16 años, actualmente cuento con 27 años de edad, estoy por casarme sin haberle contado a mi novio nada de lo que les contare a ustedes pues si se lo platico a mi pareja quizás no quiera saber nada de mi.
En una ocasión de regreso de la escuela a mi casa vi a unos perros siguiendo a una perrita por la calle donde paso para llegar a casa entonces cuando yo avanzaba ellos también pues la perrita se detenía y el perro mas grande aprovechaba y le olía la colita, yo iba muy atenta a lo que pasaba entonces en uno de esas veces el perro impidió que la perrita siguiera caminando y la tomo por la cadera y se le monto, eso para mi fue muy excitante y sentí caliente mi vagina entonces los rebase y como pasaba gente no me podía quedar a mirar, en el camino pude sentir mi pataleta un poco mojada pues me éxito mucho esa escena.
El ladrido de mi Serafín me desconcentro, (tengo un pero en casa, me lo obsequiaron cachorro y ya para ese tiempo contaba con 2 años de edad, es un labrador golden) abrí la puerta de mi casa y entre, subí las escaleras y me asome por la ventana y cuál fue la sorpresa que los perros habían llegado hasta mi casa justo enfrente, vi al perro montando a la perrita cogiendosela hasta que se quedaron pegados; al observar pensaba en lo que pudiera estar sintiendo la perrita al quedarse atorada con el pene de ese perro, mientras mas los miraba sentía mi vagina que se humedecía pero no dejaba de mirar.
En eso estaba cuando escuche a mi mami que me decía que subiera a serafín al cuarto pues estaba necio en querer salir, entonces lo llame y cerré la puerta en cuanto entro mi perrito a la habitación, volví a seguir observando por la ventana y veía que aun estaban abotonados, escuche a mi perro llorar quedito para que le abriera la puerta y fue cuando al mirarlo note que se le asomaba la punta del pene, se le veía rojísima y húmeda; me hizo gracia pues mi perrito estaba excitado, ya tenia algún tiempo que no había estado con ninguna perrita, entonces escuche un ruido afuera y fui a asomarme y vi que mi mami les arrojo una cubetaza de agua a los perros, ambos corrieron en diferente dirección y tiraron, de entre ellos salio un charco de agua y el perro se quedo con su pene colgando, era muy largo, entonces volví a mirar a mi perro y la punta que se le asomaba no se le veía tan grande.
Después de un rato intente hacer tarea escolar pero yo seguía muy excitada, mojada, pensaba en lo que sentía la perrita al estar abotonada con el perro, pensaba en el pene del perro que era my largo y me era extraño creer que le cupiera a la perrita entonces paso una idea por mi cabeza que jamás lo hubiera pensado antes de sentirme tan caliente, pensé que quizás podría jugar con mi perro a que yo era su perra y ver como se comportaba pues quería saber que se sentía ser una perrita.
Salí del cuarto, baje las escaleras y fui con mi mami a decirle que me sentía muy cansada y que me iría a recostar me dijo que si que descansara en lo que ella iba al mandado y demás cosas que tenia que hacer. Fue perfecto pensé; me sentía nerviosa pero muy caliente cosa que jamás me había puesto así.
Entre a mi habitación y cerré la puerta con seguro, únicamente quería jugar con mi perrito a que yo era una perrita y así haber que pasaba; espere a que mi mamá saliera, se me hizo largo el tiempo aunque solo habían pasado 10 minutos desde que le dije, me sentía muy nerviosa, excitada y mi vagina muy húmeda, entonces escuche la puerta de la entrada de la casa, me asome por la ventana y vi que mi mami se subió al carro y se fue. Era el momento, me acerque a mi perro me agache y comencé a caminar a gatas por el suelo, me acerque a el y solo me miraba moviendo la cola ahí recostado, con cuidado le sobe la panza y baje a acariciarle su pene poco a poco, se le notaba en un tanto gordito y una pequeña puntita roja, me acerque un poco mas y note un olor un tanto desagradable pero eso no me quito las locas ideas de mi cabeza.
Comencé a frotarlo hasta que ya lo estaba masturbando, mi perrito se dedicaba a lamerse el pene mientras yo lo masturbaba, de apoco la punta de su pene se asomo mas, y se le humedeció muchísimo, eso me calentó y pensé nuevamente en la perrita que había visto que algo parecido a eso había tenido dentro de ella, entonces me aparte y gatee alrededor de el, yo hacia ruiditos como imitando una cachorrita, metí mi mano dentro de mi pantalón y toque mi vagina, humedecí la punta de mis deditos con mi fluido y se los di a oler, los lamió, gatee hacia el y me puse debajo de su pecho con mi colita levantada entonces se monto en mi.
Yo traía puesto un pantalón de mezclilla, entonces sentía como se movía encima de mi y me empecé a sentir muy excitada, pues ese perro me quería coger y yo quería sentirme una perrita, necesitaba sentir mas, sin pensarlo tanto aproveche que mi perrito se bajo y me levante a quitarme los tenis y me baje el pantalón y quede solo en mi panty, me agache nuevamente y mi perrito comenzó a olfatear mi colita pues me sentía muy mojada, sentía su lengua a través de mi panty, me lamia mis pompis entonces se me volvió a subir y sentía la punta de su pene chocar con mis labios vaginales pero por mi panty no llegaba a mas, entonces de apoco me fui moviendo hasta el filo de la cama para recargarme y estar más cómoda pues mi perrito me pesaba. Apoye mis codos en el colchón de la cama y pare bien mis pompis entonces quise sentir aun mas, realmente me quería sentir la perrita de mi perro y averiguar que se sentiría si me quitaba mi calzoncito pues quería sentir su pene rozar mi vulva y me excitaba muchísimo pensar en mojarle el pene con el flujo de mi vagina.
Entonces me puse de pie y termine por bajarme la panty, la deslice por mis piernas hasta sacármela, mi perrito mientras tanto fue paciente y solo me observo desnudarme para el, bueno solo de la cintura para abajo, me miraba como analizando el cuerpo del que iba a disfrutar, mis caderas son un poco anchas, tengo linda figura, toque los vellos finos de mi pubis y me di cuenta que realmente estaba muy mojada pues ya había humedecido mis vellitos. En ese momento no razonaba nada, jamás me había sentido tan excitada.
Me volví a recargar en la cama con mi colita bien parada y fue que serafin se puso a lamerme un poquito mi vagina y hasta mi anito se monto nuevamente en mi, con su pene daba piquetitos entre mi ano y mi coxis, yo tenia el control pues le calculaba hasta donde agacharme para que su pene no me penetrara y solo rozara donde yo quisiera pero entonces mi perrito hizo un ruido como que lloro pues no lograba metérmela entonces no lo pensé mas y no lo quise hacer sufrir por metérmela entonces agache un poquito mas las caderas y justamente sentí que le atino y me penetro muy rico pues por mi humedad se deslizo muy fácil el pene de mi perrito ya lo tenia dentro de mi, se hundió en mi intimidad entonces recargue mi cuerpo en la cama y deje que me la siguiera metiendo, sentía su pene muy duro en mi, en ocasiones me sacaba el pene y se bajaba de mi a lamerme mi colita entonces yo aproveche para mirar lo que me estaba metiendo pues lo sentía algo grande y me molestaba un poco y me sorprendió su tamaño era gordo y largo, muy rojo le goteaba mucho liquido y me éxito saber que esa agüita me la estaba dejando adentro y por eso estaba tan mojada, recordé el pene del perro de la tarde y eran muy parecido al de mi perro por el tamaño y la forma, que caliente me sentí, moví mi colita para pedirle que me la metiera de nuevo pues no deseaba que me la sacara tanto tiempo, la quería dentro de mi!! entonces me monto de nuevo y me la metió muy rico, poco a poquito le crecía mas su pene, me di cuenta pues me incomodaba cada vez mas, era como si se le estuviese inflando y me llenaba toda mi vagina que para entonces ya era un charco de tanto flujo.
Entonces acelero sus embestidas, eran muy fuertes que hacían que me doliera el vientre pues sentía que su pene era más largo y chocaba con algo adentro de mi, entonces levante lo mas que pude la colita para que disfrutara muy bien de mi y yo de su pene que aunque me dolía por lo grande que lo sentía lo estaba disfrutando mucho pues entre mi flujo y los chisguetitos que le salían a mi perrito yo estaba súper mojada.
Dolía pero era un dolorcito rico entonces se bajo nuevamente de mi y volví a mirar su pene y valla sorpresa en verdad era grande mucho más que la de mi novio (el ya me había cogido un par de veces) y también me parecía más grande que la del perro q había visto y eso me alegro pues aguante mas q la perrita que vi por la tarde pues recuerdo que le veía los ojitos y los apretaba como si le doliese lo que el perro le metía pero ahora yo tenía algo más grande dentro de mí.
Yo era la perrita de mi perro en ese momento y tenía que seguir complaciéndolo, me monto nuevamente y al cabo de un ratito sentí que me hacía mucha presión en mi vulva y mi vientre, ya no me cabía mas pene, me la sacaba poquitito y me empujaba con mas fuerza encajándome su pene bien adentro y eso me lastimaba pues la tenia muy dura y sentía que ya no tenia espacio para mas pene y el quería metérmelo completito entonces creí comprenderlo, pensé que aun quedaba algo de pene fuera y el quería metérmelo todo hasta adentro para así ser yo completamente su perra, bueno eso pensé en ese momento, en verdad me sentía su perra que debía dejarse coger.
Entonces le ayude, recargue mi pecho en la cama y pase mis brazos a lado de mis caderas y con ambas manos separe lo mas que pude mis nalgas para que se abriera mas mi vagina y así recibir todo el pene de mi macho pero al hacer eso supe que fue un error pues sentí que me introdujo algo mas ancho que su pene, dolió mucho pero fue cuando se quedo recostado en mi espalda, ya no hacia movimientos rápidos solo empujaba su pene sin moverse, ya era muy doloroso pues tenia mi matriz llena de pene y muy estirada, le grite que ya no se moviera, claro no me contesto, solo jadeaba entonces dejo de empujar, creí que se bajaría de mi pues ya no se movía pero no se bajo, se me hizo extraño entonces comencé a sentir fuertes chisguetes calientes que le salían del pene imagine que se estaba orinando dentro de mi por lo caliente y la fuerza de los chisguetes pero entonces comprendí lo que realmente estaba pasando no era meterme mas su pene pues ya lo había tenido todo dentro de mi hacia tiempo si no mas bien quería abotonarme, meterme su bola y hacerme completamente suya, hacerme su perra y preñarme.
Me relaje y no pensando en el dolor espere a que mi macho me descargara todo su semen dentro de mi pues mi perro quería preñarme, yo sabia que estábamos pegados, abotonados como los perros con sus perritas y yo era la perrita, sentía como me arrojaba fuertes chisguetes por tiempos, fueron varias descargas que me hacía sentir que mi vientre se me inflamaba que me llenaba con tanto semen que me dejo después de varios minutos.
Solo estaba ahí mi perro recostado encima mío eyaculando felizmente dentro de mi vagina, en el utero de su perrita, se me hizo muy largo el tiempo ya me había cansado pero en ningún momento trate de bajarlo o sacarlo de mi pues aunque ya no se movía seguía sintiendo rico, aproveche y estimule con mis deditos mi clítoris que estaba muy mojado y sin mucho esfuerzo alcance un riquísimo orgasmo que hasta fue un poco doloroso pues mi vulva se contraía y con aquello tan grande encajado en mi me lastimaba, al cabo de unos minutos después de recuperarme de ese orgasmo nuevamente sin problemas conseguí otro mas apretando mi clítoris pues la presión que tenia dentro con semejante pene era delicioso y facilitaban mis orgasmos que eran algo dolorosos pero muy ricos. Hasta que dejo de arrojarme chisguetes y comenzó a inquietarse y el solito se bajo de mi y por cerca de un momento me imagino quedamos pegados trasero con trasero, jalo un poco y saco todo su pene que tenia dentro de mi, se despego y tras de el salio mucho liquido de mi vagina, liquido como agua y partes muy espesas; mire su tremendo pene y me sorprendió pues en verdad era bastante grande sin contar su bola en la base no se como fue que me entro todo eso y tenerlo dentro tanto tiempo.
Después de eso regrese a la realidad y me sentí muy sucia, muy mal me subí a la cama, me acosté y eche a llorar pero sentía como me seguía saliendo fluido de la vagina y aun tenia abultado el vientre, pienso que tenia mucho semen de mi perro dentro de mi entonces fui al baño a orinar y así me bajara todo ese liquido, me ardía mi vagina me dolía mi vientre, al a orinar eche mucho flujo blanco y amarillo, yo sabia que aun tenia mas dentro de mi matriz pero por alguna razón no me bajaba bien si no de a poco a poco pues cada vez que orinaba me bajaba mas flujo.
Tiempo después vi a mi perro abotonado a una perrita y bien sabia lo que se sentía y realmente les confieso que jamás lo volvería o lo vuelvo a hacer.
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