FANTASIAS DE LA INFANCIA: El primo de Estados Unidos

Parte 2: Jose me chantajea Conforme fueron pasando los días Eithan y yo comenzábamos a descubrir nuestra sexualidad juntos, pero no éramos discretos y eso nos trajo consecuencias (o por lo menos a mi).
Había pasado una semana desde que había llegado a Los Angeles juntos con mi padre y su esposa, nos quedaríamos en casa de unos familiares de esta. Desde los primeros días el más pequeño de mis primos (Eithan de 9 años) y yo comenzamos a tener roces sexuales e incluso ya le había mamado la verga un par de veces, a el casi no le gustaba hacerlo pero no me importaba tanto, la verdad disfrutaba mucho más mamar su delicioso penecito de 10 cm, grueso y coronado con una deliciosa cabecita rosada que era cubierta por un prepucio suavecito en el cual disfrutaba mucho meter mi lengua cuando se la mamaba para recolectar el poco esmegma que generaba por su edad el cual era salado pero con un olor muy tenue pero dulce.

Eithan tenía pocos días que había acabado la escuela y comenzábamos a desvelarnos más seguido viendo la televisión o jugando con sus juguetes, incluso alguna que otra ocasión llegábamos a usar la consola de Jose por las madrugadas. Uno de esos días en los que nos desvelamos jugando ya eran alrededor de la 1:30 am y Eithan comenzó a pegarse cada vez más a mi mientras estábamos concentrados en el juego. Ya era nuestra costumbre nocturna, alguno se pasaba a la cama del otro y se le pegaba al otro para comenzar a tocarlo, de ahí nos besábamos mientras tocábamos nuestros penes y, algunas veces, me pedía que le hiciera una mamada, otras solo nos tocábamos mutuamente, pero ambos lo disfrutábamos mucho. Regresando, Eithan comenzaba a pegárseme a mi y sin previo aviso me dio un beso en el cuello que me sacó un ligero gemido

E- Callate, si nos descubren nos podemos meter en problemas- me dijo poniendo su mano en mi boca, luego la fue bajando y comenzó a acariciar mi pecho suavemente, pellizcando suavemente mis pezones, yo gire un poco y le di un beso en los labios, él lo correspondió comenzando a juguetear con su lengua dentro de mi boca y su mano se fue a mi entrepierna y comenzó a acariciar el bulto que crecía entre mis piernas, dejo de besarme y bajo su cabeza a mi sexo para llevarlo a su boca provocando que mis ropas rozaran sobre mi miembro, tuve que llevar mis manos a mi boca para que no se escucharan mis gemidos, tras un momento así se detuvo y se puso de pie -hoy vamos a disfrutar mucho- me dijo susurrándome para luego bajar mis shorts con todo y mi ropa interior dejando mi pequeño penecito de 9 cm al aire totalmente duro y palpitando, sobre la puntita se podía ver una gotita tenue de presemen, Eithan solo me miraba y examinaba mi cuerpo -espero te guste- me dijo con una linda sonrisa y de la nada metió mi pene en su boca, no pude evitar soltar un gemido, trate que no se escuchara poniendo mis manos en mi boca pero creo de todos modos no fue discreto porque Eithan se separo y solo se me quedo viendo, luego se puso de pie y se fue, yo me quede sentado con mi verguita erecta al aire, pero me di cuenta al instante el porque Eithan se había ido.

J- ¿Qué le andabas haciendo a mi hermano?- Me pregunto Jose quien estaba parado en la pequeña puerta que separaba el pasillo de la casa con la sala donde estaba la televisión y la consola, yo estaba blanco del susto y Jose se fue acercando a mi tras cerrar la puerta, se sentó junto a mi y repitió su pregunta -¿Qué le estabas haciendo a mi hermano? Quiero que me digas la verdad

M- Yo no le estaba haciendo nada- le dije nervioso buscando la forma de escapar

J- ¿Crees que no se lo que te estaba haciendo? Tenias a mi pobre hermanito chupando tu verga- me dijo con un tono de enojo, estaba a punto de comenzar a llorar pero me calmo poniendo su mano en mi pierna desnuda -tranquilo, primito, no va a pasar nada, Eithan me ha contado todo lo que hacen ¿pero no querras que tus papas se enteren que estabas abusando de Eithan, verdad? Tienes que hacer algo por mi- sentí que su mano iba subiendo y comenzaba a acariciar mi entrepierna suavemente -¿Qué estas dispuesto a hacer?- me dijo susurrándome al oído, sabía la respuesta que quería, pero no quería hacerlo por lo que sentía por Eithan

M- No, Jose, no voy a hacer nada con nadie más que con Eithan- le dije en voz baja poniendo mi mano sobre la suya, el la quito y se me quedo viendo, su mirada me daba miedo, pero el solo se puso de pie y camino hacia la puerta, antes de abrirla volteo a verme

J- Fue justo lo que pensaba- abrió la puerta y dejo entrar a mi enamorado, luego cerro la puerta nuevamente con los tres adentro, yo me puse de pie y fui hacia Eithan ya con mi short puesto quien se me quedo viendo

E- Tranquilo primo, hay algo que tienes que saber, es cierto que le conte lo que hacíamos a Jose, pero es porque Jose fue quien me enseño todo lo que hemos hecho y no solo eso- Eithan bajo nuevamente mis shorts comenzó, ahora sí, a mamar mi verguita mientras su hermano solo observaba y se iba acercando a nosotros.

José tenía 16 años, medía alrededor de 1.70 cm, con un cuerpo marcado por el futbol americano y en esa ocasión solo estaba vestido con una playera de tirantes y un boxer delgado que dejaba a la vista un bulto que iba creciendo conforme se nos acercaba, yo estaba nuevamente en el sillón con Eithan entre mis piernas mamando mi pequeña verguita erecta mientras Jose se sentaba a mi lado observando lo que hacía su hermanito, yo solo me retorcía de placer con mis ojos cerrados tratando de no gemir pero me estaba siendo complicado, ahí fue donde Jose entro tomando y rostro y comenzando a besarme, pero el lo hacía diferente a Eithan, su lengua recorría el interior de mi boca suavemente mientras succionaba mis labios

J- ¿Te gusto?- me dijo separándose y mirándome a los ojos, ya no me daba miedo sino que veía una mirada provocativa que me calentaba, yo solo afirme con la cabeza mientras tomaba su cabeza para volvernos a besar, Eithan ya se había separado de mi verguita y ahora se encontraba jugando con la de su hermano por encima de su boxer, cuando la saco de esa prisión de tela mis ojos casi se salen de sus orbitas cuando vi aquel miembro

E- Ya extrañaba verlo- dijo Eithan antes de meterlo a su boca para comenzar a mamarlo, yo solo lo miraba sorprendido mientras sentía como Jose comenzaba a besar mi cuello, le quito uno de sus calcetines a su hermano y lo metió en mi boca para que mis gemidos no se escucharan, mientras tanto con su mano me masturbaba lentamente, podía escuchar el chacoteo que hacía la saliva de Eithan cada que la verga de su hermano entraba y salía de su boca

J- No seas envidioso y compartele a nuestro primo- le dijo Jose a su hermanito separándolo de su verga, luego saco el calcetin de mi boca y poco a poco me fue poniendo de rodillas para quedar entre sus piernas con su verga frente a mi cara, Eithan por un momento se acomodo y nuevamente le dio dos mamadas profundas para dejarla brillante frente a mi -¿Te gusta? Ya viste lo como lo hace Eithan ¿no te gustaría hacerlo tu?- me dijo tomando mi cabeza para mirarme a los ojos -si lo haces, te prometo que lo disfrutaras tanto como el- me dio un beso y me dejo ir, me quede observando su miembro un momento, era hermoso, medía fácilmente 18 cm y era bastante grueso (no cabía en mi mano), tenia pequeñas venas resaltadas en todo el tronco, estaba coronado con una gran cabeza rosada en forma de punta y tenia unos huevos enormes, además de que todo eso era coronado por una ligera matita de vellos.

Tras observarla simplemente la tome y le pase la lengua por todo el tronco hasta llegar a la cabecita para recoger alguna sobra de la saliva de Eithan quien veía eso sorprendido y con una sonrisa en su cara, luego fui metiendo la verga en mi boca para comenzar a darle una mamada a Jose quien gemia ligeramente mientras jugaba con sus pezones observándome, fue entonces que se me unió Eithan comiéndose los huevos de su hermano mientras mi cabeza subia y bajaba por todo ese meimbro que me parecía gigantesco, de ahí solamente me deje llevar, había ocasiones en las que mi boca se encontraba con la de Eithan y nos besábamos mientras seguíamos la mamada y Jose solo gemia

J- Sigan así, me vengo- dijo mientras su verga comenzaba a sacudirse y expulsaba su leche como un volcán en mi cara y la de su hermano, nos besamos compartiendo los restos de esta y Jose nos mando a limpiar -vallan a dormir, chicos, mañana seguiremos jugando- Eithan y yo nos quedamos viendo y nos fuimos a su cuarto donde nos estuvimos besando y tocando hasta que nos quedamos dormidos.

Espero que les haya gustado este relato, recuerden que pueden mandarme sus comentarios a mi Telegram @MMMercury, pronto les contare más experiencias.