Mi primera experiencia zoo

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Vampira7718.
Esto que contare enseguida, paso hace un momento, por motivos de seguridad no diré mi nombre real, así que me llamare Hazel, y el nombre del macho es Max.

Comenzare por decir que mi interés por la zoofilia se dio cuando empece en el sitio, leyendo los relatos, quería saber como era que un macho te montara y que se sentía el abotonamiento (cabe decir que me ponían y ponen muy calientes todos los relatos), así que poco a poco fui investigando todo acerca de este tema.

No había tenido la oportunidad de probar este tipo de sexo, pero hoy se presento y no la desaprovecharía, aunque me tomo algo de tiempo en decidirme bajar al patio de la casa y probarlo, aclaro que no había tenido la oportunidad porque yo en mi casa tengo una perrita y no un macho como el que quería, pero en casa de unos parientes hay uno muy bueno, es un viejo pastor ingles, me parece que para ser mi primera experiencia es muy grande.

Bueno, en época en la que tengo que ir a la escuela me quedo con mis parientes ya que es más fácil trasladarme hasta la escuela de esta casa que de la mía, como ya comentaba estos parientes tienen a Max (un perrito muy juguetón), Max tiene un año de edad, siempre me he acercado a él y me conoce muy bien, siempre me pregunte que tan grande estaría su pene, hoy comprobé que es grande 😉

Mis parientes hoy tuvieron que salir a hacer un mandado, como yo estaba muy cansada decidí quedarme, todo transcurria como un día normal, yo estaba en la computadora observando unos vídeos pornos de zoo que me calentaron mucho, quería saber como era sentir un macho montándome, veía como un gran macho montaba a una mujer y esta gemía frenéticamente, después de un rato se quedaron pegados y pensé que sería delicioso sentir eso.

Con ese pensamiento fue que decidí salir al patio con Max y probar, como ya dije Max es un perro muy juguetón así que en cuanto me vio corrió hacia mi, por instinto lo aparte un poco, ya que podía llegar a tirarme, comencé a hablarle como normalmente lo hago.

—Hola Max, ¿cómo estas? ¿quieres jugar?—a lo que el perro contestaba moviendo su cola.—hoy jugaremos algo diferente, pequeño—le dije al perro como si él me entendiera.

Empece a acariciar la gran cabeza de Max, él lamia mis manos, cuando pasaba su lengua solo pensaba en que quería que esa gran lengua no pasara por mis manos si no por mi vagina que ya estaba hecha agua, podía sentir esa humedad entre mis piernas, poco a poco mi mano fue pasando hacia su lomo y poco a poco a su barriga, mi mano se acerco a su pene y comencé a estimularlo (no tengo mucha experiencia así que fue difícil).

Después de un rato que estuvimos así vi como Max se excitaba y salia de aquella cubierta peluda su rojo pene, pronto acerco su nariz a mi vagina (aun tenía puesto mi pantalón), pero al parecer el percibió lo excitada que estaba y trato de montar mi pierna, lo aparte y me quite el pantalón y mis bragas y las arroje a algún lado, el olfateo mi vagina y en ese momento mis piernas comenzaron a temblar, en realidad iba a pasar, iba a dejar que Max lamiera mi vagina y se se daba lo dejaría que me montara.

Max dio unas cuantas lamidas con lo cual casi desfallezco, su lengua era grande y muy húmeda, me encantaba, quería que siguiera, el se alejo un poco, así que opte por imitar un poco los vídeos de zoofilia de la red y comencé a palmear mi vagina para así atraer a Max, funciono y él siguió lamiendo, me llevo a un pequeño orgasmo que disfrute muchísimo.

Después de ese orgasmo me coloque en 4, necesitaba ese pene rojo y grande dentro de mi, así que me coloque, Max se trepo en mi espalda, estaba a punto de meter su delicioso pene en mi vagina, para así unirnos, cuando veo que mis parientes se acercan a la casa, ¡¡¡tuve que interrumpir todo!!!! me levante rapidísimo y me coloque mi ropa como pude, como era de esperarse Max salio corriendo hacia la calle y eso me dio más tiempo para recomponerme, cuando entre a la casa mis parientes solo me vieron y preguntaron "¿qué hacías afuera con Max?" solo atiene a decir que estabamos jugando y subí a mi habitación.

Así termina mi relato, un poco de frustración por no tener a Max dentro de mi, pero satisfecha por el orgasmo que me regalo con su lengua, espero que otro día me quede solo y de inmediato iré por él