En el monte por una semana Cap.2

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por eduardolanister.
Luego de la comida caí me fui a acostar un rato estaba exhausto de la caminata y la cogida a Pedro, de vez en cuando tenía pequeñas erecciones momentáneas pues no podía sacarme de la mente el buen rato que había pasado. Llego por fin mi amigo y lo acompañe en la faena de limpiar y acomodar algunas cosas, Pedro se había marchado con su padre a otras labores su madre limpiando y ordenando y luis en el patio correteando y jugando con una llanta vieja, de vez en cuando lo miraba y no podía dejar de ver en él a Pedro, Luis se parecía mucho a Pedro la diferencia era en el cabello que Luis tenía mucho más corto también este era de piel más clara, el me ignoraba por completo estaba en lo suyo y yo la verdad disfrutaba solo verlo jugar (sin ningún tipo de pensamiento sexual)

Llego la noche y luego de ducharme y una buena cena mi amigo volvió a sacar una botella de licor (yo la verdad bebo muy poco) en cambio mi amigo bebería hasta quedar inconsciente, en ese lapso de tiempo reapareció Pedro me hizo unas señas que no entendí (seguramente por el licor) y yo asentí nada más y lo saludé. Acosté a mi amigo y me fui a mi pequeña habitación y me senté en la cama, los padres de Pedro y su hermanito ya no se sentían por ninguna parte, solo el sonido de aquellos montes y un sinfín de sonidos de insectos, ya estaba quedándome dormido cuando por la ventana salto Pedro, realmente me asuste y me levante de la cama, el se monto en mi cama y se saco su hermoso pene ya erecto, me dijo con voz baja y rápido: “chúpemela, chúpemela…” yo le dije también bajito: “Pedro no, mejor mañana nos vamos a tu escondite…” El insistía y yo, pues al ver esa hermosura en mi cama me le fui encima y le dije: “bueno pero rapidito” comencé a comerme ese manjar el agarraba mi cabeza y de repente se ponía todo su cuerpo rígido y me la empujaba mas a la boca y la dejaba así un rato mientras hacia ese sonido de placer que se hace con los dientes como un tragar de saliva, no me aguante y le baje el pantaloncillo que tenia y empujaba su pene a mi boca agarrando sus dos nalgas, cuando pude saque mi pene y me empecé a masturbar en un momento me levante y le dije: “bueno bebe ven que ahora te toca a ti chupármela a mi”

Cambio pedro la cara y comenzó a negármelo con la cara, yo le insistía hasta, deseaba ver su carita entre mis piernas pero él se negaba, entonces se volteo y me dijo: “métamela.. métamela” yo me lance encima de él pero la cama sonó un poco fuerte así que le dije que así no y lo baje de la cama me senté en una silla y le dije que se sentara sobre mi pene, así lo hizo poco a poco fui entrando de nuevo en ese culo de ensueño , mientras se la metía lo masturbaba a él, le encantaba tener mi palo dentro fue entonces que me acerque a su oído y le dije: “¿te gusta mucho? (el asistió con la cabeza) así como a ti te gusta que te claven a mí me gusta que me la chupen, si quieres que siga vas a tener que chupármela” creo que el alcohol y la excitación me hicieron decirle esas palabras , el no dijo nada solo comenzó a moverse más rápido y a gemir y respirara rápido pero muy bajito, eso me puso a mil y explote todo mi semen en sus entrañas, luego de unos cuantos espasmos fue que saque mi verga de su culito dilatado , aun con los pantaloncillos abajo se acostó en mi cama su pene tenia palpitaciones y a veces el tenia algunos espasmos se veía muy excitado.

Me acosté a su lado entonces Pedro me dijo en voz baja: “si quiere que se la chupen, mañana le busco a alguien que se la chupe” yo le dije: “¿pero quién? ¿Un amiguito tuyo? Me miro y hizo su ya típica mueca de sonrisa levanto sus pantalones y se marchó yo quedé tendido en la cama y así quedé dormido.

La mañana siguiente fue casi la misma rutina del día anterior con la excepción que las labores comenzaron tan pronto nos levantamos, ese día no vi ni a Pedro ni a su padre, luis como siempre en sus juego, luego del almuerzo mi amigo salió a visitar a un vecino (cada casa en ese lugar quedaba a unos 20 minutos de distancia a pie) yo me quede sentado viendo a luis jugar en algún momento termine jugando con el lanzándole una pelota, aun que luis se parecía mucho a Pedro yo no veía en el esa picardía que si note el primer día a Pedro, por lo que siempre lo vi como un chico inocente.

Esa noche Pedro no apareció yo supuse que estaba convenciendo a su amiguito para que “jugara” conmigo ya que supe, que había salido a otra casa del sector con su padre y en esa casa según escuche de su madre están unos niños que se la pasan jugando con Pedro en los montes, mi mente voló al acostarme y me hice una paja pensando en Pedro y esos niños teniendo sexo en el monte.

Aun era de madrugada cuando sentí algo era Pedro vi el reloj y eran las cuatro de la mañana, yo ya tenía una erección (siempre me levanto con una erección) puso su culito desnudo sin decir ni una palabra no hablamos, yo solo lo penetre con fuerza, de ladito, al fondo ya se escuchaban unos gallos, me descargue dentro de su culito ricamente, se levanto, subió sus pantalones y volvió a desaparecer por la ventana, yo me sentía en el cielo… (continuará)