Paseando por Pattaya presencie algo increíble.
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Nunca pensé que iba a contar, relatar mis experiencias eróticas, pero está en particular merece que la cuente, tanto por lo inusual como por lo bizarra.
Yo no soy el protagonista en esta historia, simplemente les voy a contar lo que vi.
Sobre mí, les puedo decir que soy de Argentina, soy mecanico, tengo 25 años, y hace poco decidí hacer un viaje por Asia; visite Japón, China, Vietnam, Corea del sur y Tailandia.
Lo que les voy a contar pasó en Tailandia.
Luego de recorrer los países antes mencionados me faltaba Tailandia, estuve algunos días en Bangkok, y para el final deje Pattaya, había leído que era la capital mundial del sexo, por eso pensé en quedarme unos 4 días, para cogerme varias tailandesas.
Segunda noche recorriendo la “Walking Street”; es una especie de callejón sin fin lleno de bares, discos y cientos de tailandesas desesperadas por que las cojan.
Me llamo la atención el club Insomnia, no lo había visto la noche anterior, parecía un lugar copado.
Entro me pido una cerveza, y al instante empiezan a acercarse las tailandesas, simpáticas pero ninguna me gustaba, la noche anterior me había cogido una muy linda, y no quería bajar el nivel, lo ideal es esperar hasta que aparezca una que se destaque.
Paso un rato y se me acerca uno de los encargados del bar, y me da un volante; este volante tenía la foto de una rubia hermosa con algunos animalitos en 3d alrededor de ella, y decía “Animals Show”; y se ve que decía lo mismo en otros idiomas que desconocía, me dio curiosidad, y busque al encargado que me dio el volante, para preguntarle donde era ese show, el inglés de este tailandes era medio básico, solo me dijo que si quería asistir me salía 5.000 Baht ; un precio bastante elevado; yo pensé para que salga tanto la “entrada” debe pasar algo interesante.
Le doy el ok, que quiero asistir, me lleva para la parte de atrás del club, bajamos por una escalera a un subsuelo, golpea una puerta, nos abren, en el hall de recepción pago la entrada, y me dicen,( en inglés, obviamente acá les pongo la traducción) no celular, no foto, no cámara, no masturbación, solo se mira; yo algo sorprendido asiento con la cabeza, me dan una pulsera distintiva, el encargado me lleva una habitación grande que era una especie de mini teatro, detrás de un telón se veía un mini escenario bajito, muchas sillas una barra para pedir tragos; a diferencia de arriba ahí abajo había solo hombres.
Voy a la barra me pido un whiskey y me siento en una de las sillas, la música era más baja que la de arriba, estaban todos en silencio como expectantes; yo no tenía idea de lo que iba a pasar, pero me imaginaba un show bizarro con strippers y algunos disfraces de animales o algo por el estilo.
Pasa un tiempo llegan algunas personas más; se acomodan; en un momento se prenden las luces empieza a sonar música, se corre el telón y lo que vi la verdad no me lo esperaba.
La escenografía representaba una reunión de oficina, una gran mesa, y sentado en la cabecera de la mesa en una pequeña silla alta había un mono narigudo bastante grandote, tenía puesto una pequeña camisa y corbatita, delante de todo, al borde del escenario apareció un viejito tailandés que era el entrenador al cual miraba fijamente, como si esperara órdenes.
En escena entra la “secretaria”, que era nada más y nada menos que la rubia hermosa del volante; en persona estaba para el infarto, calculo que sería rusa por su estatura, y su belleza; su cabello era largo rubio lacio, ojos celestes, tenía puesta una camisa blanca que parecía que iba a explotar, para liberar dos enormes tetas, cintura de avispa, una minifalda negra ajustada a un culo tipo cola Reef redondo y perfecto, medias y portaligas.
Yo me quede con la boca abierta, el corazón me latía a mil.
Yo me preguntaba acaso ese mono se va a coger a esta rubia?
Se pone a bailar alrededor de la mesa; se movía muy bien, se acerca al mono, le mueve la sillita y baila delante de él; el mono poco y nada la miraba, tenía su mirada fija en su entrenador.
Yo no podía creer lo que estaba viendo, la pija me latía como nunca, me recordó la primera vez que vi porno en mi vida cuando empezaba mi adolescencia, la vena de mi cien me estallaba, el corazón en la garganta.
Poco a poco la rubia se desabrocha algunos botones de la camisa y libera esas dos tetotas hermosas, se las manosea, juega a chuparse los pezones, continua bailando.
La rubia se sube arriba de la mesa se arrodilla y se pone de perrito de perfil al público, el entrenador da una orden con sus brazos y el mono entra en acción, se va hacia el culo de la rubia le levanta la minifalda, quedan al aire sus hermosas nalgas, aun de costado se podían apreciar los labios carnosos de su concha, el mono le corre la tanga dejándosela ajustada al mitad del cachete izquierdo, se le prende con sus patas por las piernas, con sus manos la toma de las caderas y sin dar vueltas se la empieza a coger como loco, no estoy seguro de por dónde se la metía si por el culo o por la concha, pero se la cogía a una velocidad impresionante, a pesar de que había música se escuchaba el Chas! Chas! Chas! Chas! , de la pelvis del mono contra los cachetes del culo de la rubia, que le temblaban como si fuera un terremoto.
El mono no tenía una gran pija, sería de unos 10 centímetros, color roja, grueso como el dedo de una persona.
Como dicen algunos el tamaño no importa, y este mono con su pequeño pene estaba dando catedra, se movía como todo un profesional, no paraba de darle duro a la rubia que gemía como loca, reboleaba su melena hacia adelante y hacia atrás, ocasionalmente se manoseaba las tetas, el mono no le daba respiro, le daba bomba bestialmente, parecía incansable,como si estuviese en piloto automático; cada tanto el entrenador le hacia una seña al mono y este le daba un chirlo en los cachetes del culo a la rubia, ella respondía con un grito de dolor.
Por momentos el mono se le prendía de los soportes del porta ligas y de la tanga y se tiraba hacia atrás como colgando y se la seguía bombeando.
La forma en la que le temblaba la nalga izquierda con la tanga incrustada en medio tras cada envestida del mono me hacia latir la pija.
Luego de unos 5 minutos de darle duro, el entrenador le hace otra seña el mono se baja, y se le va al frente a la rubia, ella se queda en la misma posición, el mono se le trepa en los hombros, la agarra de la cabeza, apunta y le mete la pija en la boca, la rubia pone labios de pato y el mono empieza a cogerle la boca.
Por dios, yo no lo podía creer, que mono hijo de puta, que manera de cogerse a esta rubia hermosa, casi que no podía evitar no tocarme la pija, me cruzaba de piernas para tratar de contener a la bestia, no podía quedarme quieto.
Luego de cogerle un rato la boca, nueva orden del entrenador, el mono se baja, la rubia aun en 4 se da vuelta quedando de culo hacia el público, y el mono se le vuelve a trepar y se la coge en 4, ahí se podía apreciar como la pijita roja del mono se perdía entre los labios de la concha rosada de la rubia; era increíble, el mono se la cogía con furia.
Luego de unos 4 o 5 minutos, nueva orden del entrenador, el mono se baja, la rubia se recuesta sobre la mesa, el mono se le sube encima, queda entre las tetotas y el cuello de la rubia y se empieza a masturbar, mirando a su entrenador, al ratito no alcance a ver si había acabado, pero hace como que eyacula en su mano y se la pone en la boca a la rubia.
Esta última parte de acting del mono se vio muy forzada, obviamente el mono ya habría eyaculado varias veces pero no dejo de ser algo interesante.
El entrenador se levanta y se cierra el telón.
A mí me temblaba todo el cuerpo, no podía creer lo que acababa de ver.
Respiro profundamente, quería ir a la barra a pedirme una cerveza, pero tenía la pija a full, intentando levantar una tienda de campaña con mi pantalón, a pesar de que estaba todo a media luz y eran todos hombres los presentes me daba algo de vergüenza.
Pasan algunos minutos, trato de calmarme, disimulo lo mejor que puedo mi erección, voy a la barra a pedirme una cerveza.
Estaba ansioso por ver que seguía.
Se escuchaba movimiento detrás del telon.
Empieza a sonar música alta nuevamente, se encienden las luces, se corre el telón, y la escenografía había cambiado, representaba algo así como un callejón; o al menos eso me pareció, había algunos tachos de basura y bolsas sobre el escenario; al instante entra la rubia, con otra ropa, las tetas las tenía contenidas por un top rosa ajustadísimo, le dejaba la mitad de la parte de abajo de las tetas afuera, un mini short blanco y zapatillas.
Baila un rato, se mueve por todos lados, se pone en 4 hace twerking, y mientras revolea los cachetes del culo para todos lados, del costado en escena entra un perro labrador negro, y se va directo a montarla, ella sonríe y sigue haciendo twerking, el perro se le sube y baja desesperado intentando metérsela, ella sonreía y seguía con su coreografía; se pone en pie, continua bailando y el perro se le prende de la pierna.
La situación más que excitante era algo graciosa.
Luego de bailar unos minutos más y provocar al perro, se quita el mini short, vuela el top, queda totalmente desnuda solo con las zapatillas, se pone en el piso en 4 haciendo twerk; el perro no pierde tiempo y la va a montar, luego de algunos intentos fallidos, subidas y bajadas, se la logra meter.
El perro a diferencia del mono duro apenas unos segundos, le dio un par de embestidas con furia, pero acabo muy rápido, se le baja, la rubia lo agarra al perro, lo acaricia, le agarra la pija se la hace hacia atrás, se la empieza chupar, y se cierra el telón.
Baja la música y las luces nuevamente, yo aún tenía un poco de cerveza, lo que había visto no me había excitado tanto como lo del mono, pero ver a semejante hembra hacer twerking me mantenía animado, y tenía la esperanza que haya alguna otra escena con el mono.
Pasaron algunos minutos, nuevamente luces, música, telón fuera, y el escenario esta vez representaba algo así como una granja, había algunos fardos de pasto sobre el escenario.
Todas las escenografías eran muy sencillas pero se llegaban a interpretar.
Entra en escena nuevamente la rubia, pero no venía sola, venía con un burro!!!.
Era un burro algo pequeño, yo nunca había visto uno, pero me los imaginaba algo más altos, este era como un mini burro, la cabeza le llegaba a las caderas de la rubia.
Ella estaba vestida como granjera sexy, con una camisa roja y negra a cuadros atada en la panza y con la mitad de sus tetotas afuera, un mini short de jean que prácticamente parecía una tanga, un sombrero de cowboy y botas.
Yo me volví a animar, la calentura volvió, no me esperaba verla con un burro.
Empieza a bailar, alrededor del burro, le refriega su cuerpo, lo toma de la cabeza le pasa sus tetas por el hocico, el burro era muy tranquilo, parecía no inmutarse.
Ella le empieza a manosear la zona de la pija al burro, mientras sigue bailando y poco a poco al burro le empieza a aparecer una tripa negra bastante larga, la rubia se la manosea, lo masturba por momentos mientras sigue bailando, se le sube al lomo al burro, le refriega la concha hacia adelante y atrás; el burrito quieto, paciente como esperando su momento.
Ella baila unos minutos más, se pone de espalda al público y se saca su mini short/ tanga, se saca las tetas para afuera sin quitarse la camisa, masturba al burro con más intensidad, y se le pone adelante en 4, en ese momento el burro se activó, la tripa larga se le paro para adelante, se le puso dura y fue directo a montarla.
La primera embestida no logro embocarla, la segunda tampoco, la rubia con la mano le agarra la pija al burro, la acomoda, y el burro la empala.
Por la violencia de la primera embestida del burro voló el sombrero de cowboy que tenía puesto al rubia.
Por dios !!!.
El burrito que ni se mosqueaba como se había trasformado en una bestia!!! Le daba embestidas durísimas, la rubia gemía dolorida.
El burrito habrá durado poco más de un minuto metiéndosela y sacándosela.
En un momento frena, se acomoda y le da unas 4 últimas embestidas bestiales, la rubia gatea hacia adelante intentando zafarse, pero al burrito no se le escapa.
Luego de la última embestida, el burro le había empalado hasta el fondo la pija, no llegaba a ver si la tenía toda adentro, pero eso parecía.
El burro se le queda montado unos segundos, disfrutando su orgasmo, o al menos daba esa sensación, movía las orejas para todos lados, la rubia continuaba gimiendo mirando al público; hasta que la pija del burro se empieza a ablandar y se desprende de la conchita rosa de la rubia, seguida de un gran chorro de semen.
Ella acaricia la cabeza del burro que aun tenia encima, mira al público y saluda con un beso.
Se cierra el telón, bajan luces, música y fin del show.
?
Pasaron unos pocos minutos, yo no sabía si pararme, aplaudir o retirarme, mire a los costados y todos se quedaban sentados como esperando algo más.
Y efectivamente quedaba una bonus scene.
Se encienden las luces nuevamente, simplemente con la música de fondo baja, ya antes de correrse el telón se escuchaba un Chas!, Chas!, Chas!, Chas! , se corre el telón, ya no había escenografía ni nada, estaba la rubia toda desnuda, arrodillada en el piso en 4, tenía al mono montado frente a ella en sus hombros agarrándola de la cabeza cogiéndole la boca, ella con sus labios como pato, y por detrás se la estaba cogiendo todo desnudo también con sus carnes flojas, el viejito tailandés entrenador del mono.
A mierda!!! que manera de castigarle los cachetes del culo a la rubia.
El viejito estaba prendido como loco, le daba, le daba y le daba, y el mono hacia lo mismo mientras lo miraba.
El viejito tailandes la sigue embistiendo y le empieza a dar chirlos en los cachetes del culo a la rubia, bastante fuertes, los cachetes le empezaron a quedar colorados.
La escena dura poco más de 5 minutos y en plena faena se cierra el telón !!! , pero se siguen escuchando los Chas!, Chas!, Chas!
Bajan las luces, y sube la música; no se escucha más nada, ahora sí, fin del show; todos los presentes se empiezan a levantar para retirarse.
Yo desesperadamente fui al baño, la pija me explotaba, tanto así que apenas me agarre la pija y me salto un chorro de semen que quedo estampado sobre el azulejo; primera vez en mi vida que eyaculaba sin siquiera tocarme.
Me acomode la pija como pude, subí arriba y me agarre la primera puta tailandesa que encontré, me la lleve al hotel y me la cogí toda la noche cerrando los ojos recordando lo que había visto.
A la noche siguiente volví a Insomnia a ver el show nuevamente, le pregunte a uno de los encargados y me dijo que solo era una vez por semana; yo pensé claro pobre rubia, cogerse un mono, un perro, al viejito y sobre todo un burro todas las noches era un tanto extremo.
Fue el show más bizarro que presencie en mi vida, nunca había visto algo así y no pensaba que era posible.
Me hubiese encantado poder filmarlo o tomar fotos al menos; pero solo quedara grabado en mi memoria.
De todos modos tengo pensado volver a viajar a Pattaya exclusivamente en enero del año próximo, espero poder volverlo a ver.
No sé si a los lectores de este foro los sorprenderá tanto como a mí, pero me pareció algo excitante y bizarro que tenía que contar.
Tal vez este tipo de shows de zoofilia son bastante comunes y yo lo estoy contando como toda una novedad; por lo menos para mí lo fue.
Solo se lo he contado a dos de mis amigos más cercanos, y si bien me creen necesitan confirmación visual que tendrán en enero cuando viajemos a ver ese “Animals Show”.
Mis propias experiencias sexuales son algo básicas y rutinarias, nada fuera de lo común así que si no vuelvo a vivir algo bizarro, no creo volver a comentar algo más.
Si desean algún dato de este “show” me lo preguntan.
Saludos !!!
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