Herencia morbosa I.
Satisfechos con el sabor de su padre en sus paladares agarraron la cabeza de su progenitor y lo forzaron a arrodillarse, el adulto asintió orgulloso tomando las vergas de sus hijos, las masturbo un momento admirando los 15 cm que tenian..
Dos jóvenes atléticos de 14 años se tiraban un balón de fútbol americano en el interior de un coche, su padre conducía con una mano mientras con la otra acariciaba las suaves piernas de su hijo de 8 años, el chico jugaba con su celular ajeno a lo que hacía el adulto.
Con un fuerte golpe en la ventana el padre miró por el retrovisor a sus hijos.
«¡Guarden esa pelota de una vez!»exigió en tono duro, sus primogénitos aceptaron a regañadientes acomodando sus erecciones.
Pasada una hora llegaron a lo profundo de un bosque y se detuvieron en una cabaña cerca de un lago, bajaron sus cosas llevándolas a sus habitaciones.
Los adolescentes con sus cuerpos bien formados corrieron escaleras arriba en una competencia.
«¡Cuando terminen de acomodar sus cosas bajen de inmediato! ¡¿Entendido?!»grito el adulto, escucho una respuesta afirmativa de los jóvenes antes de desviar su atención a su pequeño retoño, le detuvo con una mano de golpear su cabeza contra la pared moviéndolo para que pasara por la entrada.
Guardando sus pertenencias en varias gavetas camino por los alrededores de la casa cerrando las puertas y cubriendo las ventanas, luego encendió las luces para mayor visibilidad.
Agarro el teléfono con el que jugaba su hijo menor y le ordenó que se sentará en uno de los sillones
El pequeño hizo caso con rapidez, luego exigió su videojuego de nuevo, entornando los ojos el mayor le entrego el aparato, después se quitó sus prendas quedando en ropa interior, en eso escucho los pasos de sus hijos bajar.
Su verga pálpito en sus boxers al ver como la figura masculina y definida de sus primogénitos se mostraba ante el, aquellos bíceps bien formados, pectorales a desarrollar, abdominales apenas visibles con vello en el pecho.
Mordió su labio estirando su cuerpo, los jóvenes admiraron su musculatura, desde sus grandes bíceps, los gruesos pectorales cubiertos de pelo, los abdominales definidos y su marca en V en la pelvis.
Se rasco el vello de las axilas y apretó su mano en su miembro erecto al percibir las miradas de hambre de sus primogénitos.
«Ahora que tengo su atención, empecemos con nuestro ritual de iniciación, chicos, como saben, mi familia ha traido por generaciones a los jóvenes de su edad para enseñarles dos cosas, a ser hombres y recordar sus orígenes, yo como su padre estoy a cargo de eso, me lleve a su hermano menor para que se acostumbre al proceso»confeso el mayor bajando sus boxers, luego caminó hasta el centro del cuarto.
Llamó a sus hijos y tomó sus manos posicionandolas en su pecho.
«Estoy orgulloso de tener a chicos como ustedes, he esperado desde que nacieron el poder hacer esto y me alegra saber que ustedes están de acuerdo»confeso el mayor con ojos brillantes. «¡Inicien con el ritual como lo practicamos!»ordenó el hombre apretando los glúteos de sus hijos, los gemelos asintieron acercando sus rostros a las axilas peludas de su padre.
Olieron su esencia de macho y lamieron la zona, con hambre devoraron cada vello sacando varios suspiros a su padre, sus manos acariciaban el cuerpo tonificado del adulto deleitándose con su piel caliente.
Gimieron gustosos cuando un sabor salado se impregnó en sus lenguas y respiraron hondo al percibir un hedor de afrodisíaco masculino.
Pegados al cuerpo de su progenitor restregaron sus miembros erectos en las piernas del adulto dejando líquido presiminal en sus musculos.
Sus voces llamaron la atención del pequeño quien detuvo lo que hacía para admirar a su familia unirse en una danza erótica, se quedó en silencio observando lo sucedido mientras un calor indescriptible recorría su cuerpo.
Satisfechos con el sabor de su padre en sus paladares agarraron la cabeza de su progenitor y lo forzaron a arrodillarse, el adulto asintió orgulloso tomando las vergas de sus hijos, las masturbo un momento admirando los 15 cm que tenian.
Con gula el adulto devoró el miembro de un de sus hijos sacándole un gemido ahogado, usando su mano izquierda masturbaba a su otro primogénito quien suspiraba de placer.
Intercalando entre cada pene el mayor disfruto del sabor de los adolescentes, teniendo una esencia entre lo amargo y salado.
Succionó cada líquido que salía de sus vergas hasta provocarles un orgasmo, luego se levantó sosteniendo su miembro erecto, este le media 7 pulgadas lo cual causaba respeto en los jóvenes.
«¡Continúen!»vocifero en tono ronco el hombre soltando un chorro de orina, sin sentirse asqueados los gemelos se dejaron bañar por el líquido amarillo el cual cayo en sus rostros, de ahí paso por todo su cuerpo hasta acariciar sus propios penes.
Gimieron gustosos sacando la lengua para saborear más.
Un gruñido provino del hombre fornido antes de salpicar los últimos restos de su orina en los jóvenes, después golpeó su verga en la cara de cada uno incitandoles a chuparla.
Mientras uno devoraba el glande y el tronco del miembro, otro lamía los testículos del adulto, suspiros roncos salían de los labios de su padre apretando sus pezones.
Con maestría los jóvenes intercalaron tareas para chupar la hombria de su progenitor.
Aquella verga venuda, de un grosor admirable, carne palpitante en rojo y un glande reluciente se libero en una lluvia de semen que mancho la cara de los adolescentes, ellos celebraron el logro devorando cada parte de la semilla hasta dejar seco al adulto.
Con el pene morcilloso su padre camino hasta donde estaba sentado su retoño y se inclinó hacia el, mientras se sostenía con el respaldo de brazos del sillon levantó su trasero a disposición de sus hijos.
«¡Dense gusto! ¡Se lo han ganado!»afirmó el hombre mirando con orgullo a sus primogénitos, los gemelos se empujaron en broma antes de decidir quién iría primero, el niño teniendo el rostro de su padre tan cerca le tocó la mejilla llamando su atención.
«Papi ¿Qué hacen? ¿Puedo unirme?»cuestionó el menor, negando con la cabeza el adulto beso la nariz del niño.
«Aún no cariño, cuando tengas la edad de tus hermanos lo harás, por ahora solo disfruta de la vista»contesto su padre sintiendo como una verga forzaba su entrada, cerró los ojos un momento relajando las paredes de su agujero, luego suspiro cuando tuvo toda la verga de uno de sus hijos dentro de el.
«¡Empiecen!» Exigió con la cara roja el mayor, sin perder el tiempo iniciaron las embestidas.
Gruñendo y gimiendo el adulto respiraba pesadamente en la cara de su hijo menor el cual se deleitó con las expresiones del adulto, con inocencia decidió replicar lo que hacía el adulto logrando sorprender a su padre.
Antes de siguiera decir algo los gemelos le hicieron cambiar de posición, uno de ellos se acostó en el suelo y su padre volvió a meterse su verga, luego el otro forzó su miembro en la ya ocupada entrada del mayor provocando que este apretara los dientes.
Cerrando los ojos y ahogando un gruñido el hombre se sumió en un nuevo placer, dos vergas entraban en su ano embistiendolo con dureza, los menores se movían con tanta energía que hacían temblar sus glúteos, su miembro erecto se agitaba en cada arremetida, la fricción de las dos carnes palpitante era un deleite para los menores.
«¡¿Eres nuestra puta, verdad papá?!» Exclamó uno de los gemelos.
«¡¿Te gusta que te empotremos como una hembra?! ¡¿Eso eres?! ¡¿Nuestra hembra?!» Gimió en voz alta el otro acelerando sus penetraciones.
«¡Sí! ¡Eso soy! ¡Denmelo todo hijos de puta!» grito el adulto perdido en placer, agarró su miembro empezando a masturbarse.
El niño observó la escena maravillado y dió varias palmadas cuando notó como su padre volvía a tirar su semilla, pronto le siguieron sus hermanos soltando resoplidos de satisfacción.
Con una sonrisa de oreja a oreja el padre tomó los rostros de los gemelos y los junto en un beso familiar, los labios de los tres intercalaban en una pasión carnal.
Se detuvieron cuando sintieron un cuerpo apegarse a sus piernas.
«¡Otra vez! ¡Quiero verlo otra vez!»pidió el niño, los mayores rieron acariciando la cabeza del menor.
Continuará…
Gracias por haber leído.
Mando saludos y agradecimientos a @Valkyre_jme por sugerirme la idea para este relato, es un placer el tenerte como lector, deseo te haya gustado tanto como a mí al escribirlo.
Si quieren charlar o sugerir ideas para futuros relatos pueden contactarme por Telegram.
Telegram: @AlexanderTL28.
Hasta pronto.
Guau, qué caliente relato.
ufff, de esos relatos, que desde el inicio sabes que sea bueno, y si, acabas con la verga dura de lo excitante y morboso que es… sigue así, espero con ansias la siguiente parte
Recaliente el cuento aunque… me hubiera gustado que los chicos se comieran el ojete de su padre antes de culearlo y que, luego, el menor chupara la leche de sus hermanos del culo peludo enlechado de su papi. Gracias
Excelente historia, gemelos, meados, un padre que recibe doble penetración… felicidades