maritza masturba a max

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por richator.
Esto ocurrio cuando yo tenia unos 16 años, cuando pasaba vacaciones en casa de unos tios; yo ocupaba una

habitacion de madera en el patio, esa mañana desde temprano me puse a limpiar un cajon de madera

grande que pensaba usar para guardar mis cosas; cuando me puse de rodillas para revisar el fondo vi por

unas rendijas en los tablones a Max un perro pastor aleman que era la mascota de casa, estaba echado en

el salon bastante cerca de donde yo estaba tanto que podia oirlo respirar; desde donde yo estaba solo

podia verle la cabeza estaba echado panza arriba debajo de una mesa de plastico pequeña con la lengua

fuera y muy quieto, lo escuchaba respirar agitado como si acabara de echarse una carrera, no le preste

mucha atencion y segui con mis cosas; pero de pronto escuche la respiracion de una persona como un

bostezo y el sonido de una silla, me llamo la atencion porque pensaba que estaba solo en casa, desde

donde estaba no podia ver quien era pero me parecio que era mi prima Maritza. Yo no la conocia mucho,

me puse en pie y fui hasta el fondo de la habitacion y mire por una rendija, solo podia ver a mi prima

sentada en la mesa escribiendo, se notaba un pequeño movimiento como cuando tienes las piernas cruzadas

y meneas un pie, mi prima Maritza es rubia, alta y bastante atractiva, pero tiene un caracter bastante

antipatico; en ese momento no tenia ningun interes para mi asi que me di la vuelta y continue con lo mio,

asi paso un rato hasta que me subi al camarote para llegar a unas cajas que habia encima de un armario,

las estaba bajando cuando mire por el espacio que hay entre las vigas y el techo; en el primer vistazo me

extraño lo que vi, algo de color colorado en la barriga de Max, me subi un poco mas y me asome para ver

mejor, y esta vez lo vi mejor: mi prima sentada en la mesa con su vestido minifaldero de andar por casa

tranquilamente escribiendo, y ademas, sin sus chanclas amarillas y con suspies desnudos estaba

masturbando a Max. Casi me caigo de espaldas, tarde todavia un rato en comprender lo que estaba

pasando, pero mi polla estaba ya a punto de estallar, Maritza frotaba el pene gordo y rojo de Max con

sus pies contra su barriga y luego lo ponia entre los suyos aunque asi se le salia y no era muy comodo para

ella; lo que estaba viendo era lo mas morboso que habia visto nunca a mis 22 años, Maritza con rostro

serio y sin cambiar para nada su gesto frotaba con sus pies, y metia el pene de Max entre sus dedos, el

pobre Max se retorcia miraba al vacio jadeaba con la lengua afuera y se dejaba hacer por la antipatica

masturbadora de mi prima; de pronto empujo la silla hacia atras, yo me asuste y me agache pensando que

me habia visto, pero inmediatamente me asome otra ves, para ver esta ves a Maritza en una posicion mas

comoda con la polla de Max entre sus pies apretando con firmeza pero mas despacio y cada vez mas

lentamente hasta que el perro estallo en una corrida bestial, pude ver el semen de max que saltaba hasta

un metro de altura, salpicando al perro la mesa y el suelo, pero sobre todo los pies de Maritza, en este

momento senti que eyaculaba como un litro de semen, y sin tocarmela para nada, ella siguio frotando y

disfrutando del semen de Max extendiendolo por sus pies hasta que este se puso en pie se lamio su propia

polla y despues los pies de Maritza, ella seria y sin cambiar el gesto le ofrecia los pies y las piernas para

que el perro siguiera lamiendo, al final solo le oi decir "puto perro, que bien que te lo has pasado" .

Despues de eso decidi vigilar mas a mi prima Maritza: