MIS DOS AMANTES
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Rubisex69.
Bueno como les conté en el relato anterior después de tener una tras otra cogida con mi perro pastor alemán y por todos lados, pues eso se fue convirtiendo cada vez en una necesidad diaria, casi como un vicio, pero este vicio era de sexo perruno, pero un vicio muy rico y placentero, pues les digo eso de coger del diario a veces dos, tres o cuando se podía mucho mas cogidas en un día, pues cada vez era más lo que mi conchita y mi culito pedían, siempre buscaba hacer cosas nuevas con mi querido amante canino, lo hacíamos de distintas posiciones, de a caballito, la del misionero, de ladito y la más común y en la que me sentía como toda una perra, la de perrito o perrita jajajajajaja, pero era toda una perra de mi muy querido perro, imagínense que cuando lo sacaba para ir a correr por las mañanas y lo llevaba con su correa, era muy divertido, porque me cuidaba como si fuera su perra privada, no dejaba que se me acercaran y yo pues, me esponjaba como pavorreal de lo orgullosa que estaba de mi mascota, por lo bien cuidado, alimentado y fornido que era mi perrito, sobre todo lo educado para eso del sexo.
Les cuento que cuando era temporada en que las perras andaban en celo y los ´perros seguían en jauría a esas perras para querérselas coger, me excitaba mucho ver como se disputaban a las perritas y de cómo el premio para el que ganara era cogerse a la perra en celo, pero más me calentaba cuando veía que a veces se la cogían uno tras otro perro, eso me ponía bien cachonda y me decía algún día tendré ese placer de ser cogida por varios perros o por lo menos por dos y que se disputen mi culo, y el ganador me coja como quiera jajajajajajaja, que loca idea verdad, bueno un día que salimos a correr mi perrito andaba muy inquieto porque le llegaba creo el aroma de las perras en celo y se jaloneaba cuando veía a los perros tras la puta perra, pero no lo dejaba por miedo a que lo fueran a agredir todos los perros y lo fueran a lastimar, tanto era su inquietud de mi perrito que un día al ir corriendo por un fraccionamiento bueno para hacer ejercicios porque no estaba tan habitado porque tenía pocas casa y tenía varios matorrales algo grandes y además de por ese fraccionamiento no circulaban muchos coches, era ideal para correr sin ninguna molestia, pues ese día estaba insoportable mi amante que voltee para todos lados y me di cuenta que no había gente el rededor, jale a mi can a un matorral y ya ahí me baje de inmediato mi licra pero déjenme decirles que cuando corro no me pongo nada por debajo de mi licra, me gusta que me vean como se me marca bien mi conchita y mi culito, pues mi perrito al ver que me quitaba mi ropa y me daba la nalgada indicándole que iba a hacer cogida segura ni tardo ni perezoso me montaba de inmediato y yo como toda un perra y muy complaciente con mi amante dejaba que me metiera toda su verga hasta sentir que llenaba toda mi concha o todo mi culo y lo que más me gustaba era sentirme abotonada por él, pero en esa ocasión no dejaba que me metiera su rica bola, para no quedar abotonada y ser sorprendida por alguien, el chiste solo era que mi perrito se desahogara en su perra y se le quitaran las ganas.
Después de hacer ejercicio y coger regresábamos a la casa, mi perro ya más calmado entraba y se dirigía al patio donde tenía su casita y se acostaba a descansar, ah pero ya acostadito me agachaba y le decía, oye tú crees que vas a descansar después de lo caliente que estabas, pues no chiquito ahora me cumples porque yo todavía estoy caliente y ahora me coges o me dejas como estaba, y de inmediato le empezaba hacer una paja a su verga hasta que lo sacaba todo de su funda, ya afuera me lo metía a mi boca y le daba tremenda chupada hasta que lo hacía venir en mi boca mmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmm delicioso, ya con la verga de mi perro bien parada y gorda, rápidamente me quitaba mi licra y me le montaba huyyyyyyyyyyyyyyyy, que rico pito le decía, me lo metía y sacaba al ritmo que yo quería, unas veces rápido y otras despacio para que mi concha o mi culo lo disfrutaran al máximo, que placer me daba, luego de eso y después de unos cuantos orgasmos me levantaba y le daba mi concha y mi culo para que los lamiera y los limpiara de la rica lechita que me echaba, después me levantaba y le ofrecía agüita para calmar su sed y le daba alimento para que se recuperara, ya bebido y comido se ponía otra vez caliente de verme encuerada e inmediatamente me rondaba dándome a entender que quería coger de nuevo y yo como toda hembra complaciente me ponía de cuatro patas y dejaba que se cogiera a su perra que soy yo, ahí si dejaba que me abotonara ya que estábamos en mi casa y no había problema que me vieran después de la rica cogida y abotonada me lamia nuevamente mi concha y culo, y yo como soy bien agradecida le limpiaba con chupadas su sabrosa vergota, mmmmmmmmm, luego aprovechaba para darme una ducha, desayunar y prepararme para el trabajo.
Un día que fue día inhábil en el trabajo y me quede en casa, me levante ya tarde por ver varios videos de zoo hasta deshoras de la madrugada, me desperté como eso de las 12:00 pm y todo por unos ladridos que escuche en la calle, me asome por la ventana y vi un lindo pastor alemán amarillo con negro de esos que les dicen perros policía, me dije de quien será ese perrito, me levante me vestí y Salí a la calle a investigar de quien era, haciéndome la tonta le pregunte a una vecina oiga de quién es ese perro tan bravo que da miedo, y me dijo ya hace varios días que llego a la unidad, no se si alguien lo trajo o llego solo, pero anda en todos lados, le respondí que no creía que tuviera dueño porque estaba todo flaco y sucio, pues quien sabe vecina pero ya tiene muchos días por aquí y ni quien responda por el me dijo, pobrecito dije, pues ojala y encuentre dueño rápido si no se va a morir de hambre, buenos vecinita nos vemos bye, me despedí de ella y entre a mi casa, ya adentro pensaba pobre perrito lo voy a llamar y le daré de comer y un poco de agua, Salí con un traste con alimento del que le doy a mi mascota y un tazón con agua, lo busque y no lo vi, luego fui a buscarlo y lo encontré más adelante buscando comida, como lleve un poco de alimento en la mano, le fui tirando al piso para que este los comiera y me fuera siguiendo hasta mi casa y vaya que resulto discretamente le iba aventando alimento y él me seguía comiendo lo que yo le echaba, por fin llegue a mi casa y le puse el alimento en el traste y le acerque el tazón de agua, comió como desesperado el pobre, vaya que si llevaba días sin comer y trago agua también como loco, y me dije entre si, ya estuvo ya me lo gane, solo dejare que pasen algunos días para que me agarre bien confianza y lo pueda meter a mi casa, así transcurrió el tiempo y yo cada vez que le daba de comer al perrito poco a poco lo iba acariciando hasta que llego el dia en que cuando me veía me hacia circo, maroma y teatro, saltaba de alegría y labraba el solo verme y eso me calentaba mucho de pensar si podría hacer que me cogiera, bueno uno de tantos días transcurridos y sobre todo en las noches cuando todos ya estaban en sus casa y me percataba de que no hubiera gente a esa horas salía con el pretexto de darle alimento y como siempre estaba echado en mi puerta pues ahí aprovechaba para acariciarlo y pasar mi mano por su funda y poco a poco le iba haciendo una paja y bien que se dejaba, pues así pasaron días en hacerle casi del diario pajas a su pene hasta que lo lograba excitar y hacer los movimientos coitales , una ocasión que no hubo trabajo por dos semanas debido a un puente vacacional y con la mayoría de vecinos fuera, ya que casi la mayor parte de vecinos salen de vacaciones, era el momento justo y apropiado para hacer mi fantasía realidad, el ser cogida por dos perros al mismo tiempo, mi perro y el callejero que también era pastor alemán, y llego el día en que lo metí a mi casa, ya adentro me encuere lo más rápido que pude, yo ya estaba bien mojada de mi concha con el solo hecho de pensar en que me cogerían dos perros, estaba a mil por hora, cuando metí a mi mascota para iniciar la orgia perruna, no tome en cuenta que se iban a pelear, y así fue, mas porque mi perro se puso celoso de verme encuerada y de a cuatro coqueteando con el otro perro, ofreciéndole mi culito, luego luego se le fue encima al perrito callejero reclamando a su perra y marcando su territorio, al ver como se peleaban por mí, me excito mucho pero también me dio miedo que pudieran morderme de lo bravo que estaban
Entonces me fui abrir la puerta del patio y me salí a gatas para ver si me seguían y vaya que lo conseguí, y por aquí salió el primero cerré la puerta inmediatamente obvio que mi perro fue el primero, ya estando afuera le puse su correa y lo amarre de un tubo, después entre y también le puse otra correa al otro perro y lo saque también al patio amarrándolo de una protección que tiene mi ventana, y ya con los dos perros amarrados les dije, tranquilos mis amores que ahora van a tener a su perra que les quitara lo caliente que están, acto seguido me fui con el perrito callejero para saber que tal cogía y me le acerque en cuatro patas y le ofrecí mi culo y concha, tal y como lo hace una perra en celo, al principio como que no mostraba tanto interés, pero cuando le hice con mi mano una paja a su pene, este que empieza hacer los clásicos movimientos coitales y a querer coger, le puse el culo y el muy caliente me monto rápido, al inicio no atinaba a penetrarme, pero como toda una experta le agarre con mi mano su verga y la puse en la entrada de mi conchita y aaaaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh que pitote se cargaba el perrito callejero que me hizo gemir del placer que me estaba proporcionando, después de un rato nos abotonamos, pero como me los metió por mi panocha no tardo mucho y rápido se salió de mi, se lamio su pitote, lo enfundo y otra vez que se me echa encima, pero esta vez le dije ahora me vas a coger por el culo para dilatar más tiempo abotonada, ya encima de mí, agarre su pene y lo dirigí a mi culito que ya lo esperaba con ansias locas y sas me lo dejo ir de un solo empujón, mmmmmmmmm papacito cógeme más fuerte papito métemelo hasta el fondo de mi oooooooooohhhhhhhhh mas mas mas cariño soy tu perra mi amor cógeme más por favor, méteme tu bola abotóname por favor y lléname el culo de toda tu leche, y así fue me empujo su bola y me la clavo hasta adentro toda su vergota, guauuuuuu dije que placer me haces sentir amor, soy toda tuya, mientras que mi querida mascota se jaloneaba de lo desesperado que estaba por querer coger también a su perra, y eso me excitaba cada vez más, tranquilo le dije a mi amante ahorita es tu turno, espero lo aproveches al máximo y medes una súper cogida, mientras permanecíamos abotonados me corría como loca y mis fluidos vaginales y la leche de mi amante se mezclaban y escurrían por mis piernas, dilatamos más tiempo, cruzo una pata por encima de mi culo y quedamos cola con culo, pero el muy salvaje se tironeaba y eso me dolía un poco, pero a la vez me causaba placer, cuando de repente da un jalon y que me lo saca de un chingadazo que me hizo dar un grito de dolor y plop salió hasta me saco excremento el muy salvaje y me cage ahí mismo, pero el perrito me limpio mi culito de lo sucio que estaba, el otro ladre y ladre como diciendo, me toca a mi, ya dame, te quiero coger ya, jajajajajajaja, era excitante imaginar que reclamaba a su hembra o perra como quieran llamarle, siguiente paso me fui hasta donde estaba mi otro amante y le puse mi culo cerca de su trompa y rápido me empezó a lamer el culo que aun escurría de leche, mmmmmmmmmmmmm asi amor mio asi mmmmmmmmmmmmmmmmm de inmediato me monto y me incline bien ofreciéndole a todo lo que daba mi colita y concha, pero como este ya tenia mas experiencia para coger no necesito que lo guiara porque de inmediato me lo clavo por el vizcocho ooooooooooooohhhhhhhhhhhhh que rico asi sigue amor mmmmmmmmmm aaaaaaahhhhhhhh, perfórame con tu pitote mi vida, mas fuerte, y asi fue hasta que se quedo quieto encima de mi y cruzo su pata y quedamos pegados, pero dilatamos un poco mas que con el otro perro, luego plop que nos despegamos, se lamio su pito y luego se me acerco a lamerme la panocha, ya enfundado de su pene, le dije, si el otro me cogió por el culo, tu porque no mi amor si eres mi macho y yo tu perra de planta, acto seguido me di una nalgada y este de un brinco me monto otra vez, me le acomode de manera que mi culo quedara a la altura de su pito y me penetrara sin necesidad de agarrar su pito, y vaya que era todo un experto para penetrar que de inmediato atino a clavármelo en el chiquito, y me arranco un gemido y mas orgasmos.
Y asi tras ratos de descanso cuando se reponían me querían seguir cogiendo y yo muy complaciente me dejaba coger por ambos, no medí el tiempo que trascurrió, pero cuando me di cuenta ya había oscurecido, imagínense las horas que estuve cogiendo que hasta me temblaban las piernas y me sentía desguanzada, entre al baño y me di una buena ducha lavando bien mi conchita y mi culito, Salí me seque subí a mi recamara y caí bien rendida, pero muy satisfecha con mis dos amantes caninos.
Pues esa fue una más de mis anécdotas, espero les haya gustado, la próxima vez les contare como mataron a mi perrito callejero y el porque tuve que regalar a mi perro consentido, y el cómo me atreví a meterme en la jauría de perros y coger con varios de esa jauría que andan detrás de una perra en celo, pero esa es otra historia, chao, hasta la próxima.
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