Un Fin de Semana de Susto y Placer

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por sandradaniela.
Después de mis grandes aventuras con Príncipe, mi perro basset hound o hush puppies, quien es mi gran amante secreto.

Resulta que un día Zoila, una compañera de trabajo, me invito a pasar un fin de semana a una finca veraniega de clima templado que tienen sus padres en un pueblo cercano a la capital, le dije que me agradaría mucho, entonces le dije puedo llevar a príncipe, ella lo conoce, entonces me dijo, no lo creo en la finca hay dos perros grandes y de pronto le vayan a pegar, entonces me toco hablar con mi padres, quienes accedieron a cuidar a príncipe ese fin de semana.

Ya el día viernes a eso de las seis de la tarde nos fuimos para la finca, llegamos a eso de las siete y treinta de la noche y pues el cuidador de la finca nos estaba esperando, Zoila le entrego unos bultos que el papa había mandado, nos dirigimos a la casa principal, Zoila me indico la pieza en donde iba a dormir y ahí puse mi maletín y nos salimos a la alberca a descansar y a conversar pues estaba haciendo bastante calor, al rato nos llamaron a la cena y después regresamos nuevamente a la casa y nos pusimos ropa cómoda, yo me puse una faldita corta acampanada y una blusa de tirantes y sandalias y Zoila se puso un short en algodón con una blusita corta y entonces nos pusimos a tomar unas cervezas y a escuchar música, estando ahí lo mas de distraídas, en esas llegaron dos perros amarillos grandes de raza indefinida, mejor dicho conocidos como criollos.

Entonces Zoila los regaño, me dijo Sultán, uno que tiene una mancha en el ojo izquierdo, dijo este es bien bravo, el otro se llamaba Nerón pero era más dócil, y entonces se echaron afuera de la alberca y seguimos ahí con Zoila, en esas mi amiga se dirige al baño y yo me quede sola ahí, en esas se levanta el perro Sultán y se dirige a mí, yo me asuste y me quede quietica, se me acerco y me comenzó a olfatear todita, comenzó por mi pies y fue subiendo hasta llegar a mis caderas, yo pensé si me muevo este me muerde, en una de esas coge y mete el hocico debajo de mi vestido y me lame las ingles rosándome la vagina, yo quede paralizada por todo, el susto, el gusto, mejor dicho no sé qué decir, y comienza a mover la cola como todo alegre, yo di unos pasos atrás y me le retire y entonces se me acerco nuevamente y le acaricie la cabeza, en esas llega Zoila y me dice que paso, le dije que susto que me dio tu perro, pues te fuiste y se acercó pensé que me iba a morder, pero afortunadamente no lo hizo, Zoila me pidió disculpas y me dice, mira que le has caído bien, es la primera vez que lo miro que se acerca a una persona moviéndole la cola, por lo general comienza a ladrar y si le dan chance muerde.

Zoila lo saco y nos fuimos a sentar a seguir tomando nuestras cervezas, y entre risas y cantos que estábamos, nuevamente se me acerco Sultán y le acaricie la cabeza, entonces Zoila me dice, Oye como que le gustaste a mi perro, yo me reí, le dije no ha de ser, lo que ha de estar es sintiendo el olor de mi Príncipe que lo tiene confundido y seguimos ahí conversando y el perro se quedó junto a mí, se hicieron como las doce de la noche y entonces Zoila me dice, ya estamos como mareaditas, vamos a acostar y mañana seguimos molestando, le dije bueno.

Pues el cuidador y la familia ya estaban dormidos y entonces Zoila se dirigió a su cuarto en el segundo piso de la casa, me dice echara llave, le dije bueno y me dirigí a mi cuarto que estaba en el primero piso y así fue eche llave me puse mi pijama y después de ir al baño me acosté a dormir, había pasado como una hora más o menos y siento que raspaban en la puerta, al principio me dio miedo, pero luego me levante a mirar por la ventana a ver quién era, y vaya sorpresa, era Sultán el que raspaba la puerta, vaya dije que querrá, no le hice caso y volvió a raspar, pero con lo que me había contado Zoila me daba miedo abrir.

Pero tome valor y fui y abrí la puerta, entonces entro y cerré la puerta, yo estaba asustada, pero él lo que hizo fue acercarse y nuevamente comenzó a olfatearme y a lamerme las piernas, no miento se sentía riquísimo pero tenía miedo, entonces acerco su hocico a mi entre pierna por encima de la pijama y me alzaba a mirar, como diciendo quítatela, entonces con miedo y todo me baje la pijama y comenzó a lamerme la vagina.

Pienso que el descubrió que yo tenía relaciones sexuales con Príncipe, en una de esas se para y me abraza con sus patas delanteras y se movía como queriendo copular, yo me reí y pues comencé a excitarme, me lo quite de encima y me senté al filo de la cama me quite la pijama y me le abrí de piernas, me comenzó a lamer hasta que me saco un gran orgasmo, en una de esas subió sus patas delanteras y quede en medio y comenzó a moverse y acerco su pene a mi vagina, me hecho sus chorritos de perro y me punteo pero me lastimaba con sus uñas, por lo que lo baje y me salí un poco más de la cama, quedando prácticamente mi culo en el aire.

El se subió nuevamente y le quede mejor ahí si acerco su pene y comenzó a moverse y me acertó y de una me lo metió y comenzó a bombearme como loco, me metió el bulbo pero por la posición se le salió y entonces se bajó y me lamio y se me volvió a subir, así estuvimos un buen rato, hasta que se bajó y trataba de voltearme con sus patas, entonces con todo mi excitación no me importo y me le puse en la posición de perrita, el me lamio la cara y luego se fue a mi trasero y después de darme unas buenas lamidas se me trepo y de una me acertó y me lo metió hasta el fondo, y comenzó a moverse como loco, y en una de esas se aferró duro a mi cintura y sentí como su gran bulbo crecía dentro de mi, tanto que parecía que no iba a alcanzar, pues la verdad no lo resistía, era mucho más grande que el de mi príncipe y siguió creciendo, Sultán dejo de moverse y comencé a sentir el palpitar de su pene y las grandes eyaculaciones que depositaba en mi interior.

En una de esas baja sus patas delanteras por el lado derecho y se volteo, quedando con su pata izquierda sobre mi anca, eso me dolió mucho, pero la bajo y quedamos culo con culo, pensé que se iba a salir, pero no fue así su gran bola estaba totalmente trabada dentro de mí y comenzó a jalar, dolía pero era un dolor soportable, y cada vez que me jalaba eyaculaba en cantidades, la verdad no se cuento tiempo estuve así con él, hasta que igual que mi príncipe se le comenzó a deshinchar y en un jalo que me dio que me hizo doler, se despegó de mí.

Tenía un pene descomunal, bien grande y grueso, el de mi príncipe al lado de este, era como de juguete, se lo lamio, se dirigió a mí me lamio limpiando mi vagina e igualmente lamio todo lo que cayó al piso y al rato se dirigió a la puerta como diciéndome ahora si me voy, le abrí la puerta y se fue y yo me quede atónita, era como si todo lo hubiera tenido planeado.
Yo cogí y me fui a dar un duchazo y limpie con papel higiénico lo poco que quedo y me toco salir y coger una cerveza y regarla en el piso para que aplacara el olor a sexo perruno que había quedado y dormí con una ventana abierta, la verdad habíamos estado casi dos horas en este ajetreo, ya al otro día.

bajo Zoila y me golpeo la puerta, me desperté y le abrí la puerta y me dijo como amaneciste, le dije bien y entonces me dijo y que paso se siente olor a cerveza, le dije si que pena, es que la cerveza que me traje se me volteo y se rego, tranquila dijo no hay problema, ahora arreglan todo, me dijo ve báñate, para que vamos a dar una vuelta al pueblo y comprar unas cosas, nos llamaron a desayunar eran las siete y treinta de la mañana y cuando nos dirigíamos al comedor, nos topamos con sultán, pensé que me iba a delatar o hacer algo por el estilo que llamara la atención a Zoila, pero como es la vida, no hizo totalmente nada, ni siquiera movió su cola, tanto así fue la indiferencia que Zoila me dijo, a Sultán como que ya se le paso el amor por ti.
Lo único que dije si eso veo, no ha de ser que me quiere morder, no dijo, ya te acepta, desayunamos y nos fuimos al pueblo, regresamos como a las diez y media y nos cambiamos y nos metimos a la piscina a nadar y ahí nos la pasamos, el único que se miraba por ahí era a Nerón echado junto a sillas de sol, salimos de la piscina nos recostarnos y recibir el sol, Nerón se acercó a Zoila y trato de lamerla y ella lo regaño y lo alejo, le dije no seas así pobrecito ha de ser que tiene sed, entonces se acercó a mí y me lamio y le dije, ya vez tiene sed, entonces fui y le puse agua en una vasija y se puso a beber, luego se me acercó y le acaricie la cabeza y se hecho junto a la silla donde estaba.

Ya después de almuerzo y de la siesta, nos pusimos a jugar con Zoila y en la noche nos tomarnos unas cervezas y a bailar en fin y como la noche anterior ya cerca de las once nos fuimos a dormir en mi mente estaba pensando si mi amante Sultán me iría a visitar: Pero nada, me asome por la ventana y nada, me recosté en la cama y no podía dormir pensando en Sultán y volví a levantar y mire por la ventana y nada, al único que mire fue a Nerón echado en la alberca, entonces saque mi mano y le chasquee los dedos, a lo que voltio a verme y se paró, entonces lo llame.
El se vino hacia la ventana, entonces abrí despacio la puerta y lo llame y lo hice entrar, le acaricie la cabeza, me quite la pijama y quede desnuda pero Nerón no reaccionaba, entonces me senté acaricie la cabeza y lo acerque a mi vagina y de ver que nada me metí lo dedos y después se los di a oler y entonces ahí los lamio, ya tomo interés, entonces baje mi mano y le acaricie su capuchón y le hice un masaje corto y eso le gusto y se puso más activo, yo estaba totalmente prendida y lo que quería era sexo, entonces me le puse en cuatro y entonces ahí me lamio y de una se trepo y me cogió y de una me lo metió hasta el fondo, y comencé a sentir como se le engrosaba, me agarro tan duro de la cintura que me rasguño a cada lado, pero no me importo y comencé a sentir su bola engrosar dentro de mí y vaya que la tenía bien grande, pensé que ya no me dolería, pero si me dolió y comenzó a eyacular en cantidades.

Se volteo tan rápido que no me dio tiempo a nada, solo a sentir el jalón que le dio a mi vagina y hemos quedado abotonados culo con culo y estando así, me acaricie mi clítoris y tuve unos grandes orgasmos, lo disfrute al máximo y ahora si les puedo decir con exactitud que estuve así veintitrés minutos pegada, hasta que el bulbo se le deshincho y nos despegamos y salió más semen que el día anterior, me limpio totalmente y también lamio lo del suelo y tenía un gran pene bien grande y grueso.

Me sentí la mujer más afortunada por esa gran cogida que he tenido, esta vez fui previsiva y como había metido un trapeador al baño, trapee deje bien limpio y eche ambientador cítrico, saque a Nerón me duche y me acosté a dormir, ya ese domingo me levante como a las ocho de la mañana y fui a despertar a Zoila y vaya sorpresa cuando abre la puerta, adentro estaba Sultán, yo no dije nada, pero me quedo la intriga, baje y Nerón estaba echado en la alberca al verme se levantó y entonces lo acaricie y me puse a buscarle juegos, esto con el fin de justificar los arañazos que tenía a lado y lado de mi cintura, entonces estábamos ahí jugando y cuando mire que Zoila bajaba, lo alce para abrazarlo y entonces cuando estuvo ella me miro, lo solté y le dije no así no, juego, entonces Zoila me dice que te mordió, le dije no me rasguño tiene las uñas largas y entonces le indique, y claro como estaba bien rojo me dijo tranquila no fue nada, entonces ya no quise seguir jugando, Zoila dijo si a veces cuando toman confianza son bien toscos, ya después en horas de la tarde regresamos a la ciudad, pero para mí, fue un fin de semana inolvidable por esas grandes cogidas que me dieron y que significaron haber traicionado a Mi príncipe, quien me inicio en este mundo, otro día les cuento las nuevas aventuras y en donde Zoila después de mirarla comprometida se confesó conmigo.
Un beso a todos.