EL DILEMA DE UN MILITAR 3 ( 15 Polvos en 3 días)

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
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Por la tarde en la finca…

Después de un día fuerte de trabajo en la finca por fin había llegado a casa a preparar algo y comer junto con Rafa, llegué a eso de las 3 de la tarde cuando sentí el chorro de agua fuerte que cae en la rudimentaria ducha, mi primito se estaba bañando, así que me dirigí hasta la cocina y preparé limonada.
Me senté en la mesa comedor que había dentro de la cocina y me saqué mis botas y la camisa para irme enfriando y así poder irme a bañar ya que estaba sudado y sucio, a los 5 minutos sale Rafita del baño envuelto desde los hombros con la toalla como si fuera una manta, le hablé desde la cocina mientras pasaba por el pasillo,

– ¡Hola primo!!, te aburriste en la casa?, ¿ya ves que acá no hay electricidad, en qué te entretuviste?
– Jajaja Alejo me asustaste tonto- diciendo esto corrió hacia la cocina y subiéndose sobre mi em abrazó por el cuello – ya llegaste, que bien primote, hoy me fui a bañar un rato a la alberca donde estuvimos ayer y después vine a comer algo de pan con leche y sintonicé la radio que hay afuera colgada y barrí toda la casa.

– Ah parcerito que bien, hacendoso me resultó el primito, bueno ahora me voy a bañar que estoy acalorado y después preparamos algo para comer.

– Uy si primo estas todo sudado, iuuu jajaja- pasando sus manos por mi brazo húmedo del sudor- mira yo estoy fresquito – bajó la toalla hasta la cintura y acercó mi cara a su pecho, y sí, estaba muy fresco y relajante.

Lo mandé entonces a vestirse, quería evitar situaciones como las pasadas, pues en medio de todo, mi conciencia por momentos volvía sólo a reprocharme el estar recordando con lujuria esos encuentros.
Rafa se negó con capricho mientras me abrazaba más fuerte, yo correspondí a su abrazo.

– Primote voy a colgarme a ti como un mico, no te voy a soltar- lo dijo riendo como para molestarme.

–
yo me reí y seguí con mi limonada, él me pidió un poco así que le serví un poco y nuevamente:

– Rafita ya bájate pues para poder quitarme el pantalón y poder bañarme.

– Jaja primo no puedes conmigo cargado como si fuera un mico?
– Si claro que si- como si fuera él muy pesado – pero estoy sucio y sudado y te vas a ensuciar con mi sudor.

– No importa es divertido tonto porque te estás enojando.

Solo me reí y me levanté con él “mico” colgado, no era molesto para mí, de hecho, con una mano lo ayudaba a sostener agarrándole las nalgas por encima de la toalla me desabroché el pantalón, lo dejé caer y con los pies terminé de sacarlos, quedé en mis boxers sueltos y me dirigí al baño.
Con el mico colgado claro está, así que ya a punto de entrar al baño me saqué los boxers, mi verga ya estaba algo morcillona por el calor y el contacto con el cuerpo de Rafa, asi que solté un momento a Rafa de donde lo estaba agarrando y él se descolgó un poco quedando en contanto con mi verga semierecta, mi primo tiró al piso la toalla y me dijo:

– Yo me tengo que bañar de nuevo, ya me ensuciaste todo.

– Está bien.

Diciendo esto mi verga se puso a mil, y se incrustó firme punzando en medio de esas nalguitas limpias y blanquitas, este mariquita así, tan pequeño, a sus 11 años ya sabía cómo ponerme así.

– Parce se despertó el dragón – le dije con una sonrisa, buscando su complicidad.

Así que elevando el cuerpo del niño para que sus nalgas dejaran de ser punzadas por mi babeante falo tuve que agarrar de nuevo su culo, esta vez sin toalla que separara el tacto así que un poco dudoso me atreví a estrujar un poco ese trasero que había catado hace apenas unas horas por segunda vez en mi pervertida aventura que ya estaba más que iniciada.
Aferrándose con sus delgados bracitos a mi cuello Rafa iba respondiendo con movimientos al estrujón que le daba su primote.
Gimiendo con su cara entre mi cuello fue agarrando mi húmeda verga a punto de estallar y la ponía entre sus nalgas, lo fui dejando caer un poco para que pudiera ponerla él mismo donde quería, tenía tanto precum que mi verga empezó a puntear en su hoyito y poco a poco Rafa fue siendo ensartado por mis 22 cms de buena estaca, el aire le falto por unos instantes ante la sorpresa de tremenda intromisión, no era para menos pues siendo honesto era un grueso pollón metido por la cola de un mocoso de 11 años.
Sin embargo, yo le metía nada más lo que podía asegurar que Rafita no chillara por el dolor pues hace unas horas se la había tragado toda, debía estar adolorido.
Sólo quince centímetros eran enterrados en la cueva anal de Rafa.

-Más más más más Alejo más dame más por faaaavooor… más me gusta eeeeeesteeeee juegooooo queeee me enseñaaaaaas!!!- pedía Rafa a su semental.

-Argh más quieres? Si ya me tienes una buenaaaaa porción en tu tragooooon culoooooo quee tieeenes!! –jadeé fuerte sabiendo que nadie nos escuchaba.

Meneando el culo Rafa por puro instinto de adelante hacia atrás como sabía que me gustaba que hiciera, caminé con mi primo ensartado a media verga y me senté sobre el tronco que servía de banca justo en el pasillo de la casa pues el baño quedaba por fuera de la casa, mi primito con sus manos retiró las mías de sus nalgas que lo sostenían para que no le entrara más de mi verga y las usaba para sostenerse mientras con sus pies apoyados también en la banca de madera arqueaba su cuerpo como una C para poder ver como iba enterrado toda mi verga , mi rostro fue cambiando.
Rafa sonrió por las muecas que yo hacía, apretando su boca para no gemir.
Le gustaba acariciar mi pecho, le gustaba sentir como su primote se apoderaba de sus entrañas, de cómo jugaba con ellas olvidándome a veces que era mi primito con el que estaba follando, apretaba bien fuerte ese par de pompas blancas que me volvían loco, el conducto anal del mocoso era tan estrecho hasta rayar la locura.

-No parcero que putica que sos…como me aprietas la verga…Argh dale menea ese culito, dale trágame el pollón …!!!-

-Ah como te siento bien dentroooo de mi primo…!!!- ocultando su cara en el hueco de mi cuello.

Gimiendo ambos con locura con Rafa cabalgando en el pasillo de la casa, fui sosteniendo el pequeño cuerpo de Rafa que no era nada pesado para mí, a comparación de los bultos y equipos militares además de las pesasnque levantaba para formar mis músculos, el pendejito era más que una pluma entre mis brazos.

Plas plas plas plas plas plas plas sonidos del golpeteo de mi tronco metido en el culito de Rafa…

-Así que rico Rafa… como te siento… como siento tu estrecho anito…sientes a tu primote en tu ano abierto? – le solté entonces una nalgada en su pompis.

-Ah Ha Ah Ha Ha Ah Seeeeh si como te siento primo, mira cómo te siento tan dentro- haciendo fuerza sobre humana Rafa colocó mi mano sobre su dilatado ano para que sintiera como desaparecía mi verga dentro de su estrecho ano.

-Aja ah si como lo siento, no te lastimó parcerito?- solté al aire la pregunta pero ni siquiera esperé la respuesta del chiquito pues lo levanté cargándolo de sus posaderas y le saqué mi verga de su culo poniéndolo de pie en el piso, mi primo me miró como extrañado y me senté mejor en la banca y le pedí que diera vuelta, él lo hizo y contemplé toda esa deliciosa retaguardia que tragona era, puse mucha saliva sobre su ano y le pedí que se sentara de nuevo dándome la espalda.

En esa nueva posición el chico me permitía ver como se iba comiendo centímetro a centímetro mi grueso pollón.
Hacia más fácil en esa posición entrar en ese estrecho culito.
En el momento de ir metiendo el glande ambos soltamos un gemido de placer, sólo era el principio de algo muy grande mi primito fue dando sentadas sobre mi verga.
Fuí dando las últimas coleteadas al ritmo de las sentadas de Rafa hasta que no aguanté más y agarrando sus caderas empecé a embestirlo para oír esa vocecita juvenil soltar gemidos sensuales.
Ya llegando al punto donde tenía el calor en los huevos fuí sacando del crio mi palpitante tronco.

-Rafa prepara tu boquita.
– le dije sin explicar

Rafa sin entender me miró mientras lo ponía muy de cerca mi mojada verga.
No le expliqué hasta poner su carita cerca.
Ahí fue donde Rafita me preguntó pero no tuve tiempo pues le solté seis trallazos de mi lefa caliente y viscosa a la cara; con un grito le dije: “Abre la boca ahí va tu premio primito “

Sin más Rafita abrió su boquita en la que cayeron dos disparos de mi corrida, lamiendo fue degustando el sabor de lo que tragó poniendo los ojitos bizcos.

Sosteniendo por los hombros a Rafita yo, el dueño de esa macana que aún seguía dura con su punta aun chorreando babas solté un bocado de aire caliente.
Exaltado por lo que acaba de pasar me dejé caer en la banca para descansar.

-Peque me has dejado exhausto… que gonorrea, que aguante tienes… así ni una vieja me aguanta tanto…- nos fuimos a bañar entonces.

Luego del baño…

Almorzamos, hice un poco de ejercicio, y fuimos con Rafa a montar a caballo, mi primo por ser un niño de ciudad nunca ha montado caballo, así que iba montado conmigo.

-Primo hoy como me prometiste en la tarde jugaremos más?

-Claro que si primito… jugaremos toda la noche, si es que me aguantas- dije riendo

-Pues claro que lo haré…soy un Vargas y tengo tu aguante primo- me respondió Rafa.

-Así hablamos los Vargas niño -.

-No primo no soy niño, ya soy grande… mira soy grande – mientras ponía sus brazos en forma de fisiculturista.

En el caminar del caballo mi verga y el rose del culo de Rafita la pusieron a mil, habíamos cabalgado rio abajo y ya estábamos en fincas de otros vecinos.

– Alejo no aguantaras mucho sin jugar verdad?

-Niño que cosas dices… no podemos “jugar” aquí mismo los vecinos pueden venir en cualquier momento por el camino.

Mientras nos quedamos en silencio pensaba en lo que había hecho ese mismo día, enculé a mi primito, el chiquillo que me había regalado el mejor polvo de mi vida.
También pensaba en la facilidad que me prendía con ese niño.
Sonreí por lo ocurrido, me acomodé la verga bien por el bóxer para que no rosara tan directamente con Rafa hasta que llegamos a la casa comimos algo y Rafa trajo una cobija a la sala, nos acostamos en la hamaca y Rafa se quitó la ropa diciendo que tenía calor, pero que si se salía de la cobija los mosquitos lo devoraban, eso si era cierto, yo hice lo mismo y quedamos desnudos atentos a escuchar un programa radial de miedo, hasta que nos quedamos dormidos.

Tenía al niño descansando sobre mi cuerpo mientras, Rafa estaba desnudo y mi verga había cobrado vida así que estaba punteando sin querer el huequito de mi primito, se fue despertando somnoliento por las descargas de placer que le recorrían por toda el área erógena, fue levantando su cuerpo para ir quedando poco a poco sentado sobre mi.

Al ir adentrándose al interior mi tronco.

-Mmmmmhh- yo gimiendo somnoliento

-Ay Ay como t-te siento primo- habló Rafita que se sostenía sentado con sus manos apoyadas en mis pectorales.

-Hmmmm Mmmmmm uuuuhs parce!!- gemí con los ojos cerrados pero con una mueca de satisfacción en el rostro perlado por las primeras gotas de esfuerzo.

-Hmmmm que rico, dale méteme tu vergota Alejo- incitandome con su meneo de caderas.

-Hmmmm…Tu lo pediste primito!! –agarrando con fuerza con ambas manos las caderas de Rafa y con mi pelvis levantando le metí mis 22 cm de un golpe, que causó un potente grito de mi primito.

El dolor y el escozor por la generosa polla que lo calaba el fondo, adaptado al intruso que le prendía su cola a Rafa da inició al choque de sus caderas contra mi pelvis, por ratos bajaba su carita para robarme besos.

Juntando las manos mias que estaban en sus caderas fue dando más de si hasta que mi primito levantando y bajando tan rápido como un experto, me hizo llenarlo de leche nuevamente.

Así después nos fuimos a acostar a la cama y amaneció, yo de nuevo a la rutina de ese día en la finca, llegué de nuevo a las 3 pm y mi primo estaba en la cocina con una camiseta de mi hermano que le quedaba muy grande sabía que quería jugar y al levantarle la camiseta veo que no tiene puesto nada debajo, había preparado limonada y me sirvió, mientras se agachó y me sacó las botas y me dijo que me quitara la camiseta porque estaba muy sudado, lo dejé en su juego, pues ya sabía cómo era.

– Primo ven te quito el pantalón para que estés fresco y te vayas a bañar- levanté mis caderas y dejé que quitara mis pantalones, seguí tomando mi limonada.

Se paró frente a mí y puso con timidez su mano en mi verga que estaba dormida y sudada, tomé una revista vieja que había por ahí en el comedor y me puse a leer mientras dejaba a Rafita en su juego.
Siento que la empieza a menear y me la pone a mil muy rápido lo deja acariciarla y untarla no se de que muevo un poco la revista para ver y está mi primo levantándose la camiseta grande, no lleva ropa interior, trato de seguir el juego, cuando siento como entre sus glúteos se metía mi grueso tronco, aún le sobraban algunos centímetros.

Levantando todo el cuerpecito del chiquillo para dejarlo caer de seco contra toda mi masculinidad, ya le daba sin compasión, sabía que le gustaba, emitiendo los dos un gemido sonoro que se esparció por toda la casa, mi primito fue dejando que tomara control de su cuerpo, se dedicó a sólo hacer gozar a su empotrador que le pegaba sin detenerse.

-AAAAH QUE BIEN SE SIENTE ESE CALDO QUE ME SUELTAS DENTRO ALEJO- me dijo apenas dejó de ser abrazado con tanta fuerza.

-JOOODER PIOJO COMO ME DEJAS CANSADO, ERES TODO UNA PUTITA DE CUIDADO, MIRA COMO LA TIENES A DENTRO- tocando con mis manos las sudadas nalgas, yendo un poco más bajo a la raja donde se perdía mi anatomía.

-No lo puedo evitar me encanta este “juego” que me estas enseñando primo- dando un meneo que iba moviendo el falo dentro suyo- Aparte me encanta la carita que pones cuando hago esto – le dio una oprimida al tallo que tenía dentro, causando como reacción un gruñido de mi parte.

-CARAJO!! –me gustó mucho la oprimida que me dio, y de una vez me hizo correr.

Levantando el cuerpo de Rafa y apartándolo de mi cuerpo, me levanté para ir recogiendo las prendas de ambos, noté que le escurría del culo a Rafa las descargas que le había depositado, cargo al niño no sin antes decirle al oído que apretara su cola para que no siguieran saliendo mis depósito.

Corriendo por el pasillo desnudo con la polla pringosa que igual escurría la leche que quedaba, cargué a Rafa de su cintura con un brazo brazo y con la otra mano cargaba las ropas y nos dirigimos al baño para limpiarnos.

Llevando su boquita hasta mi aparato que brinco de felicidad al ser tragado por la hambrienta boquita, con sólo el glande dentro de la mamona boca que le daba lengüetazos a su perineo como frenillo.

La pelvis se movía al compás de las manitas que continuaba masturbando mi verga con fuerza, jadeando con la cabeza para atrás y con los ojos cerrados fuí recibiendo una magistral mamada.

Pegando la cabecita de Rafa contra la pared le follé toda su boquita que soltaba babas, el agua caía sobre mí, una figura grande que usaba esa glotona boquita como un banco de esperma, con mis brazos apoyados en las losas de la pared descargué cuatro disparos más de leche.

…hora y media después…había ido en caballo hasta la tienda más cercana y compré unas cosas para comer y también algo de licor, realmente la estaba pasando muy bien con Rafita y quería estar más relajado y el licor ayudaba, bebí y bebí con música y mi primo se fue a bañar a la alberca rudimentaria, me acuesto en la cama un rato y rato después.

En la cama me encontraba sólo con unos bóxer holgados amarrillos y unas diez latas vacías de cerveza roncando.

Fue hasta las 07:01 pm que la puerta abrió Rafita paso por la habitación hasta situarse junto a la cama donde yo dormía, agarrando mi bóxer sudoroso y pringoso mi verga estaba a mil, asi que jugueteaba con ella y la chupaba mientras yo dormía, después separando sus nalgas por el mismo para hacer más fácil el camino que tenía que pasar mi grueso manubrio que le sacaba gemidos tan agudos.
Me fui entonces despertando al sentir como mi cabeza iba entrando a un lugar estrecho y húmedo, le di entonces una estrujada de culo.

-Vamos peque…ufff comienza a cabalgar en la montura que te preparó tu primote- de lleno le hice caer para que se follara una buena porción de mi gorda polla.

-ay ay que rico, como me gusta lo que me enseñas- dando una cabalgada para adelante y luego para atrás sobre el cuerpo que me estremecía y él arqueando su espalda y dejando su cuello expuesto para que yo le repartiera besos ahí.

-Hmmmm Alejo ahí.
Dame ahí duro primote!!- moviéndose más rápido de adelante hacia atrás para ir besando mi pecho mientras yo con la cabeza sobre la almohada descansaba.

Lo hice acostar boca abajo y de me puse tras él y le metí mi verga de una estocada

– Parcero OOOOhh, IRE CON TODO DESDE AHORA, SIEMPRE TE LA CLAVARË de un empujón- colocando una brazo en cada lado de la cabecera fuí dando culeadas duras, fuertes estocadas que hacían gemir a Rafita que continuaba abrazando fuerte la almohada ya babosa por sus lágrimas y babas.

Empujando más fuerte mi polla, ejerciendo fuerza contra la cabecita de mi primo para empujarlo hacia mí.
El sudor de mi cuerpo se iba dejando caer contra la piel de la espalda del marikita, tomando con mis manos las caderas del niño fuí dando las últimas estocadas que lo hicieron soltar la almohada y volteando su cara fue recibida por mis lujuriosos labios.

El olor a sexo era fuerte en la habitación, dejando caer mi cuerpo pesado sobre el pequeño cuerpecito que no pudo quejarse, me había regalado el más sabroso de los orgasmos hasta la fecha.

Con las manos aún en la cintura de Rafa, bufando como toro.

A la mañana siguiente!! Ya último día en la finca habíamos culiado mas de 15 veces en esos 3 días.
Con los rayos del sol que entraban por las ventanas de la habitación.

Y yo roncando agotado y escurrido con mis brazos y piernas estiradas por toda la cama, mi primo como un becerro dándome saltos sobre mi duro abdomen para despertarme yo con un abrazo a la cintura del piojo detuve los saltitos que me daba, con una mirada que le escaneé todo su cuerpecito, ensanchando en ambos rostros una sonrisa cómplice.

Pegando mi cara con la del chiquillo le solté un beso de lengua, las manitas como de pulpo tocaron toda mi piel a su disposición.
Hasta que le le dije que nos teníamos que levantar y él en tono timido dice:

– Que hago con tu leche que se me sale?- llevando mi mano hasta su raja babosa.

Se nme detuvo su corazón con la pregunta que me formuló el niño, mi polla se me comenzó a poner dura cuando la mano fue dejada en la raja pringada de mi leche.

Con mi temple de pura fuerza de voluntad, nada más pasé mi mano para sacarle un gemido a Rafa.

-Ya Rafa detente, no soy sensato cuando me imaginó el polvo anterior que me aguantaste como un campeón- nalgueando al niño

Nos fuimos entonces al baño y le dí una enjabonada minuciosa, le hice que pujara para que expulsara la leche que le había dado en la noche.

Le lavo los cabellos, su vientre, espalda, pompis, las piernas, y su carita.

De último lo seco y lo paro en la silla para que el alcanzara a lavarse los dientes.

Once de la mañana.

Ya para esa hora estábamos saliendo rumbo al pueblo y después rumbo a Medellín a dejar a mi primito, no obstante en cuando lo dejé donde mi tia y mientras ella bajó a comprar algo para el desayuno me metí al baño con Rafa le bajé los pantalones me ensalivé la polla y se la mandé de una estocada, ya estaba bastante acostumbrado al tamaño mi primo, gimió y ante la vista del espejo del baño y lo apresurado de la situación me hicieron venir de una vez, dejando a mi primito bien lleno de leche, llegó mi tía me despedí de ella y después de Rafa, le dije que se cuidara que no hiciera con otros chicos lo que hacía conmigo que eso era algo solo de los dos, un secreto de los dos, tdo quedaba en familia, continuará…