Mati entre hombres y pecados Parte 1
Matías cumple 18 años, y el profesor Cesar tiene un regalo adecuado para este momento..
Pervertidos, cómo están, espero que muy bien y con la polla en la mano. Me llamo Matías Varón, no es joda, enserio ese es mi apellido. Les escribo desde mi habitación y completamente desnudo para empezar a contarles mi historia.
Tengo 17 añitos y mañana cumplo 18, será un día muy especial para mí, es por eso que escribo este relato. Mido 1.50 mt, soy chaparrito lo sé. Vivo con mi madre y con mi tío Luis en una pequeña comunidad a las afueras de la gran ciudad.
Tengo una silueta de culo de avispa, me explico, tengo cintura delgada abdomen plano y un enorme trasero, esto se debe a que desde chiquito mi mamá y principalmente mi tío se han encargado de inscribirme en varias actividades de atletismo y danza, lo que ha hecho que mis piernas desarrollen músculos y que principalmente mi culo crezca mucho.
Desarrollé mi figura de perita desde hace 3 años, me encanta mirarme al espejo después de bañarme y ver mi enorme culo, la mayoría de las veces me ganan mis impulsos sexuales, me abro las nalgas y me dedeo el ano. Es una sensación increíble, me encanta, cuando me meto lentamente los dedos mi mente se nubla y le dispara mucha dopamina a mi cerebro.
Un viejo verde hace tiempo me dijo que tenía un lindo cuerpo y que tenía que lucirlo, ser la envidia de todos y de todas, a día de hoy me doy cuenta de que ese viejo verde solo quería cogerme, pero en ese momento le creí, caí en sus engaños y desarrollé una personalidad calentona. Me encanta vestir shorts cortitos y camisetas que me dejen el abdomen semi descubierto.
Estudio en la preparatoria San Francisco II, afortunadamente dicha institución no tiene código de vestimenta, motivo por el cual puedo vestir mis shorts y mis camisetas cortitas. Pensarás que con mi manera de vestir llamo la atención del público, pues tienes razón, pero lo vengo aguantando desde que empecé a vestir así, la mirada lasciva de todos esos hombres pervertidos que se quedan babeando al ver mi culo.
En la preparatoria pasa lo mismo, tanto los profesores como los alumnos me quedan viendo, al principio era vergonzoso, pero poco a poco la vergüenza se convirtió en morbo y solo les lanzo una mirada pícara. La mayoría de profesores son hombres y se me quedan mirando, también llamó la atención de varios alumnos y de algunas alumnas, aunque estas últimas más me miran con desprecio, ya que las muy estúpidas no tienen un culo tan grande como el mío. Afortunadamente tengo un grupo de amigos que siempre me consuela y me ayuda, los amo.
No te voy a mentir, de vez en cuando he sentido una palmadita en mis pompis, o que algún viejo verde me haya presionada las nalgas, me encanta y me da un poco de miedo también, pero el morbo nubla mi mente y me hace disfrutarlo.
Volviendo al tema…17 de mayo, el día que cumplí 18 años…
Acudí a la preparatoria, vistiendo unos shorts cortitos con detalles de brillitos y una playera negra con detalles en rosa fosforescente. Recibí los alegres saludos de mis compañeritos, lo cual me hizo muy feliz. Era viernes, las clases se desarrollaron con normalidad, aunque yo deseaba que avanzaran más rápido ya que después de la preparatoria mis amigos me iban a llevar a la feria.
Ya casi podía sentir la música y las luces destellantes de la feria…solo quedaba la última clase, matemáticas con el profesor Cesar.
Conocía muy bien al profesor Cesar, 45 años, tez clara, 1.85 mts, calvo. Le encantaba avergonzarme en clase, siempre me pedía salir a la pizarra a resolver algún ejercicio difícil de matemática, cuando lo hacía el se me acercaba para explicarme como se hacía, mientras sus pervertidas manos exploraban mi cuerpo, mi mano, mi cintura, el viejo verde se atrevía hasta tocarme el culo en frente de todos, la mayoría estaba perdiendo el tiempo en su clase, ocupados viendo sus celulares, pero otros si se daban cuenta de que el viejo pervertido me manoseaba.
ODIO A ESTE VIEJO PERVERTIDO, mi culo tiene una riña personal con él. Hace un mes tuvimos unas prácticas calificadas y lastimosamente obtuve una nota pésima. Toda la clase el profesor se la pasó mirándome con mala cara. Apenas terminó la clase me citó a la oficina de profesores de matemática.
Estaba oscuro, tenía miedo, él cerró la puerta. Me mostró mi mala calificación con una mirada de enojo y decepción…
- Profesor Cesar: Matías, esta nota es inaceptable, viniendo de una persona tan inteligente como tú
Yo trate de explicarle el motivo de mi baja calificación, sin embargo, el hombre hizo oídos sordos y aun así aplico la mano dura conmigo.
- Profesor Cesar: Tengo el permiso especial firmado por tu tío Luis que me permite sancionarte adecuadamente cuando sea necesario.
El hombre me puso a cuatro patas sobre el sillón de la sala, con sus gruesas manos arqueó mi espalda. Con furia me dio la primera nalgada
- Mati: AY
- Profesor Cesar: así aprenderás a esforzarte más
La segunda nalgada no tardó en llegar
La tercera sonó más, el hombre encontró la manera de que suene en toda la habitación
El hombre tenía en sus manos mi enorme culo, lo estaba castigando, estaba pagando por mi bajo rendimiento. SAS, SAS, SAS, una tras otra las nalgadas impactaron en mis enormes nalgas. Poco a poco mi culo se enrojeció, él hombre jadeaba de cansancio y de lujuria.
El profesor metió su mano debajo de mis shorts, cogió mi calzoncillo y tiró fuerte, haciéndome un calzón chino…Dios como apretaba mi rajita…yo gemía, confundido, una mezcla de vergüenza y morbo.
Con su otra mano apretó mis huevos, me estaba bombeando los testículos…Ay Dios que rico se sentía, era doloroso, mi rajita sufría, pero mis testículos estaban siendo masajeados con deseo…
El hombre tiró fuerte de mi calzoncillo, escuchaba como sonaba el elástico. Soltó mi trasero por un momento…pensé que estaba libre…pero no
Sentí un bulto en la entrada de mi culo, gracias a Dios aún tenía puesto los pantaloncitos, no me atreví a voltear, pero estaba seguro de que aquello era el pene del profesor Cesar…
- Profesor Cesar: Que rico sería hacerlo ahora mismo…pero aún no es el momento…aún no.
Ese era el motivo por el cual estaba enfadado con el profesor Cesar…es cierto que una parte de mi disfrutó el momento, pero la humillación me hizo odiarle con ganas.
Toda la clase se la pasó comiéndome con la mirada, aquella ocasión no pudo hacer nada, pero hoy ya tenía 18.
La clase acabó, por fin éramos libres…cogí todas mis cosas y estaba apunto de levantarme para correr a la salida cuando de repente una mano tomó mi hombro y me regresó a mi lugar. El profesor indicó al resto de la clase que tenía que quedarme para resolver una serie de tareas que no había cumplido, mis amigos me miraron con tristeza, querían quedarse para ayudarme, pero el profesor Cesar los llevó a la salida, dejándome completamente solo en el salón.
El salón se quedó vacío, solo estaba yo, sentado en mi sitio, escuchando las pisadas de aquel viejo verde, acercándose lentamente…
Oh si, ya sabía que iba a pasar, tú sabes que va a pasar y no puedes estar más en lo cierto.
El profesor colocó una silla al frente del salón y me invitó a sentarme ahí, sacó de su maletín un examen con mi nombre, el examen estaba lleno de trazos de color rojo…
- Profesor Cesar: ¿Sabes qué es esto cierto?
- Matías: …
- Profesor Cesar: Bueno si no vas a hablar…este es tu examen, lo he revisado y vas a obtener una calificación pésima…y tú sabes que pasa cuando obtienes una calificación pésima. Sin embargo, hoy te voy a dar una oferta especial, por ser un día especial…
- Matías: …
- Profesor Cesar: ¿Sigues sin hablar? ¿No quieres aceptar mi oferta?
- Matías: ¿Qué es lo que quiere?
El profesor Cesar sacó un examen vacío de su maletín…
- Profesor Cesar: este es un examen vacío, son 4 preguntas, considéralo una segunda oportunidad, pero nada es gratis
- Matías: ¿Qué quiere a cambio?
- Profesor Cesar: que puedes darme
Nos miramos, ambos conocíamos el juego, yo quería que esto fuera rápido…
Me saqué la camiseta y se la entregué…el hombre la recibió con euforia y la olió fuerte…saboreándola.
Volvió su mirada a mi pecho descubierto, esas gruesas manos tocaron mi abdomen, mis tetillas…se acercó más a mi para olerme todo el pecho, me susurraba mientras recorría mi ser. Pronto sentí esos labios carnosos en mi pecho, esa lengua caliente, esos dientes hambrientos mordisqueando mis tetillas…mi cara estaba toda colorada
El profesor volvió en si por un momento, sacó de su maletín un papel con una de las preguntas resueltas…
- Matías: ¿Solo una?
- Profesor Cesar: Solo me has pagado por una de las preguntas, si quieres más, adelante, sigue pagando…
Me quité los zapatos y los calcetines y también se los entregué…el hombre tomó mis pies, mis pantorrillas y las acarició con tal cariño…
- Profesor Cesar: unos músculos bien formados, te felicito Matías, se nota que los has trabajado
Recorrió mis pantorrillas, dándome besitos que iban subiendo hasta mis muslos. Me abrió un poco las piernas, besándome los glúteos, apretando mis carnes como un lobo hambriento…
No voy a mentir, lo estaba disfrutando…
El profesor sacó de su maletín otra pregunta resuelta y me la dio…
- Profesor Cesar: Ya tienes 2 preguntas, pero no es suficiente para aprobar…necesitas comprometerte un poco más con este curso
Yo no quería hacerlo…no quería bajarme los pantaloncitos, me daba vergüenza lo que tenía debajo…
Fue ahí cuando me descuidé, bajé la mirada, lo vi, el enorme bulto que el profesor tenía entre sus piernas. Solo su pantalón me protegía de semejante bestia. La curiosidad, el morbo, la calentura inundó mi mente…
- Matías: está bien…
Me puse de pie para quitarme los pantaloncitos, pero el hombre mayor me detuvo…
- Profesor Cesar: espera…esto lo hago yo.
El hombre se puso de rodillas ante mí, bajó el cierre de mis shorts y lentamente bajó mis pantaloncitos, exponiendo aquello que me daba tanta vergüenza, aquello que no era para este hombre, sin embargo, ya estaba tomando propiedad…
- Profesor Cesar: Mira nada más, que regalito me tienes…
- Matías: NO…no es para usted…
- Profesor Cesar: Demasiado tarde…
Traía puesto un calzoncito rosa con detalles brillantes…no me avergonzaba tenerlo puesto, sino que él lo viera. El profesor Cesar puso a un lado mis pantaloncitos, nuevamente abrió mis piernas y masajeó mis muslos, mis nalgas, mi trasero era de su propiedad ahora.
Su cálida lengua saboreaba mis nalgas, no hagas eso, detente por favor…era real el odio que le tenía a este hombre, pero muy bueno en lo que hacía. Mi cuerpo no mentía, lo estaba disfrutando, mi mente estaba perdiendo la batalla. Solo mi calzoncito rosa me protegía de volverme completamente loco. Sentí su húmeda y caliente lengua rozar con mi prenda intima, casi entrando a mi interior.
El hombre agarró con fuerza mi calzoncito y tiró hacia arriba, haciéndome un calzón chino…
- Profesor Cesar: ¿te trae recuerdos esto?
- Matías: Jo…JÓDASE
Le respondí con furia y vergüenza. Sas, sas, sonaba por todo el salón, ya extrañaba esas nalgadas, mi cuerpo lo extrañaba. En estos momentos solo me estaba dejando llevar.
Aun con todos esos masajes, besos y mordidas a mis gruesas piernas…pude resistir.
El profesor sacó de su maletín la tercera pregunta resuelta y me la dio.
- Profesor Cesar: aquí está como prometí, con esto tienes lo suficiente para aprobar, apenas. Ahora depende de ti…
Estaba semi desnudo, nada más con una trusa rosada brillante, en un salón vacío y junto a un hombre lleno de lujuria. Pero ya había acabado…o eso era lo que pensaba
- Profesor Cesar: si quieres la ultima pregunta y obtener una nota perfecta, solo ve y apóyate sobre mi escritorio, aceptaré encantado tu ultima ofrenda.
Estaba muy caliente, la decisión estaba sobre la mesa, en este estado no puedo pensar con claridad y menos mirando el enorme paquete que el profesor tenía en frente de mi…mi cuerpo necesitaba lo que estaba detrás de esos pantalones.
No lo pensé mucho y fui hacia el escritorio del profesor, me apoyé como el dijo, levantando el culo, entregándoselo a mi señor. Sus manos calientes sujetaron mis enormes caderas.
- Profesor Cesar: Que delicia…
Dijo mientras acariciaba mis nalgas. Tomó mi calzoncito rosa y lo bajó, dejándome completamente desnudo.
- Profesor Cesar: esta prenda me la quedaré yo
Abrió mis nalgas y tuvo completo acceso a mi ano…sentí su lengua por toda mi rajita, era caliente, húmeda, grande. Yo tapaba mi boca, no quería darle ese placer. Sus manos apretaban mis nalgas y si lengua se abría paso a mi anito. Ya estaba lubricado mi anito, lo que seguía me iba a derrotar por completo. Sentí su dedo en la entrada mi anito, tenía manos grandes y dedos gordos. Metió la punta de su dedo, que rico se sintió eso. Un poco más adentro, un poco más, mi profesor fue avanzando hasta tener todo su dedo dentro de mi ser.
- Matías: AY SI…
Gemí fuerte, con solo uno de sus dedos ya me había derrotado. Estaba avergonzado, pero no me esperé lo que mi profesor hizo después.
Sacó su dedo, me dio vuelta y me besó, un beso apasionado, profundo…romántico.
- Profesor Cesar: no tienes que seguir resistiéndote Matías, yo se que te gusta y está muy bien. No quiero hacerte daño…y te pido disculpas si lo he hecho…
- Matías: yo…lo siento
- Profesor Cesar: Esta bien cariño, no te contengas, quiero que lo disfrutes tanto como yo…
- Matías: gra…gracias profesor
Me besó de nuevo y me colocó en mi posición inicial, sentí nuevamente su dedo medio entrar en mi ano…que rico se sentía…gemía sin miedo ahora, esta vez era libre.
El profesor Cesar continuó dedeando mi anito, dilatándolo y lamiéndolo, preparándome para el plato fuerte de la noche.
- Profesor Cesar: Estas listo
El maduro se quitó el cinturón, los zapatos, los pantalones. Dejó salir a la bestia…era enorme. La meneaba con pasión, con ganas. Apenas vi a aquel hombre semidesnudo y con su arma en la mano tomé mi posición, levanté el culo lo más que pude, el profesor aceptó mi ultima ofrenda y yo acepté la de él.
Tomó su enorme polla y la puso en la entrada de mi ano, pude sentirlo, era más grande que mi anito. El hombre presionó, sentí un poco de dolor, pero entró fácilmente. Oficialmente me estaba dando por el culo.
El hombre sujetó firmemente mis caderas y empujó, su enorme pedazo se abrió paso a través de mi recto
Empujó un más, invadiendo mi interior.
Así fueron sus embestidas hasta tenerla completamente dentro, mi culo estaba en llamas. Una vez recorrió todo mi interior empezaron las verdaderas embestidas, empezó a martillear mi interior.
- Profesor Cesar: DIOS QUE BUEN CULO…
- Matías: AY…AY…AY
- Profesor Cesar: NO SABES…cuanto tiempo he esperado este momento, es el mejor culo que me he comido
- Matías: De seguro…de seguro ha probado mejores culos de chicas…
- Profesor: esas perras no tienen un culo tan grande y firme como este…DOS AÑOS ESPERANDO ESTE MOMENTO…ha valido la pena…
Me siguió dando por el culo, su enorme polla entraba y salía de mi húmedo anito, las palmadas resonaban por todo el salón, mis gemidos, sus gemidos.
Esas manos fueron subiendo lentamente, pasando de mis nalgas, recorriendo mi abdomen, mi pecho, acariciándome apasionadamente hasta llegar a mis hombros.
Me sujeto con firmeza, las embestidas aceleraron…
- Matías: AY…AY…SI…QUE RICO
- Profesor: Sigue aguantando pequeño…así se hace
Ese ritmo, a esa velocidad…era muy nuevo para mí, era una sensación tan deliciosa que simplemente no la pude controlar. Mi cuerpo se contrajo automáticamente mientras mi culo y mi polla se mojaban por completo, me corrí en ese momento, este macho me hizo llegar al orgasmo antes que él.
Estaba cansado, pero con las pocas fuerzas que aun me quedaban seguí aguantando la posición, que no tardo mucho hasta que el profesor Cesar llegara al orgasmo también. Sus últimas metidas definitivamente fueron las más profundas, sentía su polla hasta la garganta. Un enorme calor se sintió en mi interior, en la forma de chorros largos de lechita invadiéndome por completo, con cada ultimo esfuerzo mi macho me llenó más.
Ambos estábamos sudados, fuertemente unidos. Su enorme polla seguía dentro, pero la metió más…me abrazó con fuerza y me dijo al oído:
- Profesor Cesar: Feliz cumpleaños Matías
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Gracias por leer mi primer relato, espero que te haya gustado. Te dejo mis correos por si quieres comunicarte conmigo, darme sugerencias o mandarme lo que quieras, lo recibiré con gusto cariño.
Correo: [email protected]
Telegram: @MatiasVaron
como sigue? Necesito mas.
Excelente relato… como continua…?
Uuufff… que delicia de relato.. Menuda paja me he hecho. Me fascina como empieza esta historia.
Como sigue? Necesito mas.
que delicia de relato… Me dejaste muy cachondo y con ganas de seguir leyendo mas.
Gran relato… me encanta tu forma de escribir y de narrar todo.
Uff… como he disfrutado de mi paja 💦💦 es un gustazo leer relatos así, ojala continúes con la historia.
Muy buen relato… como sigue?
Has conseguido que me corra de la excitacion, que rico relato… 🔥😋
Que delicia de relato. Como sigue?
Gran relato… Menudo calentón estoy super cachondo y con la polla dura ahora mismo.
como sigue?