FANTASIAS DE LA INFANCIA: Un campamento familiar II
Marcelo (17), mi hermano mayor (19) y yo (14) nos emborrachamos tras llegar a una casa vacacional en Morelos donde fuimos a pasar un fin de semana largo junto con el resto de la familia, ahí comenzaron a pasar cosas..
Tras haberme dejado abierto el culo con sus gruesos 17 cm de verga y lleno de su espesa leche, fuimos al cuarto al que nos correspondía -donde también dormía mi hermano, quien estaba desmayado por su estado de ebriedad-, yo vi la cama y debido a la combinación del cansancio del viaje y el mareo de la cerveza que me acababa de tomar me deje caer sobre la cama que estaba vacía, había otra que estaba vacía pero mi primo me dijo que esa era la en la que el quería dormir
M- No jodas, Marce, ahí una vacía ahí- le dije mirando como se comenzaba a desvestir, el se quedo en ropa interior e insistió en que me pasara a la otra cama pero seguí negándome, entonces solo me miro y sacudió su cabeza, luego se acostó en la misma cama que yo, se quedó mirándome a los ojos y de la nada me dijo
Ma- Esta me la debes
M- ¿Ah si? ¿y qué me vas a hacer?- le dije barriendo algunas palabras debido que lo ebrio que estaba en ese momento, además de que cerre mi frase con una sonrisa retadora, el solo me miraba y negaba con la cabeza y en menos de 5 minutos caí dormido.
Tras un rato en un sueño profundo una sensación extraña me fue despertando, lo primero de lo que me di cuenta era que estaba tapado hasta la cabeza y solo veía oscuridad, poco a poco sentí que una mano estaba acariciando mi pecho y el pecho de mi acompañante estaba recargado en mi espalda mientras restregaba su verga directo entre mis nalgas, era claro que mi primo quería un segundo round
M- ¿Así te vas a cobrar?- le dije, me separe de el para darme la vuelta y tome su verga, se sentía un poco más gruesa de lo que recordaba pero pensé que era su excitación, baje mi cabeza hasta llegar a su miembro y me lo metí a la boca sin pensar, su gemido sonaba diferente, eso me asustó y solo me quite la cobija de encima dejando que mi cuerpo y el de mi acompañante quedaran a la vista, pero como no había nada de luz en ese cuarto más que un pequeño destello de la luna el cual entraba por una pequeña ventana, quien estaba pasando su verga por mi culo no era mi primo Marcelo, sino mi hermano mayor, Alberto, 19 años, bastante delgado debido a problemas con el cristal pero en forma y con el cuerpo marcado, 1.69 de altura, el solo se me quedo viendo asustado y volteo a ver a Marcelo quien estaba viendo todo desde la cama en la que estaba durmiendo mi hermano totalmente desnudo.
Tras unos segundos solo volví a bajar mi cabeza para continuar el favor oral que le estaba haciendo a mi hermano mayor, la persona con la que más peleaba y la que (en ese momento) consideraba un enemigo, el solo tomo mi cabeza para dejarla pegada a su pelvis mientras comenzaba a mover su cadera cogiéndose mi boca y sacándome alguna arcada, mientras mi boca estaba ocupada Marcelo aprovecho que estaba en 4 y con mi culo en pompa para comenzar a comerme el culo sacándome un gemido que fue callado por la verga de mi hermano
A– Que rico lo haces, putito- me dijo mi hermano mientras seguía moviendo sus caderas para que su verga entrara y saliera de mi boca
Ma- Ahora tienes que probar esto- le dijo mi primo separándose de mi culo, mi hermano cambios su mano de estar en mi cabeza a pasar a la de Marcelo a quien lo enterraba entre mis nalgas para que me comiera el culo con más profundidad
A– Ya quiero probar tu culito- me dijo mi hermano mientras me apretaba las nalgas -Marcelo me dijo que te dejo bien llenito de leche y abierto
M- No pude evitarlo Mercury- dijo separando su cara de mi culo y pasando a ofrecerme su verga en la boca- no te preocupes peque, esto quedara entre nosotros
Mi hermano me saco su verga de la boca y fue directo a mamarme el culo, enterro toda su cara y movía su lengua por todos lados y la metía todo lo que podía, yo solo gemía en voz baja ya que en cerca de nuestro cuarto estaban algunas de mis primas y sobrinas, sentir la lengua de mi hermano pasar por todos los lados que podía me estaba provocando mucho placer, mi verga estaba super dura y palpitante con la cabecita goteando liquido preseminal, Marcelo la vio y comenzó a masturbarme mientras se la mamaba, luego se acostó y quedamos en un 69, yo comiéndome su verga y el mamando la mia y mis huevos, de vez en cuando juntaba su lengua con la de mi hermano en la entrada de mi culo, el sentir eso me estaba poniendo muy caliente y quería que mi hermano concluyera el trabajo y mis plegarias silenciosas fueron cumplidas cuando solo escuche que le dijo a Marcelo
A- Ayudame a acomodarlo- mi primo estando acostado me tomo de la cadera y me iba haciendo hacia atrás con ayuda de mi hermano sin parar de mamar mi pequeña verga adolescente de 15 cm, ya estando en la posición indicada sentí como la cabeza de la verga de Alberto comenzaba a hacer fuerza contra mi dilatado ano el cual la recibió sin resistencia comenzando así la penetración entre hermanos, entre el semen que me había dejado dentro Marcelo y gracias al beso negro que me habían dado ambos abrieron mi culo lo suficiente como para que su verga entrara sin problema por lo que su penetración era constante pero lenta, provocando en mi una sensación de placer continua.
Alberto tenía una verga más corta que Marcelo, le medía como 14 o 15 cm, pero era mucho más gruesa y con una ligera curvatura hacía abajo, por lo que aplastaba mi próstata, Marcelo continuaba mamando mi verga y debido a la penetración de mi hermano me vine en su boca sin poder avisarle, el se separo y se me quedo viendo con mi venida en su boca, miro a Alfredo y le planto un beso pasándole parte de mi semen
Ma- Que rico sabe tu hermano- le dijo a Alberto mientras este se tragaba la parte de mi venida que Marcelo que había dado
A- Y se siente mucho mejor- dijo empujando los centímetros de verga que aun no me habían invadido de golpe, por primera vez en mi vida tuve un orgasmo anal, mi culo se cerraba y se abría apretando la verga de mi hermano mientras mi verga se sacudía violentamente y mis piernas comenzaba a temblar
M- Ahhhhhhh- gemi contra la cama haciendo bastante ruido, con miedo Alberto se detuvo y Marcelo empujo mi cara contra el colchon
A- ¿Estas bien?- me pregunto Alberto susurrándome al oído, mi cadera comenzó a hacer círculos por si sola y levante mis brazos, los cuales se fueron al cuelo de Marcelo y comencé a besarlo de manera desesperada, mi hermano comenzó a mover sus caderas con un vaivén con su verga, podía sentir un bulto creciendo en mi estomago el cual algunas veces era visible, cuando Marcelo se dio cuenta comenzó a empujar ese punto con su mano mientras mi hermano continuaba su penetración lenta pero profunda, tenia su mano derecha en mi pubis el cual empujaba para penetrarme y la otra en mi pecho, deje de besar a mi primo y comencé a besar a mi hermano mayor, nuestras lenguas chocaban entre sí a la vista de Marcelo quien había sido el provocador de toda la situación, yo tenía ganas de una cosa solamente y se los dije
M- Haganme su puta, a la verga- continue besando a Alberto y me solté de su cuello dejando caer mi cuerpo en el colchon donde ya me esparaban los 17 cm de mi primo Marcelo los cuales comencé a mamar sin desperdiciar tiempo, ellos dos solo gemían y movían sus caderas mientras yo estaba ensartado por ambos, como si fuera un pollo rostizado, pero era una verga gruesa en mi culo y otra larga en mi boca. Tal vez ningún chico de 14 años estaría excitado por esta situación, pero yo era diferente y había tenido mis primeros acercamientos sexuales mucho antes de lo debido, sabía que eso era prohibido, los tres lo sabíamos, pero ahí estaban dos adultos y un puberto, todos desnudos, el mayor penetrando a su hermano y este mamando la verga de su primo, si nos hubieran descubierto no se que hubiera pasado y lo que estaba pasando en la realidad me estaba gustando mucho, el sentir la verga de Alberto entrar y salir de mi culo lentamente me encantaba, gemia lo que la verga de Marcelo me dejaba por la mamada que le estaba haciendo.
Tras 5 minutos así, mi hermano pidió cambiar de posición, Marcelo saco su verga de mi boca y ayudo a mi hermano a acomodarse para que yo quedara cabalgándolo sin necesidad de que tuviera que sacarme la polla, así que ahora estaba cabalgándolo a mi ritmo viendo a los ojos a Alberto pero Marce tapó mi vista poniendo su dura verga en mi cara para que se la mamara lo cual hice
A- Que rico te mueves- me dijo mi hermano tomando mi cadera -vamos a acelerar las cosas- dijo bajándome en su verga y haciéndome revotar en su pelvis mientras movía sus caderas, yo estaba en un éxtasis total sintiendo su verga y solo gemia en silencio -sigue así, sigue- me dijo acelerando más sus movimientos, sentí como su verga se engrosaba cada vez más y tras unas cuantas embestidas sentí como soltaba 4 fuertes chorros de semen hasta el fondo de mi ano, la sensación me hizo tener otro orgasmo anal y me desmaye.
Fui despertado por los rayos del Sol y me vi en la cama de aquel cuarto solo. Tapado con una ligera sabana, me levante y estaba vestido (por lo menos traía una playera y mi calzón), fui al baño para echar la primera meada del día y darme un baño ya que me sentía pegajoso por el sudor de la noche, ya desnudo me dí cuenta de que tenía algunos chupetones en el cuerpo, si bien no eran muy notorios se veían si ponías suficiente atención, ya bajo el chorro del agua y mientras pasaba la barra de jabón por mi cuerpo, al pasarlo por mi ano para limpiarlo lo sentí flojo y pude meter dos dedos sin problema soltando un gemido muy ligerito
¿?- ¿Está ocupado?- escuche preguntar a una voz gruesa, pero no sabía quién era
M- Me estoy bañando, si quieres pasa- le dije a la persona, en ningún momento saque esos dos dedos de mi culo, de hecho, los comencé a mover debido a que lo sentía lleno de leche, por un momento me puse a pensar en como se vería la parte trasera de mis calzones, escuchaba los pasos de quien había tocado y saque mi cabeza para poder ponerle una cara a la persona, era Jorge, uno de los tios y hermano mayor de mi papá, el papá de Marcelo, estaba con una playera blanca de tirantes y un short rojo con manchas grises, justo cuando deje mi cabeza a la vista vi como su miembro grueso y negro estaba en su mano mientras comenzaba a orinar
J- Correle, niño, ya desayunamos todos ¿Por qué te despertaste tan tarde?- me dijo mientras continuaba su meada y yo segui moviendo mis dedos dentro de mi culo jugando con la leche que me había dejado mi hermano dentro anoche, comenzaba a excitarme y tener una erección
M- ¿Pos que hora es?- le pregunte mientras seguía jugando con los dedos que tenia en mi culo y comenzaba a masturbarme, todo lo que había pasado en la noche, las dos cogidas que me habían dado y ahora estar jugando nuevamente con mi culo con mi tio meado al otro lado de la cortina me tenía loco. Mi inconsciente me hacía desear que abriera la cortina o incluso abrirla yo para que me viera cometiendo ese acto tan guarro, pero la parte coherente de mi cerebro fue la que actuó al final, saque mis dedos de mi culo y me incline un poco sobre la coladera dejando salir los restos de la leche de Alberto
J- Casi es medio día, tus primos están nadando, Marcelo y Alberto dijeron que te habías dormido tarde porque te había dado una cerveza- me dijo mi tio dejando de orinar, los huevos se me subieron a la garganta
M- ¿Qué más te contaron?- le pregunte, mis nervios se podían escuchar en mi voz y esperaba lo peor, quería llorar
J- Que te pusiste de hablador y que no paraste hasta que te quedaste dormido por la peda- me dijo riéndose, pude tranquilizarme un poco, segui inclinado viendo como salían los restos de lefa y de la nada lo vi abrir la cortina de la regadera debido a que me iba a pasar una toalla, no se si vio la leche que salía de mi culo pero si vio como este se abría y cerraba y mi verga erecta a más no poder, lo voltee a ver sorprendido y me levante rápidamente, el tenía su verga aun apuntando a la taza pero pude ver un poco, negra y gruesa cubierta con muchísimo pelo -ya sécate y baja para que estes con la familia- me dijo sonriéndome mientras yo cerraba la llave de la regadera.
Tome la toalla y el comenzó a guardar su verga sin dejar de mirarme, miraba mi erección sin pudor alguno, yo comencé a secarme y el salió del baño, no sin antes darme un pellizco en la nalga del cual por poco no me doy cuenta, mi erección palpitaba mucho más fuerte.
Espero que les haya gustado este relato, como siempre, ya saben que pueden mandarme sus comentarios a mi Telegram @MMMercury. Linda noche, amigos.
como continua