A LOS 15 EN UN SAUNA
Por pura curiosidad me tomo la libertad de ir a un baño o bath house en la CDMX el cual era dentro de un club deportivo, poco me esperaba que iba a disfrutar tanto..
Estaba en segundo de secundaría, acababa de regresar a vivir a la Ciudad de México después de casi 4 años en Querétaro viviendo con mi padre y su esposa. Yo regrese al iniciar la vacaciones de verano de cuando termine 1ro de secundaria y entre a un curso de verano, pero luego que entre a la escuela resulta que cada último viernes del mes no iría a la escuela debido a que había junta técnica de profesores y directivos, la primera vez fue algo bueno debido a que pude ir a la premier de una película con un amigo y sus padres, pero al siguiente mes fue cuando más me pegó, mi madre se fue a trabajar y por diversas cuestiones no podía llevarme con ella por cosas y tuve que quedarme en casa solo, adelanté mis tareas y me puse a ver la tv pero poco a poco fue llegando el aburrimiento y ya no sabía que hacer, no tenía una consola de videojuegos y los pocos que tenía en mi computadora ya me habían cansado, así que tome la decisión de meterme a internet a buscar que hacer y vi que muy cerca había un baño público en el cual daban clases y había alberca y gimnasio, además podías entrar a utilizarlos pagando una membresía o una cuota diaria (la cual era como de $10 USD ($200 mexicanos)) y dije “¿por qué no? Es un lugar cerca, no muy caro y podría nadar un rato o incluso hacer algún deporte”, preparé una maleta con algunas cosas y como a las 11 am emprendí camino, tuve que tomar un bus pero llegue en menos de 20 minutos, baje y pague mi entrada, pase a los vestidores y me cambie por unos pants bajo los cuales puse mi traje de baño, fue primero a hacer un poco de cardio y tome alguna que otra clase de taekowndo (que es una arte marcial que siempre me ha gustado practicar) y tras un rato quise meterme a jugar en la alberca para relajar los músculos y luego irme.
Regresé a los vestidores y me quite la playera y los pants, quedándome en mi traje de baño el cual era de licra y marcaba mis nalgas y mi bulto, sentí varias miradas en mi pero eso me prendió más que ponerme nervioso, por esas épocas comenzaba a estar seguro de mi sexualidad, sabía que me gustaban los hombre y mujeres pero llevaba ya varios años sin hacer nada porque no salía la oportunidad, pero ahora estaba rodeado de varios hombres, todos mayores que yo, mirándome de pies a cabeza, era un chico de 1.60, aun desarrollándome, con una pequeña pancita, pero fingí que no me daba cuenta y salí camino a la alberca sonrojado. Estuve en la alberca un rato nadando de lado a lado y lanzándome alguno que otro clavado, ya cuando salí, por ahí de las 2:30 pm, fui nuevamente al vestidor el cual ahora se veía un poco más vacío, muchos de los hombres que había visto hace un rato ya se habían ido y otros estaban haciendo deporte así que me sentí con más libertad, me quite el traje de baño y fui a las regaderas a enjuagarme totalmente desnudo, con una toalla colgada en el cuello, me fije que las regaderas eran sin separación ni cortina, por lo que podía ver a varios hombres desnudos, algunos con pijas pequeñas pero otro con erecciones duras y grandes, esos eran en los que clavaba mi mirada de manera discreta y causaban que yo comenzara a ver como me erectaba poco a poco, un de ellos se fijo en mi mientras me estaba enjabonando, era un señor como de 30 años el cual se vía como un Dios, tenia unos brazos fuertes al igual que sus gordas y gruesas piernas, un pecho enorme con unos abdominales de envidia, todo un Adonis que además tenía un miembro hermoso como de 18 cm el cual apenas comenzaba a despertar, no pude evitar quedarme embobado con ella y él se dio cuenta.
Comenzó a masturbarse discretamente y lento, incluso me llegó a lanza algún que otro beso discreto, yo no dejaba de verlo mientras me enjuagaba y me echaba shampoo para lavar mi cabello, el salió y me señas de que lo siguieras, caminando al fondo de las regaderas, yo lo segui de manera discreta para no levantar sospecha y evitar problemas si me veía otra persona que estuviera ahí. Al llegar al fondo pude ver que había otra división que iba un poco más al fondo, vi una puerta con un letrero que decía “cuarto de vapor”. Entré con mi toalla como costal ya que ahí dentro tenia mis cosas con las que me había bañado y busque un lugar en el que sentarme a disfrutar del vapor, pero este provocaba que la vista del lugar fuera un poco complicado caminar de manera segura sin empujar a alguien o tropezarte con algún escalón, me senté en el primer lugar que vi con mis nalguitas rodillas pegadas en mi pecho dejando mi miembro y mi culo a la vista, era mucho el calor que sentía y tenía palpitaciones en mi pito y mi culo por la calentura de ese vapor y de la nada vi a una sombra comenzar a acercarse a mí, cuando llego vi que era el señor con el que había estado intercambiando miradas en las regaderas, se sentó justo junto a mi haciendo que su pierna rozara la mía, yo estaba sumamente nervios y el lo sabia pero por alguna razón le gustaba, comenzó a platicarme de él, se llamaba Guadalupe, tenía 34 años y venía con su familia una vez a la semana a que sus dos hijas (una de 13 y otra de 6) vinieran a hacer ejercicio y tomar la clase de natación, mientras tanto su esposa se la pasaba matándose en las pesas y caminadoras para conservar su figura deliciosa y que el estaba en las clases de artes marciales mixtas, la plática siguió con el haciéndome preguntas obre mi nombre, mi edad, en donde estudiaba, etc, preguntas que respondí sin problema pero lo que no me había caído en cuenta era que con cada pregunta y comentario se iba acercando mucho más a mí, hasta que su brazo izquierdo quedo sobre mi hombro luego tomo mi pierna derecha y la puso sobre las suyas dejándome vulnerable y a la vista mi tremenda erección que para mi edad era de 16 cm, sentí como clavo su vista en mi mientras acariciaba la pierna que me había tomada subiendo sus manos por mis muslos rozando mi nies y mis huevos, yo trataba de gemir pero no podía emitir ningún sonido, además de que estaba comenzando a disfrutar esas caricias suaves, más aquella que me dio cuando me tomo de la cintura y, levantándome con suma facilidad, me puso sobre su cara metiendo mi pene en su boca, yo solté un pujido que fácilmente se escuchó, de hecho mucha gente comenzaba a salir para evitar el momento incomodo y otros comenzaban a poner atención, yo sentía como si esa mamada me estuviera llevando al cielo y cuando se canso de mi verga solo tuvo que moverse un poco y su boca quedo directo en mi culito el cual comenzó a comer y devorar provocándome gemidos que trata desde lo más profunde de mi ser que no se escucharan, pero algunas veces me era imposible, estaba haciéndolo delicioso y quería mucho más y se lo hice saber, le pedí que me bajara, me acomode mientras nos besábamos y le deje mis pernas en sus hombros, ya sabía como era esa verga, el siguió mamandome el culo un poco y luego comenzó a meterme un dedo por mi dilatado ano, mi pequeño gemido de sorpresa fue callado por su miembro entrando en mi boca de manera lenta pero sagaz, incluso llegando al tope de mi garganta logrando así callar los gemidos que me provocaba con el constante jugueteo de sus dedos en mi culo.
Cuando ya pensó que todo estaba listo y confirmándolo con los tres dedos que me estaba metiendo y sacando prosiguió a detener con el jugueteo y empezar con el plato principal, puso mis pernas en sus hombre y poco a poco se fue inclinando cada vez más hacia a mi hasta que estuvimos frente a frente, llevó la punta de su verga a la mi ano y dio un pequeño empujón que debido a la dilatación previa no fue doloroso
¿?: Se nota que ya has hecho estas cosas antes- dijo mientras me daba besos en los labios y el cuello, mientras tanto empujaba poco a poco su verga para que fuera entrando provocándome gemidos que eran callados por sus besos, se levanto sacando lentamente su verga de mi culo y tomo algo de su mochila -ya logre que cedieras y está comenzando a abrirse, con esto que te voy a poner vas a disfrutar muchísimo- me puso una crema en mi culo abierto y en su verga, poco a poco comencé a sentir una calenturilla en mi ano la cual se fue extendiendo por todas mis entrañas y hacían que mi verga palpitara como loca y lo mismo le estaba pasando a aquel señor que me tomo de la cintura y, sentándose me fue dejando caer en su verga para que yo fuera quien lo cabalgara -lo vamos a disfrutar y te voy a llenar tu culito de leche- me dijo mientras iba empujando mi cadera hacia abajo haciendo que poco a poco esa gruesa verga de 18 cm fuera entrando en ms entrañas y como seguíamos besándonos mi gemidos no se podían escuchar, lo que si es que sentía que mucha gente comenzaba a rodearnos, algunos solo para ver como comenzaba a cabalgar esa verga mientras hacia círculos con mi cadera, sino también para masturbarse o ya directamente ver si era posible que también se las mamara a ellos, el señor que me estaba cogiendo solo me miraba -se nota que te gusta ser una putita, te voy a llenar el culo de mecos hasta que supliques por más-
M: Si papi- le dije sacándome la verga de un señor que me había hecho comenzar a mamar mientras me tocaba el culo y acariciaba los huevos de mi macho quien al parecer se veía bastante excitado con la situación. Yo seguí cabalgando ese largo y grueso miembro mientras mamaba algunos otros más hasta que mi macho comenzó a acelerar sus embestidas y me dejo ir 3 chorros espesos de mecos en el culo
¿?: Ufffff, que rico te acabo de llenar el culito- dijo mientras hacía que me pusiera en 4 a la vista de todos -¿alguien más quiere probar?- le dijo a la audiencia, entonces se acerco el señor que hace poco me estaba obligando a mamársela, el primero procedió a comerse mi culo de la manera más goloso, como si buscara sacar los restos de semen del primer macho que me había preñado, yo solo gemía como loco, pero un chico (entre 16 y 20) se acercó a mi con su miembro erecto y con una sonrisa lo acercó a mi boca, sin pensarlo ni un segundo lo tome de las nalgas y lo acerqué para poder comenzar a mamarle ese delicioso miembro blanco, con unos huevos colgantes y sin un bello, coronado con una cabeza rosada y cuando estuvo dentro comenzó a mover sus caderas de adelanta hacía atrás haciendo la mamada más rápida y profunda, a veces bajaba la velocidad cuando veía que necesitaba respirar, mientras tanto mi culo seguía siendo comido por aquel señor quien tomó la decisión de dejar de hacer su chamba para poner la punta de su verga en mi entrada, era una verga de 18 cm, gruesa y cabezona la cual me había encantado mamar y se lo dije
¿?2: Entonces te va a gustas más esto- me dijo comenzando a empujar su gruesa cabeza en la entrada de mi culo, debido a la cogida previas y el semen que me habían dejado dentro fue mucho más fácil que entrara a la primera, estaba acostado boca arriba recibiendo esa verga y vi la figura del otro chavito que poco a poco iba bajando, poniendo su culo en mi boca obligándome a comenzar a mamárselo, el solo gemía y me pedía que le metiera más la lengua. El se encargaba de hacer movimientos circulares con su pelvis y de vez en cuando bajaba a mamármela lo cual sumado a las embestidas me estaba provocando muchísimo placer, en ese momento el chico que quito de encima de mi y se acomodó para que mi verga entrara en su culo
¿?3: Que rico se siente como cada centímetro de tu verga entra en mi ¿te gusta como se siente la verga de tu culo?- dijo mientras comenzaba a cabalgar sobre mi miembro, yo estaba en el cielo, recibía placer en mi culo y mi verga, era una delicia, pocos minutos después el señor que me estaba penetrando me inundo las entrañas de semen de la misma manera que lo había hecho el primero, tomo sus cosas y salió del vapor. El chico seguía cabalgando mi verga como desquiciado
M: ¿Cómo te llamas?- le dije entre gemidos y nalgas que le daba de vez en cuando
W: Willie, tengo 18 ¿y tu- me dijo dejando de cabalgar, pero manteniendo ciertos movimientos circulares que nos dejaban a ambos excitados
M: Mercury, tengo 15- le dije pellizcando una de sus nalgas, luego él se levantó sacándose poco a poco mi verga, se fue nuevamente detrás de mi y me puso son mis piernas en sus hombros y metió su verga de poco a poco, primero entro la cabeza la cual me provocó un gemido, al final del día era la tercera verga que me metía ese mismo día y conforme fue avanzando su penetración se iba acercando a mi para comenzar a besarme. Sus embestidas eran fuertes y yo solo me dedicaba a pedirle que me diera más y más duro, el me hizo caso y empujaba su verga tan profundo como podía hasta que se vino, sentí como su miembro se hinchaba y expulsaba toda su leche en mis entrañas, fuero 4 chorros que recibí gustoso al mismo tiempo que yo lanzaba mi propia venida. Ninguno se limpio, cada uno salió después de cierto tiempo directo a las regaderas y ambos nos quitamos los rastros de semen que teníamos encima, me vestí y vi que Willie se acerco a mi discretamente y me aventó un papel en la mochila, su numero de teléfono, pronto tendríamos que repetir,
Espero les haya gustado este relato, por favor no duden en mandarme sus comentarios a mi Telegram @MMMercury, este espacio lo quiero dedicar para todos ustedes mi queridos lectores que se toman el tiempo de mandarme un mensaje y contarme que les gustan mis relatos, no saben como me prende cuando me dice que se vienen tocándose con ellos, les mando un abrazo fuerte y sigan dándose placer, queridos. ALEHOP.
gran relato como sigue