Neron
lo logro todo… entonces porqué esta vacia?… la respuesta llego por accidente.
Marlene es «normal»… tiene trabajo, auto, un bonito lugar donde dormir… aunque ha sacrificado todo lo demás para tener esas cosas… no tiene muchos amigos, a veces va donde sus familiares, no tiene novio… el único ser que esta con ella es » nerón» un pastor alemán, grande y fornido que va con ella a todas partes… y en realidad… eso es lo único que ella necesita. Lo crio desde pequeño, un amigo se lo regalo, el cachorro se dio con ella, y la convenció con sus movimientos tiernamente torpes de adoptarlo y desde ahí ha sido su compañero… aunque… lo que nadie sospecha es «cuan cercana» es esa relación…
Una noche, estaban jugando en la cama, nerón estaba recostado cerca de sus piernas, Marlene estaba viendo la tele, algo que no hacía a menudo… de a poco la película empezó a tocar temas más… eróticos… Marlene se empezó a excitar… de a poco… sentía como sus pezones lentamente se ponían duros, como su vientre se entibiaba… nerón solo estaba recostado… despacio paso la punta de sus dedos por su pezón, le daba pequeños pellizcos que la excitaban suavemente, el roce un poco áspero de la tela, la calentaba más… su otra mano bajo a su vagina… recorría con los dedos los labios, sentía ese calor entremedio de sus piernas, como de a poco su calzón se mojaba, como su concha palpitaba… Se levantó y fue al baño, a buscar algo con que secarse después… no le importaba que nerón estuviese ahí «es un perro, ¿Que va a saber?» Pensaba… volvió a la habitación… abrió la cama por completo… nerón ni siquiera se movió… se sacó la ropa, se acostó al medio y empezó a tocarse de nuevo… apretaba sus tetas, eso le calentaba mucho, sus dedos comenzaron a buscar su clítoris… lo frotaba más y más rápido… sus dedos entraron en su concha, los metía y sacaba pero faltaba algo… su otra mano… la deslizo por debajo de sus caderas, se tocaba el ano despacio… de a poco metía los dedos… le gustaba masturbarse.. Imaginando que se la culeaban con rabia, con pasión… que todo su cuerpo estaba siendo penetrado… sin darse cuenta, nerón estaba a su lado, sentado, mirándola, ella lo miraba con la cara lánguida de calentura… parecía que estaba olfateando… Marlene no quería parar… el perro empezó a olfatear su vientre… algo buscaba… «sale» le decía Marlene, a través de un gemido ahogado, nerón no obedecía, seguía olfateando… acerco su hocico a su vagina… ella sentía los pelos ásperos de su compañero… no sabía cómo, pero ese rose la hacía hervir… lentamente acerco su nariz húmeda a la mano que la masturbaba, y sin aviso la empezó a lamer… Marlene estaba tan caliente… sus dedos en el culo entraban más adentro… su mano en su choro la pajeaba mas rápido, sentía la lengua grande y cálida de nerón entre sus dedos, lamiéndole sus jugos, el animal no paraba, le gustaban los líquidos de su ama… Marlene se mordió los labios y miro a su guardián… Se puso un poco nerviosa…
No lo podía creer… alejo su mano de su vagina, para que nerón pudiera lamer todo lo que quisiera y no se equivocó… el perro le lamia la concha con fuerza… sentía como esa lengua áspera y grande la frotaba… los pelos del animal rozándole la piel… con sus dedos abrió un poco su vagina, para exponer el clítoris… no se equivocó… el perro la abrazaba el clítoris… Marlene estaba tan caliente… suavemente le tomo la cabeza al animal mientras le chupaba el choro, sentía su pelaje grueso, sus orejas puntiagudas… sus colmillos deslizándose suavemente en su carne húmeda… le daba miedo que la mordiera, pero ese miedo la calentaba más… su dedo en el culo la pajeaba más y más rápido… no quería parar… antes de llegar, se le ocurrió una idea, se sentó, acaricio a su amigo y lo dirigió justo al medio de sus muslos… quería que el perro la lamiera mejor… el animal entendió… Ella solo abrió las piernas y el perro se acomodó para seguir lamiendo… era exquisito, su lengua pasaba por toda su concha… la presionaba… sentía la boca del animal… los colmillos grandes pasando suavemente por su piel rosada… le acariciaba la cabeza, no quería que nerón se alejara de ella, tenía miedo de que el animal pudiera hacerle daño… pero esa ansia, hacía que su choro caliente botara más y más jugo… el perro no paraba de lamerla, pasaba su lengua justo por la entrada de su vagina, sentía como esa carne mojada le frotaba la entrada a sus secretos… la hizo llegar.
Pero no era suficiente, Marlene se acomodó un poco, el animal solo la miraba y esperaba… puso de nuevo sus dedos en su culo, lo abrió con fuerza, sintió un poco de dolor, pero la calentura no la dejaba pensar, sus jugos y la saliva del animar ya lo habían lubricado todo, una vez estuvo cómoda, acerco la cabeza del animal nuevamente a su concha… sin decir nada el perro siguió lamiendo, tratando de entrar al lugar donde salía ese rico olor que sentía… Marlene se pajeaba el culo con fuerza… tenía la boca abierta de tanto gemir, sus dedos entraban más y más adentro, mientras sentía la lengua de nerón lamiéndola sin control… el perro también lamia sus dedos… los mismos dedos que pajeaban su ano… sin pensarlo levanto las caderas… con ambas manos se abrió los muslos, y sus dedos se estiraron para abrirse el culo… el animal solo obedecía… a ella… a su instinto… en esa posición… llegaba al cielo… el perro le trataba de meter la lengua en el culo.. Como desesperado por algo… ella solo se dejaba llevar… ya no llevaba la cuenta de cuantas veces había terminado… solo sabía que su choro caliente chorreaba y chorreaba orgasmos… solo veía la cabeza de ese animal entre sus piernas dándole placer, sus orejas puntiagudas, como un suave demonio comiéndose su vagina y llevándola a nuevos placeres… sus piernas tiritaban cada vez que el perro la hacía llegar…cuando ya no pudo más… se sentó, jadeando… miraba al animal, sentada a su lado, en silencio…
Acariciaba su lomo… no podía creer lo que había pasado… toda la cama estaba mojada… cuando recupero un poco las fuerzas… se levantó para cambiar las sabanas, nerón solo movía la cola… durmió plácidamente, cansada… al lado de su antiguo compañero… que se estaba volviendo algo más…
Al día siguiente le preparo algo rico para comer, hizo partir el auto y partió a su oficina. Los quehaceres del día le hicieron olvidar lo que paso, pero… hubo un momento en la tarde en que estaba desocupada… cerro los ojos… y empezó a recapitular lo que había ocurrido… tan excitante, tan degenerado… tan secreto… su vagina se humedecía sola tan solo por recordar.. Curiosa, busco información en su computador… fue una sorpresa, había mas información de lo que creía y mucha gente a la que le gustaba hacer lo mismo… vio videos, que quizás en otro momento le hubiesen dado asco, pero ahora… solo la calentaban más… quería intentarlo… ¿Porque no?.. Nerón no le iba a contar a nadie… al llegar esa noche a casa, se ducho, le dio de comer a su bestial amante y sin demora, se desnudó de nuevo a su lado… esta vez de pie… le gustaba ser descarada.. Pajearse de pie y piernas abiertas frente a él… el perro empezó a sentir sus olores… nuevamente se acercó a su concha… ella dejo que la lamiera un poco… pero esta vez… lo quería tocar… se puso de rodillas a su lado, le acaricio el lomo, los costados de su cuerpo, las orejas puntiagudas… sentía ese pelaje duro…
Ese cuerpo duro, de bestia inocente… sus manos empezaron a ir a su vientre, nerón solo se dejaba acariciar, el pelaje duro cambio a uno suave, a una piel caliente y blanda… le acaricio un poco el vientre… mientras lo hacía, sus dedos empezaron a rozar los genitales de nerón… los testículos suaves del animal… esa vara roja y puntiaguda envuelta en carne trémula… solo la rozaba… mientras su otra mano le acariciaba la cabeza, acerco su mejilla al lomo, se acomodó en el… sentía su respiración.. Con un poco de temor, acerco sus dedos a la verga… despacio… nerón se estremeció un poco, pero se quedó quieto, con las yemas de sus dedos, la tomo… era grande… aun sin estar dura, recorrió despacio sus contornos… acaricio la punta envuelta en carne del animal… era diferente, una gruesa punta de lanza… no sabía cómo… pero estaba caliente como nunca lo había estado, con su mano entera recorría la verga del animal, le acariciaba las bolas, nerón empezó a jadear.. Sentía el lomo de nerón agitado… sentía como el miembro de esa bestia se hinchaba de sangre, como crecía entremedio se sus manos… lo empezó a pajear despacio, no quería hacerle daño y tampoco quería que su bestia reaccionara mal… mientras lo pajeaba, la punta dura de su verga empezó a descubrirse… su concha estaba húmeda, tanto que le mojaba el culo… seguía masturbándolo… cerca de el… cuando ya estuvo bien grande, Marlene se alejó un poco, fue a buscar aceites para untarse en la concha..
El perro jadeaba y la miraba… tenía la verga afuera, dura, roja, ella abrió la botella de aceite, dejo caer sin cuidado alguno el contenido en sus manos, se empezó a frotar la vagina, por fuera, por dentro, llevo su mano a su culo, también se hecho ahí, metiendo un poco los dedos, para masturbarse un momento… todo esto era nuevo… una sensación de libertad más allá de las convenciones, que nunca había tenido… se arrodillo con el culo dando a nerón… estaba tan caliente, tan ansiosa, tan expectante… llamo al perro.. Lo acomodo a un costado, le tomo una de sus patas para que le atravesara la espalda, nerón hizo el resto… no podía creer la afinidad que tenían… he sentir la piel del perro apoyada en su trasero… los músculos tensos del animal tratando de penetrarla… sentía como se movía en su culo, sin control, tratando de buscar donde entrar, ella se puso como una perra en celo… busco la verga de nerón con su mano, la tomo firme, pero suave, nerón se quedó quieto, de a poco empezó a dirigir esa verga a su concha… se la pasaba por ahí… la punta caliente del animal la tenía loca… con el mismo miembro del perro se abrió la vagina, se la empezó a meter de a poco… Sentía esa aguja caliente entrando, palpitando en su choro húmedo y ansioso… cuando sintió que el perro no se iba a salir de ahí… lo soltó… solo eso era necesario para que la bestia diera un embiste brutal, que le abrió las carnes de sorpresa, Marlene ni siquiera era capaz de gritar.
El animal solo se movía, ella sentía como esa pichula enorme le abría el choro sin compasión… sin parar… más y más fuerte… era dolor, calentura, fuerza, inocencia… todo eso al mismo tiempo… sentía las garras del animal en deslizándose es su costado, tratando de afirmarla… las garras de la bestia le arañaban las tetas, en un movimiento brusco del animal, paso su garra por encima de uno de sus pezones lánguidos y derretidos de excitación… eso la calentó aún más… llegaba y llegaba, sus muslos chorreaban de jugo, junto con las pequeñas gotas de leche caliente que salían de la pichula de nerón… se inclinó un poco más.. No le importaba… ese movimiento era lo que necesitaba… nerón pudo entrar por completo… solo pudo tiritar… de angustia, de pasión… el animal se la culeaba con todas sus fuerzas… no se detenía… solo seguía su instinto… Marlene gemía como una perra sucia, de rodillas en el suelo mientras la bestia la violaba… rasguñaba el piso con sus dedos, desesperada de calentura, su choro húmedo y chorreante era atravesado por una lanza de carne hirviendo… sentía como la punta de la pichula de ese animal se hinchaba.. Más y más… abriéndola hasta experimentar un placer sin nombre… empezó a sentir algo caliente saliendo de esa punta hinchada… el animal le arañaba más y más el cuerpo… sentía el jadeo brutal de su violador en su cuello… sin aviso… sintió un chorro de leche caliente que le inundaba… nerón se movía desesperado.
Ese moco caliente, se le pegaba en sus carnes… la quemaba por dentro, mientras la bestia seguía culeando sin parar… solo estiro el cuello, tiritando… todo su cuerpo tiritando… chillaba desesperada de pasión… nerón solo quería mas… el roce de la pichula de nerón calentaba el semen aún más, mientras la punta de su miembro, estaba hinchada como una bola, escupía lava caliente, desgarrándole el vientre… solo podía gritar… el dolor y el placer eran uno… el perro se detuvo un poco… las gotas del jadeo mojaban la espalda de Marlene.. Trato de sacar su verga con fuerza… pero no pudo… estaba tan hinchada… que estaba pegada adentro… a Marlene le dolía… le calentaba… sus ojos estaban blancos de placer y dolor… mientras el animal, tiraba con fuerza para salir… los labios de su choro se abrieron de golpe… un placer extraño… casi dolor fue lo que sintió… se quedó ahí… quieta… mientras el moco del perro salía por su concha… le mojaba los muslos… se tiró en el suelo… mirando al vacío… no tenía nada más en la mente… nada… solo ella y nerón… solos.. cansados, de placer…
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!