SIN ESPERARLO TENGO PERRITA

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Dos semanas atrás, conocí a una mujer, divorciada de 44 años de edad, a sido la primera mujer que he conocido ahí y que esa misma noche, terminamos follando en su coche, pensé que tras ello pues ella pasaría de mi, pero nada más terinar me pidió mi numero de teléfono y hemos empezado a vernos, solo para eso, para follar y cada vez pedirme que le hiciera más y más cosas, cada vez más duras y a mi me a ido entusiasmando cada vez más y más.
Así hemos llegado hasta este sábado pasado, ella es algo mas alta que yo, de pelo negro largo y abundante rizado, algo gordita, con unas tetas grandes y unas piernas, largas y fuertes, ademas de unas nalgas grandes y aun muy duras. pues bien ya este sábado a sido lo más de lo más.

Antes de este sábado la última vez nos habiamos visto el miercoles, a partir del jueves empezó a mandarme whatsap, diciendome que me tenia preparada una sorpresa, que si iba a ser mi "perrita", pero sin desvelar nada más, ya lo distinto a lo demás fue que el viernes me dijo para quedar el sábado en la mañana, solemos quedar solo en la noche, quedamos a desayunar, venia con un vestido verde estampado ancho la parte inferior pero apretada en su culo y escote, nos sentamos en una terraza y nada más hacerlo me dijo al oido "no llevo bragas", al instante mi nabo estaba duro, se que era lo que ella buscaba, nos sirvieron se marchó, ella paso su mano bajo la mesa paseandola por todo mi enorme bulto, mirandome y diciendome mmmmmm, que rico debe de estar ahora.

Seguimos desayunando yo le decía que estaba deseando follarla, ella cambió la conversación, para al poco volver diciendome, te gustó azotar mi culo la última vez, le dije que si, ella me dijo que le gustaba pero que aún mas fuerte, la miré y me dijo me puedes dar todo lo fuerte que quieras, hasta hacer que te obedezca, mi cuerpo se estremeció pues ya la ultima vez, me habia parecido fuerte y superexcitante todo lo que ibamos haciendo y ella me estaba pidiendo más mucho mas, le dije ¿me obedecrias?, depende de ti me dijo con una mirada burlona, me encanta sentirme sometida, mucho mas que lo que hemos jugado, de aqui atras, nos fuimos a su casa.

Todo lo tenia preparado, esa era la sorpresa, sobre la mesa habia un collar y una correa de perro, unas muñequeras y tobilleras, un bocado , ella habia desaparecido hacia su dormitorio y yo quedé en el salón mirando aquello, salíó en corsé bragas y medias, yo estaba tan caliente ya, que la hice arrodillarse en el salón bajandome los pantalones y la puse a chuparmela, ella lo hizo, apenas un minuto después, me arrdillé estaba loco por follarla se la metí desde atras ella a 4 patas, iba tan encendido que apenas duré unos minutos, ella gimió dio algun grito pero, sin llegar ella a nada.

Me senté en el sofá, ella de rodillas, su cabeza en mi vientre yo me habia desnudado, empecé a decirle que lo sentia que me habia puesto muy caliente, ella, empezó a decirme que no ocurria nada, nos callamos un rato así los dos y la empecé a mover hasta quedar que las nalgas estuvo a mi alcancé empecé a darle flojo, cada vez dando más fuerte, hasta que ella empezó a dar grititos pero se colocaba mas y ms para que le diera, cada vez me gustaba darle mas y mas fuerte hasta que me quité la cogi del pelo pero sin hacerle daño sin embargo ella era la que tiraba hacia abajo para que le doliera, una y otra vez hasta que fuí yo el que empecé a tirar fuerte de ella y ella a gritar realmente, la coloqué de pie apoyada en la mesa le abrí las piernas sus dos nalgas frente a mi, le dí con la palma de mi mano con todas mis fuerzas, me dolio la mano incluso, ella gritó fuerte al recibirlo pero rapidamente se volvio a colocar, volví a hacerlo, mi menté, era un mar de sensaciones, ver sus nalgas ahora bien roja marcada mi mano, le dí en la otra con la misma fuerza, ella gritó igual de fuerte, cogí el bocado, se lo puse en la boca lo até a su nuca ella quieta sin protestar, volví a darle una y otra vez, hasta que sus nalgas estaban rojas y mi mano dolorida, le bajé, le desabroché dos corchetes de la espalda de su corsé, mi mano bajó hasta la braga tanga, metida en su culo se la aparté, empecé asi desde atras con sus piernas toda abiertas, a tocar su chocho, estaba mojado, le metí un dedo, dio un suspiro empecé a moverlo dentro, metí dos, ella caa vez gemia y se movia más hasta que se corrío rapidamente, quedandose toda floja, la aguenté le quité el bocado le puse el collar y la dejé que cayera ya al suelo.

Quedó de rodillas me arrodillé frente a ella, le saqué una de sus tetas fuera del corsé despues la otra y le dí con mi mano de abajo arriba a la gorda teta ella gimió de placer, le dí as fuerte a la otra di un gritito, empecé a darle a una y otra sin ella dejar de roncamente dar gritos y quejidos paré y le cogí los pezones los dos uno con cada mano empecé a tirar ella giitaba sin haber pausa ahora pero sin decir que parara, me fuí levantando y ya de pie yo cogí su cabeza ella empezó a chuparmela, la cogí del pelo tirando hacia arriba cada vez mas fuerte ella chupando mas y mas, hasta que la quité de mi polla, así la senté en el sofá le quité las bragas y le metí mi polla, mis dos manos sentia el peso de sus dos fuertes piernas cogidas por i abriendola y follandola, fue increible apenas la follé empezó a correrse, apenas terminó, volvió a correrse de nuevo, terminó le saqué la polla, tiré de ella le costaba moverse su coño era un lago, me tiré en el suelo, queria ver su culazo moverse frente a mi, la hice sentarse en mi polla de espaldas a mi, empecé a follarla ella a moverse entre gemidos, mi polla estaba encharcadisima, de su coño, veia como le entraba mi verga y le salia casi toda, la dejaba mverse asi lentamente sacando casi toda mi verga de su coño y volviendo a entrar, sus gemidos pasaron a grititos, empecé a pegarle en sus nalgas a la vez ella se movio mas y mas hasta que empezó a correrse de nuevo, cayó hacia delante agotadisima, me quité le dí la vuelta en el suelo me puse encima seguí follandola empecé a decirle que era mi perrita que me iba a obedecer en todo, me iba ya a correr, lo hice con un enorme orgasmo y placer dando gritos encima de ella.

Quedó cansadisima, me marché, pero a las nueve de la noche volvi a quedar con ella solo que ahora al reves, es decir era yo quien quedaba como y cuando quisiera y ella me obedeceria, en la noche, seguí ahora mas humillandola que azotes pues estaba dolorida, la paseé como a una perra por toda su casa cogida de la correa, despues la follé y de nuevo se corría rapidamente, así seguimos desde este sábado, es una perra sumisa, es lo que le va, yo estoy como un niño con zapatos nuevos ante esto.