Lobo – Primera parte
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Zoey.
Hola chicas y chicos, muy buenas a todos.
En esta hermosa tarde lluviosa y con mucho calor, algo aburrida decidí contarles como fue la primera vez con un perro ajeno. Como algunos ya saben yo solo mantengo relaciones sexuales con mi Cocker de 10 años. Desde pequeña tengo una amiga que vive a varios kilómetros de casa pero una o dos veces por año se ir a su casa por su cumpleaños o simplemente visitarla.
Ella desde que la conozco siempre tuvo perros grandes, machos. Desconozco si ella practica algo de esto o si le interesa el tema, a pesar de ser muy amigas desde siempre, nunca le he mencionado el tema.
Cuando la conocí ella ya tenía un Ovejero Alemán, era viejito y yo no conocía sobre la zoo. AL poco tiempo llego la única perra que ella ha tenido y ambos compartían su patio. Paso el tiempo y el viejo Ovejero llama Duke murió y extrañamente la perra que lo acompañaba se fue a pesar de ya haber estado en esa casa por 3 años. Al poco tiempo llego un Pastor Belga hermoso, llego ya de grande, y cuando se me presento la oportunidad no pude resistirme. No sé si recuerdan pero este es el que hago mención en mi primer relato donde menciono a grandes rasgos todo lo que he hecho con perros. Fue el segundo perro que tuvo esta otra amiga mía a la que voy a su casa una o dos veces por año. No es la misma que vive en la casa vecina y jugábamos inocentemente con su perrito.
Todo eso fue el Diciembre 2010, una tarde, aprovechando que estábamos solas en su casa y que ella se fue a bañar yo me quede viendo TV en la cocina y mi cabecita empezó a trabajar a full. Me salí al patio y llame al perro el cual respondía al nombre de Lobo. Lo hice seguirme hasta un costado de la casa donde amontonan leña y trastos viejos. El patio es hermoso, con un césped de cancha de golf todo rodeado de setos o dibustrines como les llamamos acá que delimitan el patio. Mi corazón empezaba a latir muy fuerte y si quería disfrutar de Lobo tenía que ir a ese rincón en el patio donde podía escuchar si ella salía del baño o llegaba alguien.
Una vez en el rincón me agache y empecé a acariciarle su cabeza, sus orejas tan suaves que me daban ganas de besarlas. De hecho lo hice en reiteradas ocasiones y con mis caricias empecé a bajar por su cuello donde su pelaje negro comenzaba a hacerse más largo y espeso, pobre por el calor, pero sé que mi amiga lo mojaba con la manguera muchas veces para refrescarlo. Como Lobo aceptaba mis caricias fui avanzando más y más por su lomo hasta bajar a su vientre. Recuerdo que no sabía que sonido era más fuerte, si sus jadeos por el calor o los latidos de mi corazón por mis nervios mesclados con excitación. Lleve mi mano hasta su pene, se encontraba en un estado de total flaccidez y mi primer impresión fue que era más “flaco” que el de mi Cocker o mas huesudo. Extraño ya que el Pastor Belga es más grande, bastante. Empecé a acariciarlo lentamente para ver cómo reaccionaba mi compañero, era una hembra que avanzaba en territorio desconocido. Acaricie sus testículos, estos si de tamaño superior a los de mi Cocker. Tenía todos mis sentidos alerta por cualquier cosa, mientras comencé a masturbarlo un poco más fuerte sobre su funda. Para mi suerte sentí que su pene comenzó a palpitar.
Cuando su pene empezó a palpitar yo seguí masturbándolo e inmediatamente el desfundo su miembro húmedo y comenzó a hacer un rápido y fuerte movimiento de caderas. Yo me puse a mil mientras sentía como su pene crecía en mi mano, especialmente su bola y como iba eyaculando bastante sobre el piso de tierra de ese rincón del patio. Arremetía con muchísima fuerza mientras mantenía su espalda bien arqueada.
Sus movimientos fuertes y cortos de caderas deben haber durado aproximadamente unos 15 segundos hasta quedarse quieto con su pene como una piedra literalmente y eyaculando chorritos de semen liquido como el de todos los canes. Era un pene diferente. Un pene más largo que el de mi Cocker pero con un nudo un poco más pequeño. En síntesis, una cosa deliciosa. Estuve un ratito mas sujetando su pene hasta que llegue a su segunda fase de eyaculación y finalmente lo solté. El se lamio un poco y quise hacer lo mismo con mi mano pero al ver que esta tenia numerosos pelos, simplemente desistí de lamerme aunque notando que no olía a nada.
Entre a la casa nuevamente, me lave mis manos y me puse a ver TV como si nada aunque tenia leves temblores en mi cuerpo y mi corazón seguía acelerado. Mi amiga aun se bañaba y yo estaba a mil. Al rato ella salió del baño y se fue a cambiar. No pude resistirme y Sali nuevamente. Me éxito tanto el hecho de que cuando fui a masturbarlo de nuevo el volvió a hacer sus movimientos de cadera y quedo con su pene como una piedra de nuevo! Nunca en mi vida he podido hacer un doblete con mi perro y este Pastor Belga no se canso! Si hizo sus movimientos de cadera con menos intensidad, pero al fin y al cabo fue un doblete. Yo estaba vestida como siempre, una camiseta sin mangas y una falda.
Cuando estoy con mi amiga y estamos solas, tenemos la costumbre de andar cómodas de ropa, es decir las dos no usamos ropa interior. Así que mientras sujetaba el pene de Lobo con mi mano izquierda, metí mi mano húmeda y con algunos pelos de lobo a mi entrepierna. Ya lo he mencionado en un foro pero lo hago de nuevo; Yo a los 17 empecé a depilarme porque me canso el bello, no me gusta y se me hace anti-higienico. Usaba cera tibia y estaba acostumbrada. No dolía casi nada y recién a las 2 semanas empezaban a salir de nuevo. Hace ya un par de años me anime y una amiga esteticista me la hizo con laser con un resultado excelente. No tengo bellos en mi vagina y el resto de “las zonas comprometidas nuestra” y no necesito “mantenimiento” en nada de eso. Es mas higiénico, cómodo y me gusta mi vagina…
Bueno la cuestión es que empecé a masturbarme. Baje mi mano derecha, con mi dedo medio empecé a frotar lentamente entre mis labios vaginales mientras con mi dedo índice y el anular frotaba mis labios. Mas precisamente con el índice mi labio izquierdo y el anular el derecho. Movía mis dedos de arriba hacia abajo cada vez mas fuerte hasta que me vine. Inmediatamente me metí dos dedos, apenas nomas y seguí masturbándome así para finalizar en un acto un poco “guarro” de orinarme mientras me masturbe. Finalmente termine y me fui a bañar, me masturbe obviamente mientras me bañaba también jajaja y ya después Salí con mi amiga a pasear bien feliz.
Lamentablemente mientras estuve de estadía en la casa de mi amiga esos días no tuve otra oportunidad clandestina para hacer algo de nuevo con Lobo… pero en una próxima visita a su casa hice algo que jamás olvidare. Los espero en la segunda parte del relato, les aseguro que les va a encantar.
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