Mi primer experiencia con jack
Me llamo Paula cuando tenía unos 15 años o tal vez un poco menos, vivía con mis padres, mi hermana y un hermano en una casona antigua, de techos altos con un patio interminable, y con toda la revolución hormonal del inicio de mi pubertad estaba todo el día mojada, fantaseando con hombres, mujeres, p.
Por esa época estaba mucho sola en casa ya que mis padres trabajaban desde temprano y hasta la nochecita y mis hermanos iban a la facu desde el mediodía hasta la noche. Una mediodía recién levantada, paseaba por la casa con una remera sola sin tanga ni corpiño tal como duermo, para ir a la cocina a desayunar y me cruce primero con mi hermano juan de 23 años, que a la pasada yendo a la salida me dio una sonora nalgada, no era algo raro en él, cada vez que podía no se perdía la oportunidad de nalguear mi voluptuoso culo! En la cocina estaba mi hermana, Lili con sus 27 solterones años terminando una ensalada para irse también a la facu. Ella no es tan osada como Juan, pero me come con los ojos mis 110 de pecho que sin sostén alguno dejaban casi a la vista los pezones como un dedo gordo que la genética me brindo!! Se ponía nerviosa cuando me veía semidesnuda y yo a propósito me le acerco para darle los buenos días afirmándole bien mis tetas en las suyas, que son un poco más chicas que las mías, y pegando el beso de costado casi en sus labios! Lili no podía evitar soltar un suspiro ahogado lo que me divertía y me calentaba mucho pero termino su comida y con un chau desde lejos salió hacía la facu!
Ahí estaba sola aburrida y re caliente distraída tomando un café parada contra el desayunador cuando sentí una lengua áspera y fría que se incrusto en mi cola! Me asiste un poco me di vuelta y era Jack, nuestro bóxer blanco, un perro muy grande que asusta pero es muy cariñoso. Primero lo rete y él se sentó a mi lado sin sacarme los ojos de encima, observe que tenía la punta de su verga afuera de su funda y jadeaba como pidiendo algo. Empecé a pensar que se sentiría tener sexo con Jack? Ya sin inhibiciones me fui al sillón del living y me senté con las piernas bien abiertas. Jack me siguió no se perdía ningún movimiento y en cuanto abrí las piernas se acercó como jugando, moviendo la cola y me planto un lengüetazo fuerte en mi concha!!!!
Ni tiempo de pensar en nada ya que seguido a ese llego un torrente de lengua que me desarmaba, no podía creer que pudiera chuparme así la concha en un par de minutos me hizo llegar a un terrible orgasmo que me dejo relajada tirada lo largo del sillón.
Jack seguía moviendo su cola y me hociqueaba las piernas intentando llegar a mi lampiña conchita! No sé porque pero decidí que me dejaría coger por él! Soy virgen soy muy pequeña para tener relaciones o eso creía. Como toda pibita calienta braguetas sabía mucho de sexo de escuchar a mis hermanos y devorar porno por el celu, así que sin más me dispuse a ponerme en cuatro patas tal como había visto en una página de zoo con las tetas apoyadas en el asiento del sillón y mi culito bien parado!! No sé si fue por instinto o calentura ero Jack me monto en el acto, sin dudarlo como sabiendo lo que yo quería, eso me llamo la atención pero yo estaba más caliente que él y ya estaba decidida a que el perro me coja. Fueron varios los intentos de montarme, se bajaba y volvía a intentarlo hasta que le levante más el culo y por fin sentí la punta de su pene en mi concha. La metió de un solo envión casi me muero el dolor fue impresionante, como una navaja!! Intente pararme pero era imposible me tenía agarrada por las caderas rasguñando, e y el pecho apoyado en mi espalda, era su hembra!!
Me estuvo bombeando un rato cada vez más hondo me dolía mucho mi conchita, solo habían andado algunos dedos por ese lugar, hasta que empecé a sentir una presión terrible se le iba hinchando la verga dentro de mi concha era una mezcla de placer y dolor, y empezó a regarme el útero con su leche!! Eran litros o eso me pareció sentía el líquido caliente como se adentraba en mi cuerpo su verga latía haciendo que me venga un orgasmo que no pude disfrutar por el dolor y miedo que tenía.
Se quedó quieto y quería girarse me había abotonado el muy desgraciado!! Le agarre las patas delanteras para que no se mueva porque con cada movimiento parecía que me iba a desprender la concha de mi cuerpo. Eso me puso a mil y tocándome por abajo de mi cuerpo tuve el mejor orgasmo que hasta ese momento había tenido. Estuvimos así como 15 minutos, sentí que se deshinchaba y lo solté! Grave error su bola era el doble de una verga humana, cuando tiro hacia atrás me desmaye del dolor.
No se después de cuánto tiempo me despertó dándome lengua en la cara y las tetas me dolía mucho mi conchita, como pude lo saque al patio y me di una ducha y me metí en la cama necesitaba recuperarme de semejante sesión de sexo.
Hoy a casi 30 años de esa tarde la recuerdo como si fuera hoy!
Que buena historia
Gran historia, me agrada demasiado.