El me convitio en su putita
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Mi amiga Martha y yo, crecimos juntos en el mismo vecindario.
Asistimos a las mismas escuelas e incluso a la misma universidad y aunque estudiábamos cosas diferentes, nos seguíamos frecuentando.
Martha, con motivo de su cumpleaños, organizó una fiesta en su casa.
Entre los invitados había viejos amigos, como yo, compañeros de la Universidad y familiares, incluso amigos de su hermano Carlos, dos años mayor que nosotros.
La reunión transcurría de lo más normal, risas, bebidas, cantando, bailando, etc.
En un momento dado, me dirigí al baño de visitas, pero como este estaba ocupado subí, como tantas otras veces, al que está en la planta alta, justo al lado de la recamara de Marta.
Antes de entrar al baño, escuche los gemidos típicos de alguien teniendo sexo provenientes de la recamara de mi amiga.
Yo entre al baño, hice pipi y baje, pero decidí esperar al final de las escaleras para ver quien había estado teniendo sexo.
Después de esperar unos minutos, bajó Ricky, el primo de Marta, acompañado de George, un amigo de Carlos.
Era bastante obvio que George le había dado duro por el culo a Ricky, ya que George se veía bastante varonil y dominador, como todo un macho alfa, bastante guapo y de buen cuerpo.
Finalmente la fiesta terminó y todos nos fuimos.
Al lunes siguiente me topé con George en la cafetería de la Universidad.
Me armé de valor y fui a saludarlo con la intención de preguntarle por Ricky.
“Hola George, como estas…” un poco sorprendido me respondió: “Heey hola…! Bien y tu…? Tu eres amigo de Marta verdad…?” “Si…” Respondí yo.
“Me puedo sentar contigo…? Quiero pedirte algo…” “Si claro, dime.
” entonces le dije “Mira George, por casualidad escuche lo que tú y Ricky hacían en el cuarto de Marta durante su fiesta de cumpleaños…” George totalmente desconcertado me preguntó “Que fue lo que escuchaste…? No sé de qué estás hablando…” Entonces, bajando la voz le dije “No te preocupes, yo sé perfectamente lo que estaban haciendo ustedes dos; Lo que te quiero pedir, es que me invites a salir un fin de semana con Ricky.
La verdad tengo mucha curiosidad de estar con un chico como el…” Luego de un rato, me pidió que guardara el secreto y acordamos salir los tres el fin de semana próximo.
Al siguiente sábado, luego de un par de cervezas en el bar, nos fuimos al motel.
Hasta ese momento la actitud de Ricky era la de un chico totalmente normal, pero todo cambió cuando estuvimos los tres solos.
Ricky se transformó como si fuera una gatita en celo deseosa de tener sexo ardiente…
Nos desnudamos sin perder tiempo.
George y yo nos sentamos en el sofá y Ricky alternaba entre nosotros chupando a uno mientras masturbaba al otro.
Luego de un rato, me puse un condón y le di por el culo.
Mientras yo daba polla, Ricky, chupaba a George.
No tarde mucho en correrme, entonces Ricky se sentó al lado mío y ahora George le chupaba la polla a Ricky y al mismo tiempo le metía un dedito en el culo.
Luego Ricky gimiendo terminó en la boca de George y el a su vez, no dejó escapar ni una gota de su lechita, entonces, George se puso de pie delante de Ricky y se masturbó rápidamente hasta correrse en la cara y el pecho de Ricky.
Así terminó ese primer encuentro.
Después de algunas semanas, por casualidad, George y yo coincidimos en otra reunión.
Discretamente platicamos sobre aquel fin de semana con Ricky y al calor de la cervezas, nos excitamos, entonces George me dice…”vamos a buscar a Ricky que lo quiero follar…” Pero no lo encontramos, así que George me propone ir al mismo lugar, ver pornografía y masturbarnos juntos y yo acepté.
De nuevo en el Motel, nos desnudamos y comencemos a masturbarnos lentamente, de pronto George se inclina hacia mí con la intención de chuparme la polla y le dije…”pero que haces…!” y el respondió…”Relájate, cierra tus ojos e imagina que soy Ricky…” George es un experto en sexo oral, se tragaba lentamente toda mi polla hasta que su nariz llegaba hasta mi vientre.
Su mano subía y bajaba por mi pene duro al mismo tiempo que su boca y con la otra jugaba con mis testículos.
Poco a poco mi excitación fue creciendo y entonces muy despacio fue llevando un dedo ensalivado hasta mi culito virgen y con mucha delicadeza lo fue metiendo hasta el fondo.
Yo gemía de placer.
De pronto, George me miro a los ojos y con una mirada de lujuria me preguntó…”Te gusta…?” y yo respondí entre gemidos… “si, me encanta…” “Te gusta tener mi dedo en tu culito…?” “Si, eso también me gusta mucho…”
Sabiendo esto, George comenzó a disminuir el ritmo en el que me estaba dando sexo oral hasta que dejo de hacerlo por completo, ahora solo me masturbaba.
Me daba dos o tres tirones a mi pene y luego mantenía su mano en la base.
Todo eso con su dedo penetrando mi ano.
Luego me dijo… “Dime cuando te vayas a correr…” “ahyy si George…yo te digo…mmm que rico…” Ahora su mano permanecía inmóvil alrededor de mi pene y la otra mano penetraba mi culito con más firmeza.
Pronto comencé a sentir los espasmos próximos a la orgasmo y entre gemidos le dije a George…”ayy…mmmm me corro, me corro…mmmm…” y entonces, metió dos dedos en mi culo y casi al instante comencé a correrme de una manera deliciosa sintiendo sus dedos penetrando mi ano.
George se tragó todo mi lechita justo como lo había hecho con Ricky, y luego se paro frente a mí y en pocos segundos, se corrió en mi rostro y en mi pecho.
Quede muy sorprendido de todo lo que había pasado.
Fue muy evidente que a pesar de que George me había chupado, en realidad el había controlado la situación demostrando ser el macho alfa entre nosotros.
De camino a casa, George me dijo…”Me gusto mucho estar contigo… y me encantaría hacerlo de nuevo…” Un poco inseguro, respondí que si…”
Al siguiente fin de semana, pasó en su automóvil a mi casa, me invitó a cenar y luego al bar.
George me trató como si yo fuera un príncipe, haciéndome sentir muy bien.
Era como si tuviéramos una cita entre un chico y una chica.
Luego fuimos al Motel.
Ahí, todo comenzó como la primera vez que estuvimos juntos, solo que ahora George parecía tomar un roll más de macho alfa.
Me abrazo por la espalda pegando su pene a mis nalgas y al mismo tiempo jugaba con mi pene, luego me dio un par de nalgadas.
Cuando comenzó a chuparme, me decía cosas como “Te gusta cómo te chupo chiquita…?” “Estas bien rica…” “tienes un culo hermoso mamita y quiero tenerlo…”
Entonces me dijo…
“Voltéate y ponte de perrito…”
“Me quieres coger George…?”
“Por supuesto chiquito…”
“Pero me va doler…!”
“Solo al principio, pero luego te va a encantar…!”
“Me prometes que vas a ser delicado…?”
“Claro chiquito, además traigo lubricante.
Ponte un poco en tu culo…!”
Mientras me ponía el lubricante, George me decía cosas como “Uyy que rico culo mamita…” Luego me tomó por las caderas y acercó su pene justo entre mis nalgas y lo movía de arriba abajo y me decía…
”Te gusta…?”
“Si…”
Quieres que te coja bien rico chiquito…?”
“Si…”
Y entonces tomó su miembro y poco a poco le fue metiendo en mi culito hasta que estuvo hasta el fondo.
Al principio, dolió un poco, pero George en lugar de arremeter se mantuvo inmóvil dentro de mí, esperando a que mi ano se relajara.
Mientras tanto, me agarró el pene y jugaba con él.
Luego comencé a mover mis caderas y George me animaba diciendo…”Ahh si, así, mueve ese culo, como se ve que te está gustando…” No tardo mucho y comenzó a arremeter duro, yo me tuve que agarrar de la cama para no caerme.
George me daba también nalgadas y yo gemía de placer y dolor.
Después nos fuimos al sillón.
Me senté y apoye mis piernas en los hombros de George para que pudiera penetrarme.
Ahora arremetió duro, de un solo golpe, me penetro y yo gemía bien rico…”Ahhh oooh, mmm, siii, que rico…”
Luego agarró mi pene para darle unos tironcitos mientras me cogía bien rico y me dijo…”Dime cuando estés a punto de correrte…”
Ahhh…sii, me corro, me corro…” entonces soltó mi pene y siguió penetrándome hasta que alcance el orgasmo soltando mi leche.
Mi semen escurría por mi vientre hasta mis testículos y entonces George se retiro y comenzó a masturbarse hasta que terminó corriéndose cubriendo con su semen el mío como diciendo, yo soy tu macho alfa y tu mi putita.
A partir de entonces, soy la putita de George y me encanta serlo….
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